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"Many are called, few are chosen...."

Let yourselves be counted among My disciples whom I train for their last activity on this earth. Again I choose fighters for Myself, I choose disciples for Myself to whom I can proclaim My gospel so that they will carry it out into the world. The end time has dawned, the time of harvest is coming, and much work is still to be done which I entrust to My disciples, to those who follow Me and allow themselves to be taught by Me of their own free will. These disciples of the end time have the same mission as My first disciples, whom I chose Myself according to their inner value, i.e., whom I recognized as willing and able to love and to whom I was therefore also able to send My spirit which continued to instruct them when I no longer lived on this earth. Every person is capable of love, but whether he is willing to love is determined by himself. The ability to love is My gift, the willingness to love is his merit.... And thus many are called but only a few are chosen.... These words of Mine are to be understood as I have explained them, that all people are able if only they want to, but that the willing are also the chosen ones whom I shower with grace. Nothing else shall My words mean, and never that I only grant grace to a few to belong to My own, while I deny it to the others. All people are called but not the devil's servants, for since I gave everyone the ability to develop love within himself, everyone can also shape himself into a receptacle for the spirit, and thus he is also chosen, yet this shaping of his soul is the work of free will. And if he does not use his ability to love his soul will never change and be suitable as a receptacle for the spirit. Then he certainly belongs to the called but not to the chosen, then not My will but only his will is decisive, then he is not a disciple of Mine, he does not follow Me and is not suitable for work at the end of time. What could you humans accomplish if you used your abilities properly.... My first disciples were full of the spirit when they went out into the world, they all developed their ability to love, they were all devoted to Me and followed My will in everything, and I chose them, I assigned their activity to them, I sent them out into the world so that they should report what they had partly received from Me on earth and partly received from My spirit. And they carried out My mission and taught.... they conveyed the pure truth to people, for their pure, loving nature prevented every misconception and misinterpretation. And as long as they spoke My teaching was pure and unadulterated. But it did not remain so, for people who came after them and in whom My spirit was not yet able to take effect presumed to have the same teaching authority, and the pure teaching was disfigured.... The disciples of the end time are chosen by Me again and are bearers of the pure truth according to their willingness to love. They, too, are to pass on the unadulterated truth to people and must therefore be enlightened by My spirit if they want to carry out their teaching ministry for people's blessing. The willingness to love makes them suitable disciples, whereas the ability to love does not yet guarantee their suitability for the teaching ministry. In order to be able to teach, they must first call knowledge their own; but the transmission of this knowledge is the result of a life of love without compulsion. You are all called, but who shapes himself in such a way that I can choose him, that I can pour out My spirit upon him, which guarantees purest truth? But I bless My disciples of the last days, for I only dwell with them in spirit, whereas My first disciples constantly had Me close to them, whereas I was constantly present to them and consequently it had to be easier for them to believe in Me than for the disciples of the last days, who have to awaken faith in Me within themselves and let it grow and who therefore find it far more difficult to believe and accept every word as truth. However, I will constantly stand by their side, even if not physically; yet I will always stay with them in spirit until the end, for I Myself have chosen them because I have recognized them and have known about their willingness to love since eternity....

Amen

"Muchos son los llamados, pocos los elegidos...."

Déjense contar entre mis discípulos a los que entreno para su última actividad en esta tierra. De nuevo elijo luchadores para Mí, elijo discípulos para Mí a los que pueda anunciar Mi Evangelio para que lo lleven al mundo. El tiempo del fin ha amanecido, el tiempo de la cosecha se acerca, y aún queda mucho trabajo por hacer que confío a mis discípulos, a los que me siguen y se dejan enseñar por mí por su propia voluntad. Estos discípulos de los últimos tiempos tienen la misma misión que Mis primeros discípulos, a los que Yo mismo elegí según su valor interior, es decir, a los que reconocí como dispuestos y capaces de amar y a los que, por lo tanto, también pude enviar Mi espíritu que siguió instruyéndolos cuando ya no vivía en esta tierra. Toda persona es capaz de amar, pero si está dispuesta a amar lo determina ella misma. La capacidad de amar es Mi regalo, la voluntad de amar es su mérito.... Y así muchos son llamados pero sólo unos pocos son elegidos.... Estas palabras Mías deben ser entendidas como las he explicado, que todas las personas son capaces si sólo quieren, pero que los dispuestos son también los elegidos a quienes derramo la gracia. No otra cosa significarán Mis palabras, y nunca que sólo concedo la gracia a unos pocos para que sean de los míos, mientras se la niego a los demás. Todos los hombres son llamados, pero no los que son siervos del diablo, pues como he dado a cada uno la capacidad de desarrollar el amor en su interior, cada uno puede también configurarse como receptáculo del espíritu, y así también es elegido, aunque esta configuración de su alma es obra del libre albedrío. Y si no utiliza su capacidad de amar, su alma nunca cambiará y nunca será adecuada como receptáculo del espíritu. Entonces pertenece ciertamente a los llamados pero no a los elegidos, entonces no es Mi voluntad sino sólo la suya la que es decisiva, entonces no es un discípulo Mío, no Me sigue y no es apto para trabajar al final de los tiempos. ¿Qué no podrían conseguir ustedes, los humanos, si utilizaran sus habilidades adecuadamente? Mis primeros discípulos estaban llenos del espíritu cuando salieron al mundo, todos desarrollaron su capacidad de amar, todos se dedicaron a Mí y siguieron Mi voluntad en todo, y Yo los elegí, les asigné su actividad, los envié al mundo para que informaran de lo que habían recibido en parte de Mí en la tierra y en parte de Mi espíritu. Y llevaron a cabo mi encargo y enseñaron.... transmitieron la verdad pura a la gente, ya que su naturaleza pura y amorosa impidió todo concepto erróneo y mala interpretación. Y mientras hablaban ellos mismos, mi enseñanza era pura y sin adulterar. Pero no permaneció así, ya que personas que vinieron después de ellos y en las que mi espíritu aún no podía surtir efecto, presumieron de tener la misma autoridad de enseñanza, y la enseñanza pura se desfiguró.... Los discípulos del final de los tiempos son elegidos de nuevo por Mí y correspondiendo a su voluntad de amar son portadores de la verdad pura. Ellos también deben transmitir la verdad no adulterada a la gente y, por lo tanto, deben ser iluminados por mi espíritu si quieren llevar a cabo su ministerio de enseñanza para la bendición de la gente. La voluntad de amar les hace discípulos idóneos, mientras que la capacidad de amar sola no garantiza todavía su idoneidad para el ministerio de la enseñanza. Para poder enseñar, primero deben hacer suyo un conocimiento; pero la transmisión de este conocimiento es el resultado de una vida de amor sin coacción. Todos están llamados, pero ¿quién se configura de tal manera que pueda elegirlo, que pueda derramar sobre él Mi espíritu, que garantiza la más pura verdad? Pero bendigo a Mis discípulos de los últimos días, porque sólo habito con ellos en espíritu, mientras que Mis primeros discípulos Me tenían constantemente cerca de ellos, Yo estaba constantemente presente para ellos y, en consecuencia, tenía que ser más fácil para ellos creer en Mí que para los discípulos de los últimos días, que tienen que despertar la fe en Mí dentro de sí mismos y dejarla crecer y que, por lo tanto, tienen mucha más dificultad para creer y aceptar cada Palabra como verdad. Sin embargo, estaré constantemente a su lado, aunque no físicamente; pero siempre permaneceré con ellos en espíritu hasta el final, porque Yo mismo los he elegido porque los he reconocido y he sabido de su voluntad de amar desde la eternidad....

Amén