Voi dovete ascoltare Me, e vi parlerò costantemente affinché possiate riconoscere anche il Mio Amore per voi. Tutto può e si modificherà intorno a voi, ma il Mio Amore per voi non cambia. V’insegue, sia che siate lontani che vicini e cerca continuamente di agire su di voi, cioè cerca di risvegliare in voi l’amore di rispondenza, cosa che significa poi definitivo ritorno da Me. E se posso parlarvi, quando Mi ascoltate, allora Mi aprite la porta del vostro cuore ed allora il Mio Amore può agire in piena Forza. Allora posso accendere un fuoco in voi che non può essere spento, perché il Mio Amore è così forte che nel suo ardore dissolve ogni resistenza, che prende possesso dell’uomo intero e che cambia totalmente la sua anima, lo trasforma in amore. Cerco il collegamento con voi, per questo vi parlo. Se ora voi Mi ascoltate volontariamente, allora anche voi stabilite il collegamento con Me, ed allora posso vivificare ciò che è morto. Vi posso dare la vera Vita, che prima siete ancora morti finché siete lontani da Me. Il Mio Discorso deve modificare lo stato di morte, perché il Mio Discorso è un Raggio d’Amore che vi deve risvegliare alla Vita. Se voi ora Mi date la possibilità di immettere il Mio Raggio d’Amore nel vostro cuore – se voi lo rendete possibile mediante volenteroso ascolto della Mia Parola, sentirete presto in voi un effetto: si sveglia in voi la consapevolezza di non essere più soli. Voi sentirete per così dire la Presenza del Mio Essere che vuole il vostro bene e voi vi darete a Me senza resistenza, perché questo è l’effetto del Mio Raggio d’Amore, che la resistenza in voi diminuisca, appena ho la possibilità di parlarvi e voi ascoltate le Mie Parole. E voi ascolterete sempre le Mie Parole quando vi recate per breve tempo nel silenzio, quando vi raccogliete nella preghiera o tenete silenziose osservazioni su voi stessi. Allora voi Mi date sempre occasione di parlarvi, benché inizialmente non riconoscete la Mia Voce, ma credete di riflettere soltanto voi stessi. Mi inserisco sempre nel vostro pensare perché il Mio Amore vi insegue ancora costantemente e cerca di afferrarvi sempre quando diventate silenziosi e rivolgete i vostri sguardi nell’interiore. Allora voi ascoltate ed Io posso parlarvi. E più v’esercitate in questo distacco dal mondo verso l’interiore, più pronti voi Mi aprite la porta del vostro cuore e più chiaramente percepite la Mia Voce, che vi da risposte a delle domande oppure v’insegna in modo che l’amore in voi s’infiammi per Me, perché allora voi Mi riconoscete come un Dio dell’Amore appena voi Mi ascoltate, appena voi praticate l’introspezione e rivolgete i vostri pensieri a Me. Voglio sempre parlare con voi, ma soltanto raramente voi MI ascoltate. Ma quando cercate la solitudine rivolgendo i vostri pensieri nell’interiore, allora percepite anche il Mio Discorso, benché voi sovente lo riconoscete come la Mia Espressione d’Amore, perché l’intelletto non afferra ancora ciò che l’anima ha già percepita o compresa. Ma il Mio Discorso diventa sempre di più l’incommensurabile benedizione per voi e tutti coloro che voi mettete a conoscenza di ciò, che il Padre parla con il Suo figlio, appena il figlio vuole sentire il Padre. E voi tutti potete stabilire questa unione con Me, voi tutti dovete soltanto ascoltare per sentire Me. Voglio soltanto stimolarvi di rendere acuto il vostro orecchio spirituale, di esercitarvi nell’ascolto del Discorso spirituale, ritirandovi sovente nel silenzio ed avendo nostalgia della Mia Presenza. Allora Io Sono con voi e vi parlo, allora Io Stesso vengo da voi nella Parola ed allora sapete che vi amo e che voglio anche conquistare il vostro amore.
