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La filiación con Dios solo en la tierra.... El desarrollo en el más allá....

El proceso de la maduración se apoya siempre por parte de Dios, pero en el estado de voluntad libre lo espiritual también puede oponerse, y entonces la voluntad de Dios se pone en segunda línea y la voluntad del hombre decide. Si ahora la maduración del hombre no avanza o se va para atrás, la voluntad del hombre se ha opuesto frente los esfuerzos de Dios de ayudarle en su avance, y entonces lo espiritual del hombre, el alma, tiene que llevar las consecuencias.... un estado en el más allá, al cual está adaptado a lo espiritual poco madurado.... sin luz y sin fuerza. Rechazo contra Dios siempre termina en una falta de luz y fuerza, porque solo de Dios viene la luz y la fuerza y la oposición contra Dios siempre significa rechazo de Su flujo de amor. Este estado si se puede cambiar en el más allá, pero solo bajo de rendición del rechazo contra Dios, la aceptación voluntaria de lo que se le ofrece en el más allá, pero también sin forzamiento. Pero se ha dejado de lado una gran gracia divina en la tierra, su ayuda cariñosa fue rechazada y eso naturalmente tiene consecuencias que nunca se pueden eliminar del todo, si se puede conseguir una mejora del estado penoso en el más allá, pero nunca conseguir lo mismo que hubiera sido posible en la tierra.... la filiación con Dios.... Además tampoco es posible volver a la tierra para recuperar lo perdido.... La voluntad libre del hombre ha tomado una decisión en la tierra, y según se presenta la vida en el reino del más allá. Pero la gracia enorme y la misericordia de Dios ayuda a todos los seres a llegar a la bendición, y esta bendición es posible en grados muy diferentes, de hecho que la voluntad del ser siempre cuenta. Para poder llegar a un nivel más alto de la bendición una nueva encarnación en la tierra está prohibido, pero un alma puede pedir por una nueva encarnación, pero solo empujado por amor y una voluntad exorbitante de ayudar para llevar a cabo una misión de salvación de almas terrestres.... Como consecuencia se recibe también un nivel de maduración aumentando, pero esto se puede conseguir también por una vida muy difícil. Además el alma encarnada en la tierra ya se encuentra en un cierto estado de luz, así que no se puede hablar de un proceso de ascenso de un ser imperfecto que quiere recuperar por una nueva vida lo antes perdido. Porque Dios también da al alma la posibilidad en el más allá a llegar a la altura, pero se tienen que cumplir otras condiciones para un desarrollo de ascenso, porque se dejaron sin aprovechar los regalos de gracia concedidos que se habían ofrecido al hombre, porque fracasaron teniendo la voluntad libre y para ser benditos solo se pueden obtener ahora bajo condiciones más duras. Existen esferas incontables y grados de bendición innumerables.... Todos los seres pueden ser felices a través del amor y para aumentar su estado de bendición por propia voluntad libre. Pero el nivel más alto de un hijo afiliado no se concede a un alma que ha fracasado en la tierra, porque es posible llegar a este grado en la tierra bajo la utilización de la gracia de Dios con voluntad libre.... Porque la filiación es la coronación de una vida terrestre que se ha llevado bajo la voluntad de Dios con un amor fiel a Dios y al semejante.... La filiación con Dios es el regalo del padre celeste a Sus hijos que aprovechan la vida terrestre para limpiarse, que se convierten por una vida auténtica en amor durante la vida terrestre en lo que fueron antes.... seres divinos plenos de luz y llenos de fuerza....

amén

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Traducido por: Bea Gato

Gotteskindschaft nur auf Erde.... Weiterentwicklung im Jenseits....

