Os acercáis al final con una certeza irrefutable.... Y por mucho que os resistáis. No podéis detenerlo, porque el plan de Salvación de Dios está establecido y todo se desarrolla conforme a éste, incluyendo los acontecimientos mundiales, que también contribuyen a acelerar el curso de los acontecimientos que conducen a la disolución de las creaciones de la Tierra. El fin de este período terrestre ha sido planeado desde la eternidad, pero el libre albedrío del ser humano es la causa, el cual Dios también previó desde la eternidad y en el que podía basar Su plan de Salvación.

Vendrá, como lo profetizaron videntes y profetas desde el comienza de esta época de Redención, y los seres humanos mismos están prestando su ayuda, porque se están apartando por completo del orden divino. Algunos han alcanzado un punto espiritual tan bajo que no puede ser superado y que por sí solo justificaba un fin.... y otros han llegado a una mentalidad tan arrogante que creen dominar las leyes naturales divinas que, sin embargo, aún desconocen. Dios Mis ya no tiene acceso a esos corazones humanos, de lo contrario, cesarían sus actividades y escaparían de la ceguera espiritual que ahora los domina a ellos.

Y así, se cumple el destino de los seres humanos y también de toda la creatura creada, y todo avanza hacia una transformación que marcará el comienzo de una era nueva.... que traerá de nuevo paz y armonía a la Tierra y que garantizará un ascenso seguro para lo espiritual. Pero estas predicciones no encuentran poca o ninguna credibilidad.... La humanidad aún no ha experimentado tal transformación, y lo que se encuentra en el pasado lejano le resulta ajeno. No tiene evidencia de procesos similares y, por lo tanto, no cree estar amenazada por acontecimientos que significan una transformación total de lo que ha existido hasta ahora.

Pero el tiempo avanza, y el último día para esta Tierra se acerca cada vez más. Y por esta misma razón, Dios envía este conocimiento inusual a la Tierra, para despertar a los pocos que aún no se han hundido por completo en las profundidades. El fin se acerca irrevocablemente, y las señales serán tan claras que algunos se preocuparán, y para ellos, incluso el conocimiento explicativo será una bendición para ellos, porque les dará una visión en la que pueden creer.... Porque Dios no dejará que nadie perezca, y mientras haya esperanza de salvar un alma, los intentos de salvación no se abandonarán.

Pero el día del fin ha sido fijado, y según la ley divina también se cumplirá.... Sin embargo, es más probable que los seres humanos mismos aceleren el fin en vez de detenerlo, ya que su comportamiento demuestra que se ha llegado al punto más bajo, que exige un fin.... Y como en la época del Diluvio, los seres humanos andan a ciegos.... como en la época del Diluvio, buscan extraer los tesoros de la tierra y se aprovechan de ellos, desatando fuerzas cuyas consecuencias inimaginables desconocen por completo. Ellos mismos llevan a cabo lo que significa la destrucción de la Tierra y todas sus creaciones.

Los seres humanos hacen oídos sordos a todas las advertencias, persiguiendo inquebrantablemente sus objetivos, y Dios ha tenido en cuenta esta voluntad en Su plan de Salvación, y ha hecho que lo que sucede a través de la influencia satánica, sea aprovechado todavía para un mayor desarrollo espiritual, de modo que Su adversario participa sin saberlo en la obra de Redención, y que él mismo dirige el proceso de desarrollo de nuevo al camino correcto en contra de su voluntad.... que también lo espiritual, que cree haber ganado, es una vez más arrebatado de él y de su poder y atado una vez más en la creación, y así una vez más toma el camino hacia las alturas, aunque se requiere tiempos infinitos hasta que se alcanza una vez más la meta: ser capaz de tomar la decisión final como ser humano....

Y Dios previó todo esto, y los videntes y profetas, en Su nombre, siempre señalaron repetidamente al fin.... Sin embargo, la humanidad no tiene idea de lo cerca que está este fin.... Pero Dios continuamente envía advertencias y amonestaciones para que todo el que cree pueda prepararse.... Pero para el incrédulo, el fin será terrible....

amén

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