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Der freie Wille....

Euer Wille allein ist ausschlaggebend, ob ihr die Vollendung auf dieser Erde erreichet. Und es geht also im Erdenleben um euren freien Willensentscheid. Dieser betrifft aber nicht irdische Fragen oder Stellungnahme zu irdischen Plänen, sondern es geht allein um eure Seele, daß diese sich recht entscheide, welchen Herrn sie über sich anerkennt. Zu diesem Entscheid aber kann der Mensch von keiner Seite aus gezwungen werden, und niemals kann also ein "freier Wille" geleugnet werden, wenn dies auch immer wieder von seiten der Menschen versucht wird. Das innerste Denken des Menschen ist allein ausschlaggebend, und dieses untersteht keiner Gewalt. Darum kann immer nur auf den Menschen eingewirkt werden durch Vorstellungen, Reden und Geschehen aller Art, die sein Denken (seinen Willen) also beeinflussen sollen. Und dies wird versucht von göttlicher sowie Gott-gegnerischer Seite. Immer aber entscheidet der Mensch selbst, welchem Einfluß er sich unterstellt (nachgibt).... Der Wille des Menschen ist frei.... Und darum muß er sich auch dereinst verantworten, welche Richtung er dem Willen gegeben hat, weil er zum Zwecke seiner Willenserprobung das Dasein als Mensch erhalten hat und weil die Seele einmal die Folgen seines Willensentscheides zu tragen hat. Es kann der Mensch in allen Lebenslagen seinen Willen Gott zuwenden.... Und er kann ebenso sich Seinem Gegner unterwerfen.... niemals aber wird er seinen Mitmenschen oder eine weltliche Macht.... Gott Selbst oder Seinen Gegner, verantwortlich machen können für seinen Willensentscheid, weil dies seine freieste Willensangelegenheit ist, nach welcher Richtung hin sich seine Gedanken bewegen, ob sie Gott oder Seinem Gegner zudrängen.... Aber immer ist ihm von Gott sein Schicksal so bestimmt, daß er leicht zu Gott finden kann, wenn er nur Ihm keinen inneren Widerstand mehr leistet.... was also sein freier Wille bestimmt. Die Menschen nun sind geneigt, einen freien Willen zu streiten, weil sie nicht immer auszuführen vermögen, was sie wollen, doch es geht nicht immer um das, was sie tun, sondern um das, was sie wollen.... Denn am Tun können sie auch gehindert werden, wieder durch das Einwirken geistiger Kräfte.... niemals aber am Wollen selbst. Darum soll der Mensch sich selbst gegenüber Kritik üben, nach welcher Richtung hin sich sein Wille äußert.... Denn er weiß es im Erdenleben, daß von ihm die Hinwendung zu Gott verlangt wird, weil Gott Selbst ihm immer wieder solche Hinweise zugehen lässet und er nicht völlig ohne Wissen durch das Erdenleben geht.... Da er aber auch von dem Gegner Gottes beeinflußt wird, wird es nicht ausbleiben, daß er nachdenken muß und er also schon zu einer Entscheidung gedrängt wird.... Und dies also ist auch der Kampf zwischen Licht und Finsternis, den der Mensch selbst zum Austrag bringt, was jedoch ohne den freien Willen des Menschen nicht denkbar wäre, sondern dann nur die positiven und die negativen Kräfte sich diesen Kampf lieferten, aus denen dann eine Kraft als Sieger hervorginge.... Doch so ist der Kampf zwischen Licht und Finsternis nicht zu verstehen, denn es geht um die Seele des Menschen, und diese entscheidet selbst über sich im freien Willen. Und darum ist das Erdenleben für den Menschen eine ununterbrochene Kette von Erlebnissen, von Erfahrungen und Eindrücken, die ihn zum Denken anregen und ihn auch in rechter Richtung denken lassen können. Aber da auch dem Gegner Gottes das Recht zugebilligt ist, um die Seele zu kämpfen, werden seine Gedanken auch negativ beeinflußt, und er muß sich nun entscheiden. Und die Stärke seines Widerstandes gegen Gott ist bestimmend für das Ergebnis, sie ist bestimmend für das Los der Seele nach dem Tode des Leibes, das überaus beseligend, aber auch überaus qualvoll sein kann. Aber wie auch sein Wille sich richtet.... die Liebe Gottes gibt niemals die Seele auf, und erreicht sie das Ziel nicht in diesem Erdenleben, dann verzögert sie wohl ihre Erlösung um endlos lange Zeit, doch einmal wird der Wille sich recht entscheiden, weil die Liebe Gottes Kraft ist, der sich die Seele nicht ewig widersetzt....