Der Ausreifungsprozeß wird von Gott aus stets gefördert, doch im Stadium des freien Willens kann das Geistige auch Widerstand leisten, und dann tritt der Wille Gottes zurück, und der Wille des Menschen entscheidet. Geht nun die Entwicklung des Menschen nicht vorwärts oder gar zurück, dann hat der Wille des Menschen Widerstand geleistet dem Bemühen Gottes, ihm vorwärtszuhelfen, und dann muß auch das Geistige im Menschen, die Seele, die Folgen tragen.... einen Zustand im Jenseits, der dem noch unentwickelten Geistigen angepaßt ist.... ohne Licht und ohne Kraft. Widerstand gegen Gott ist immer Licht- und Kraftlosigkeit, weil von Gott allein das Licht und die Kraft ausgeht und Widerstand gegen Gott immer Ablehnung Seines Liebekraftstromes bedeutet. Dieser Zustand nun kann wohl auch im Jenseits geändert werden, doch wieder nur unter Aufgeben des Widerstandes gegen Gott, also williges Annehmen dessen, was ihm auch im Jenseits angeboten wird, doch gleichfalls ohne Zwang. Es ist aber auf Erden eine große Gnade Gottes außer acht gelassen worden, es ist Seine liebevolle Hilfe zurückgewiesen worden, und es hat das verständlicherweise Folgen, die niemals gänzlich aufgehoben werden können, weshalb wohl eine Besserung des Elendszustandes im Jenseits erzielt werden kann, niemals aber das gleiche erreicht wird, was auf Erden möglich war.... die Gotteskindschaft.... Es ist ferner nicht möglich, willkürlich wieder zur Erde zurückzukehren, um das Versäumte nachzuholen.... Der freie Wille des Menschen hat auf Erden eine Entscheidung getroffen, und dieser gemäß ist das Leben im jenseitigen Reich. Doch Gottes große Güte und Barmherzigkeit verhilft allen Wesen zur Seligkeit, und diese Seligkeit ist in so vielen Graden möglich, so daß stets dem Willen des Wesens Rechnung getragen wird. Um einen höheren Grad der Seligkeit zu erreichen, ist eine nochmalige Verkörperung auf der Erde nicht gestattet, jedoch kann eine Seele, getrieben von der Liebe und ihrem übergroßen Hilfswillen, eine Wiederverkörperung erbitten von Gott, um auf der Erde eine Mission auszuführen, die der Rettung von Erdenseelen gilt.... Es ist auch ein erhöhter Reifegrad Folge davon, der aber durch ein äußerst schweres Erdenleben erworben werden muß. Zudem ist die sich nun auf der Erde verkörpernde Seele schon in einem gewissen Lichtgrad, so daß von einer Aufwärtsentwicklung eines noch unvollkommenen Wesens nicht gesprochen werden kann, das nun durch ein nochmaliges Erdenleben das nachholen möchte, was sie versäumt hat. Denn Gott gibt der Seele auch im Jenseits die Möglichkeit, zur Höhe zu schreiten, doch es müssen nun die Bedingungen zur Aufwärtsentwicklung andere sein, weil sie die ihnen gewährte Gnadenzuwendung, die das Erdenleben als Mensch an sich schon war, ungenützt ließ, weil sie im freien Willen versagt hat und darum auch nur unter schwereren Bedingungen erreichen kann, daß sie selig wird. Zahllose Sphären gibt es und zahllose Seligkeitsgrade.... Alle Seelen können selig werden und durch eigenen Willen den Seligkeitsgrad erhöhen. Doch die höchste Seligkeit eines Gotteskindes bleibt der Seele verwehrt, die auf Erden versagte, denn es ist möglich, diesen Grad auf Erden zu erreichen unter Nutzung der Gnade Gottes im freien Willen.... Es ist die Gotteskindschaft die Krönung eines Erdenlebens, das ganz nach dem Willen Gottes, in treuester Liebe zu Gott und zum Nächsten, geführt wird.... es ist die Gotteskindschaft das Geschenk des himmlischen Vaters an Seine Kinder, die das Erdenleben ausnutzten, um der letzten Schlacken sich zu entäußern, die durch ein rechtes Liebeleben während des Erdenlebens werden, was sie waren von Anbeginn.... göttliche Wesen voller Licht und voller Kraft....

Amen

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This is an original publication by Bertha Dudde