Amen
TraduttoreDebéis escucharme a Mí, y siempre os hablaré de manera que también notáis mi Amor para con vosotros. Todo puede cambiar alrededor de vosotros - y también cambiará... Pero mi Amor a vosotros no cambiará, sino va a vuestro encuentro, y da lo mismo si os halláis cerca o lejos; pues continuamente procura influir en vosotros, es decir, despertar en vosotros el amor recíproco - lo que resulta en el regreso definitivo a Mí.
De modo que si os puedo hablar... si me escucháis y me abrís la puerta de vuestro corazón para que mi Amor pueda surtir efecto con plena Fuerza, entonces puedo encender en vosotros un Fuego que nunca ya se apagará, porque mi Amor es tan fuerte que en su Brasa cualquier resistencia se disuelve - es tan fuerte que se adueña de la entidad del hombre y le cambia del todo, pues convierte al hombre en amor...
Yo busco la conexión con vosotros, y por eso os dirijo la Palabra. Ahora escuchadme voluntariosamente, porque así también establecéis la conexión conmigo, y entonces Yo puedo reanimar lo muerto.
Os puedo dar la verdadera Vida - a los que de momento todavía estáis muertos mientras os halléis lejanos de Mí... Pues os dirijo mi Plática para cambiar este estado estéril, porque esta Plática es un Rayo de Amor que debe despertaros a la Vida. Si ahora me dais la ocasión de introducir mi Rayo de Amor en vuestro corazón –lo hacéis posible por escuchar mi Palabra voluntariosamente– pronto sentiréis su efecto en vuestro interior... pues despertará en vosotros la sensación de ya no estar solos... en cierto modo sentiréis la presencia de un Ser que quiere haceros el bien. Y os entregaréis a este Ser sin la menor resistencia.
Ahí se reconoce el efecto de mi Rayo de Amor: Donde tengo la ocasión de dirigiros mi Palabra y vosotros me escucháis, ahí la resistencia en vosotros disminuye. Siempre podréis escuchar a mis Palabras cuando durante un rato os retiráis al silencio, cuando os concentráis en la oración, o en todo silencio os contempláis a vosotros mismos; entonces es cuando me dais la ocasión de dirigiros la Palabra - aunque al comienzo no comprendáis mi Voz, pues os imagináis que vosotros mismos estáis pensando...
Siempre entro en vuestros pensamientos, dado que mi Amor os sigue continuamente y procura a abrazaros precisamente cuando entráis en silencio y dirigís vuestras miradas a vuestro interior. Entonces escucháis y Yo puedo hablaros. Y cuanto más conscientemente practicáis este alejamiento del mundo hacia vuestro interior, tanto más voluntariosamente me abrís la puerta de vuestro corazón, y tanto más claramente percibiréis mi Voz que os responde preguntas y que también os enseña... y que –si me escucháis, si sois introvertidos y dirigís vuestros pensamientos hacia Mí– enciende en vosotros el amor a Mí porque ahora me reconocéis como un Dios del Amor.
Siempre quiero hablar con vosotros, sólo que pocas veces me escucháis... Pero si buscáis la soledad, dirigiendo vuestros pensamientos hacia el interior, entonces también oiréis mi Plática - aunque no la reconozcáis en seguida como manifestación de Amor por mi parte, porque el intelecto aún no percibe lo que el alma ya ha notado o comprendido. Pero cada vez más consciente para vosotros mi Plática produce una indecible Bendición para vosotros y todos aquellos a los que informáis... que el Padre habla con su niño si este tan sólo quiere oírle.
Todos podéis establecer esta conexión conmigo, porque para oírme sólo tenéis que escuchar. Yo sólo quiero estimularos a que agucéis vuestro oído espiritual, a que os ejercitéis en escuchar Pláticas espirituales, a que frecuentemente entréis en silencio y anheléis mi Presencia. Entonces es cuando estoy con vosotros y os hablo... entonces, en la Palabra, Yo mismo vengo a vosotros... y entonces también sabéis que Yo os amo y que también quiero ganar vuestro amor...
Amén.
Traduttore