Amen

Übersetzer
Dies ist eine Originalkundgabe von Bertha Dudde

La voluntad libre....

Únicamente vuestra voluntad es determinante si vais a conseguir la perfección en esta tierra. Y solo se trata en la vida terrestre de vuestra decisión de la voluntad libre. Pero no toca a preguntas terrestres o opiniones referente a planes terrestres, sino solo se trata de vuestro alma para que ella decida correctamente qué Señor reconoce sobre ella. Pero el hombre no puede ser forzado a tomar esta decisión, y jamás se puede negar una “voluntad libre”, aunque esto se intenta introducir por parte del hombre. El pensamiento interno del hombre determina únicamente, y no está sometido a ningún poder. Y por esto solo se puede influir al hombre a través de ideas, discursos y sucesos de todo tipo que deben influir en su mente (su voluntad). Y esto se intenta por parte de Dios y por la parte contraria a Dios. Siempre decide el hombre mismo a qué influencia se somete (cede).... La voluntad del hombre es libre.... Y por esto se tiene que hacer responsable un día qué dirección ha dado a la voluntad, porque por el objetivo de su prueba de la voluntad el hombre ha recibido su existencia y porque el alma tiene que llevar un día la responsabilidad sobre su decisión de la voluntad. El hombre puede dirigirse a Dios con su voluntad durante todas las situaciones de la vida.... Y igualmente puede someterse bajo la voluntad de Su adversario.... pero jamás podrá responsabilizar a Dios Mismo o a Su adversario o a un poder terrestre de su decisión de la voluntad, porque la dirección a la cual lleva sus pensamientos de la voluntad es su asunto libre de la voluntad, si la empuja hacia Dios o hacia Su adversario.... Pero siempre Dios le ha determinado a su destino tal como pueda encontrar fácilmente a Dios si solo no se opone con rechazo interno hacia Él.... lo que se refiere a su voluntad libre. Los hombres ahora se inclinan a repulsar la idea de una voluntad libre, porque no saben explicar lo que quieren, pero no se trata siempre de lo que están haciendo, sino de lo que están queriendo.... Porque pueden ser frenados en lo que quieren hacer, otra vez por la influencia de fuerzas espirituales.... pero nunca en la intención misma. Por esto el hombre debe practicar crítica en sí mismo, a qué dirección se pronuncia su voluntad.... Porque lo sabe en la vida terrestre que se le pide el acercamiento hacia Dios, porque Dios Mismo le transmite advertencias una y otra vez y no pasa sin conocimiento alguno por la vida terrenal.... Pero como también está influido por adversarios de Dios, a veces es el caso que tiene que reflexionar y ya está empujado hacia una decisión.... Y entonces ya es la lucha entre luz y oscuridad que el hombre mismo tiene que llevar a cabo, y a pesar sin la voluntad libre del hombre no sería pensable, sino entonces solo las fuerzas positivas y negativas llevarían estas luchas, y de las cuales una fuerza saldría como ganadora.... Pero así no se debe entender la lucha entre luz y oscuridad, porque se trata del alma del hombre y ella se decide sobre sí misma bajo voluntad libre. Y por esto la vida terrestre es una cadena ininterrumpida de sucesos para el hombre, de experiencias e impresiones las cuales le empujan para pensar y que le pueden llevar a pensar en la dirección correcta. Pero como al adversario de Dios se le concedió el derecho a luchar igualmente por el alma, sus pensamientos pueden ser influidos también de forma negativa y se tiene que decidir. Y la fuerza de su rechazo contra Dios determina el resultado para él, determina el destino de su alma después de la muerte del cuerpo, lo cual puede ser muy beneficioso, y también muy tormentoso. Pero da igual en qué dirección se gira su voluntad.... el amor de Dios nunca abandona el alma, y si no llega al reto durante su vida terrestre, si se retrasa su redención por tiempos eternos, pero un día la voluntad se decidirá correctamente, porque el amor es la fuerza de Dios a la cual el alma no se puede resistir eternamente....

amén

Übersetzer
Übersetzt durch: Bea Gato