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A los que aman a Dios....

Para quienes aman a Dios, todo les saldrá para su bien. Pues Dios cuida especialmente de ellos, y si están destinados al sufrimiento, la tristeza o duros golpes del destino, Él usa estos medios solo para ayudar a sus almas a perfeccionarse. Y vosotros, los humanos, a menudo experimentaréis que precisamente aquellos seres humanos que se esfuerzan por llevar una vida que agrada a Dios son golpeados por la desgracia, y vosotros no podréis comprenderlo por qué deben sufrir y atormentarse tanto en la Tierra.... Pero vosotros tampoco conocéis el glorioso destino de aquellos después de su muerte.

“Lo que ningún ojo humano jamás haya visto y ningún oído humano jamás haya oído, lo he preparado para aquellos que Me aman....” Y para esta bienaventuranza, Dios quiere preparar el alma que le entrega su amor en la Tierra. Pues para entrar en la gloria eterna, el alma debe haber alcanzado cierto grado de madurez, es decir, tiene que ser pura y clara, tiene que haber desechado todas las impurezas que la impiden entrar en ese reino de gloria.

Solo muy rara vez un alma es tan perfecta que cualquier sufrimiento, cualquier medio de purificación, sea innecesario. Su profunda devoción a Dios y su amor por Él a menudo son recompensados por Él de una manera que vosotros, los humanos en la Tierra, no podéis comprender, al ayudar a través del sufrimiento y la necesidad donde el ser humano aún es demasiado débil. Pero en esto todos los afligidos de sufrimiento deberían reconocer un consuelo; que todo les conviene, siempre que “amen a Dios”. Y demuestran su amor a Dios a través de la humilde devoción a Él, a través de su voluntad de vivir con rectitud u justicia, y mediante del cumplimiento del mandamiento del amor al prójimo que también incluye el cumplimiento del amor a Dios.

Quien ama al prójimo como a sí mismo también mantiene una relación correcta con Dios, pues la fuerza de amor que actúa en él es la irradiación de Dios, que solo puede conmoverlo, porque ama a Dios. Por lo tanto, ningún sufrimiento le debería desanimar al ser humano que ya se ha entregado a Dios a través de su libre albedrío. Siempre debería verlo solo como una prueba del amor de Dios, Quien quiere ayudarlo a madurar todavía plenamente durante su breve vida terrenal, para que entonces también pueda bendecirlo de una manera inimaginable.

Y no dejéis que el peso de un golpe del destino os deprime ni os haga vacilar en la fe.... Porque incluso entonces, el amor y la sabiduría de Dios han sido decisivos, Él que sabe bien lo que aún os hace falta a cada uno, Que no hace ni permite que nada suceda arbitrariamente, sino que siempre sigue un plan que un día se presentará claramente ante vosotros cuando hayáis completado con éxito vuestra vida terrenal.

No debéis comparar el método de acción de Dios con el de un ser humano, pues aunque un ser humano sea bueno, todavía le falta la sabiduría suprema que determina todo lo que Dios permite que venga sobre él, una sabiduría basada únicamente en el amor de Dios. Y así Dios también reconoce el impacto que cualquier experiencia de un ser humano puede tener y busca lograr este impacto.... y con seguridad aumentará el estado de madurez del alma que Dios ama....

La vida terrenal sólo es corta, y a vosotros los humanos ya no os queda mucho tiempo para poder dejar la Tierra en un estado tan madurados que podáis ser colmados de glorias inconmensurables.... (05.10.1957) Y en vista de esto, Dios Mismo os ayuda creando oportunidades para vosotros en este corto tiempo en el que debéis y podéis probaros a vosotros mismos si aceptáis todo con devoción.... siempre en la creencia de que Dios sólo permite que os sobrevenga lo que es beneficioso para vosotros.

