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Únicamente la oración protege ante la intervención del adversario

Cuanto más se acerca el final, tanto más violenta es la actividad del adversario; pues todos lo notaréis porque no pasará ni un sólo día en que no os inquiete, o que sentís su perfidia de otra manera. Ahí lo único que ayuda es rezar... uniros con Aquel que también es un Señor sobre el adversario, al que Él había vencido por su muerte en la cruz. Pero una oración íntima os devuelve la paz interior - la que el adversario os quiere quitar; porque si os dirigís a Mí, entonces su poder está quebrado, con mucho que se esfuerce a provocaros inquietud.

Las luchas contra él serán cada vez más vehementes, y él no dejará de acosaros... de modo que cada vez de nuevo Yo debo deciros que únicamente la oración os protege ante su actividad. Porque entonces me demostráis que me buscáis a Mí, y que queréis estar liberados de él. De modo que entonces también puedo aplicar mi Poder contra él pues puedo parar sus intervenciones porque así, mediante vuestra voluntad, vosotros mismos me dais el derecho sobre él.

En el tiempo final el adversario se pondrá más y más furioso, sin embargo, aún así no tendrá éxito ante los Míos, los que me anhelan íntimamente y que invocan mi Protección. Y, ¿a quienes iba Yo a proteger con más gusto que a aquellos que siempre quieren estar unidos conmigo, y que se han ofrecido a servirme? Sed conscientes de que Yo también tengo Poder sobre él... que no estáis expuestos indefensos a él... y que tendréis la fuerza para rechazar cualquiera de sus intervenciones.

Esta fuerza la debéis obtener de mi Palabra, pues siempre debéis abismaros en ella y habrá Luz alrededor de vosotros - la que él huye y así ya estaréis liberados de él. Ya no permitáis que el mundo os cautive, porque entonces él se introduce furtivamente y os seduce con sus bienes. Entonces también tendrá cierto poder sobre vosotros sin que os enteréis de esto porque os puede engañar. En este caso Yo no puedo venir para ayudaros porque vosotros mismos os dais a su mano, olvidándoos de Mí; por lo que tendréis que luchar mucho para conseguir vuestra conexión íntima conmigo. De modo que sólo entonces os daréis cuenta lo que significa el haberos soltado de Mí, porque una vez que el adversario posee algo, también lo agarra.

Pero Yo no dejo caer a nadie que me anhela seriamente - sólo que tendrá que luchar mucho para volver al grado en que se encontraba antes.

Por eso tened cuidado que el adversario no adquiera el poder sobre vosotros. Por eso, cuando os encontráis en apuros, ¡llamadme a Mí!, porque Yo siempre estaré dispuesto a ayudaros - si esta llamada viene del corazón. Pero no permitáis que el mundo se os imponga, porque entonces os atenderá aquel que es el señor de él... y entonces Yo no puedo sino esperar a que volváis a encontrar el camino de regreso a Mí...

Amén.

Soltanto la preghiera protegge dall’agire dell’avversario

Più si avvicina la fine, più veemente è l’agire del Mio avversario. E voi tutti lo sentirete, perché non passerà un giorno, in cui non sentirete irrequietudine, oppure percepirete la perfidia sotto diversi aspetti. E non serve a nulla se non altro che pregare, per collegarvi con Colui Che è anche il suo Padrone, Che lo ha vinto mediante la morte sulla Croce. Una intima preghiera vi restituisce la pace interiore, che lui vi vuole rubare. Perché se vi rivolgete a Me, allora il suo potere è spezzato, per quanto si sforzi, di precipitarvi nell’inquietudine. Le lotte con lui diventeranno sempre più veementi, perché lui non cede di opprimervi e vi devo sempre di nuovo dire, che soltanto la preghiera vi protegge dal suo agire. Perché allora voi dimostrate che cercate Me e che volete essere liberati da lui, ed allora posso anche impiegare la Mia Potenza contro di lui, posso impedirgli di continuare le sue oppressioni, perché Mi date poi attraverso la vostra volontà il diritto su di lui.

Nel tempo della fine il suo infuriare diventa sempre più veemente e ciònonostante non avrà successo presso i Miei, presso coloro che Mi desiderano in tutta l’intimità e Mi invocano per la Mia Protezione. E chi dovrei proteggere più volentieri dei Miei, che vorrebbero sempre essere uniti a Me e che si sono offerti al Mio servizio? Voi dovete soltanto credere, che ho anche Potenza su di lui, che non siete esposti a lui senza protezione e che avrete la forza, di difendervi da ogni suo intervento. E voi dovete prendere questa Forza dalle Mie Parole, vi dovete sempre immergere in questa Parola, e vi sarà Luce in voi, che lui però fugge e voi siete liberi da lui.

E non lasciatevi più catturare dal mondo, perché allora trova un punto per insinuarsi e vi tenta con i suoi beni. Allora ha anche un certo potere su di voi e voi non lo riconoscete, perché vi può ingannare. Ma allora non posso venire in vostro aiuto, perché vi date nelle sue mani e dimenticate Me ed allora dovrete combattere per il vostro intimo legame con Me soltanto allora verrete a sapere che cosa significa, di esservi staccati da Me, perché lui tiene stretto ciò che una volta possiede. Ma non lascio cadere nessuno che Mi desidera seriamente, soltanto dovrà combattere molto per raggiungere di nuovo quel gradino, dove era già una volta.

Guardatevi che l’avversario non ottiene il potere su di voi se Mi chiamate nella vostra miseria, perché Io Sono sempre pronto ad aiutarvi, quando questa chiamata viene dal cuore. Soltanto non lasciate prevalere il mondo su di voi, perché allora vi servirà colui che è signore del mondo ed allora Io posso soltanto attendere, finché ritrovate la via di ritorno da Me.

Amen