No debéis discutir ni murmurar, no debéis dudar de Su amor. Vuestro amor por Él debe permanecer constante mientras os sometéis a todo lo que recibís de la mano del Padre. Porque, sea Su voluntad o simplemente Su permiso.... siempre será beneficioso para la salvación de vuestras almas mientras permanezcáis entregados a Él con amor. De lo contrario, Sus Palabras carecerían de validez: “Ningún ojo humano ha visto jamás, ni ningún oído humano ha escuchado jamás, lo que Yo he preparado para los que Me aman....”. Su amor os asegura el cumplimiento de Su promesa, y si tenéis esta fe segura y firme, entonces también podéis soportarlo todo con facilidad, todo perderá su significado y su dureza, aunque al principio parezca tan difícil de soportar....

amén

Those who love God....

Those who love God will derive a benefit from everything. For God takes particularly good care of them, and if suffering and worries or harsh strokes of fate are granted to them, He will only ever use these means in order to help the soul become perfect. You humans will frequently experience that precisely those fellow human beings who make every effort to live a God-pleasing life are being afflicted by strokes of fate, and you cannot comprehend why they must suffer and struggle so much on earth.... But neither do you know about their glorious fate after their death. 'Eye has not seen, nor ear heard, nor have entered into the heart of man the things which I have prepared for those who love Me....' And God wants to prepare the soul which grants Him its love on earth for this bliss. For the soul must have reached a specific degree of maturity before it can enter the eternal splendour, that is, it must be clean and pure, it must have discarded all impurities which prevent it from entering this magnificent kingdom. Only rarely is a soul so perfected that it would need no suffering, no means of purification of any kind. Its heartfelt devotion of God and its love for Him will often be rewarded by Him in a way which you humans on earth, admittedly, cannot understand, whereby through suffering and adversity He helps where the human being himself is still too weak. Yet all those afflicted by suffering shall take comfort in the fact that everything will benefit their soul as long as they only 'love God'.... And they prove their love for God through humble devotion to Him, through their will to live correctly and righteously, and by fulfilling the commandment of love for their neighbour, which also incorporates the fulfilment of love for God. Anyone who loves the next person as himself has the right relationship with God, for his indwelling strength of love is God's emanation, which was only able to affect him because he loves God. No suffering should therefore dishearten that person who has already voluntarily handed himself over to God. He should only ever regard it as the evidence of God's love, Who wants to help him to still mature fully during the short time on earth, in order to then be able to provide him with an inconceivable measure of bliss. Do not allow the difficulties of a stroke of fate to depress you or make you waver in your faith.... For this, too, will have been determined by God's love and wisdom, Who certainly knows what the individual still requires, Who does nothing or lets nothing happen arbitrarily but always pursues a plan which, one day, will also be clearly presented to you when you have successfully completed your life on earth. You must not compare God's reign and activity to that of a human being's conduct, for even if a person is good, he nevertheless lacks the final wisdom which is always the decisive factor for everything that God inflicts upon a person, the wisdom which is only based on God's love. And thus God also realises the outcome a person's every experience can result in, and He aims to achieve this outcome.... And it will certainly raise the state of maturity of a soul which loves God.... Earthly life is only short and you humans do not have much time left in order to enable you to leave the Earth so matured that you can be granted glories beyond measure.... And in view of this, God Himself will help you by still providing you with opportunities to prove yourselves during this short time, which you can certainly do successfully if you humbly accept everything.... always believing God only allows for that to come upon you which is helpful for you. You should not quarrel and grumble, you should not doubt His love. Your love for Him must remain the same while you submit to everything you receive from the Father's hand. For regardless of whether it is His will or merely His permission.... it will always benefit the salvation of your souls as long as you remain inclined towards Him with love. Otherwise His Words 'Eye has not seen, nor ear heard, nor have entered into the heart of man the things which I have prepared for those who love Me....' would not be warranted. Your love ensures that His promise will be granted, and if you have this certain and firm faith, you will also endure everything with ease, everything will become less severe and significant, even if, in the beginning, it seems very difficult for you to bear....

Amen