Endlose Zeiten der Gebundenheit mußte das Wesenhafte durchleben, das sich Gott widersetzte, und nur eine kurze Phase ist ihm zur Probe seines Willens gegeben, doch diese kurze Phase ist bestimmend für seinen weiteren Zustand, für sein Los in der Ewigkeit. Es ist der Gang durch die materielle Welt wohl qualvoll für das Geistige, weil es sich nicht frei nach seinem Willen betätigen kann. Im letzten Stadium dagegen ist sein Wille frei gegeben, und daher erscheint ihm auch das Leben als Mensch nicht mehr unerträglich, ja zumeist fühlt es sich in diesem Stadium so wohl, daß es keine Anstalten trifft, es einzutauschen gegen ein freies Leben als Geist, ledig aller irdischen Materie und somit jeglicher Fessel, die das freie Geistige zuvor gebunden hielt. Und darum wird die letzte Willensprobe oft nicht bestanden, und der endlos lange Gang der Aufwärtsentwicklung zuvor war vergeblich, wenn das Erdenleben noch zur Folge hat, daß das Wesenhafte sich rückentwickelt, daß es zurückfällt in die Hände seines Feindes, der seine Unfreiheit verschuldet hat. Und doch muß dem Geistigen diese letzte Probe auferlegt werden, weil es im völlig freien Willen Gott zustreben soll, wenn es frei werden und seine ursprüngliche Kraft zurückerhalten will. Es ist bei Beginn seiner Verkörperung als Mensch in einem Reifegrad, der seine restlose Freiwerdung gewährleistet, also es kann ein jeder Mensch während des kurzen Erdenlebens sich der Macht des Gegners entwinden. Es sind ihm alle Möglichkeiten dazu geboten, und auch Gottes Unterstützung ist ihm gewiß, so er sie nur verlangt. Doch zur Erprobung seines Willens muß auch dem Gegner die Macht zustehen, ihn seinem Begehren gefügig zu machen, weil sonst von einem Willensentscheid nicht gesprochen werden kann. Und darum ist das Erdenleben reich an Kämpfen und Versuchungen, an Widerständen aller Art, die das Geistige überwinden muß und auch kann mit Gottes Hilfe. Also muß der Mensch die Hilfe Gottes bewußt in Anspruch nehmen, ihm muß das Wissen zugeführt werden um eine Macht, Die alles kann, was Sie will, und alles will, was gut ist, weil Sie in Sich die Liebe ist. Es muß der Mensch glauben an diese Macht und sich mit Ihr in Verbindung setzen und voller Verlangen, dieser Macht anzugehören, Sie um Kraft bitten, das Ziel auf Erden zu erreichen. Dann wird er sich frei machen aus der Gebundenheit, weil die Liebe Gottes alles ergreift, was sich bewußt und im freien Willen Ihr wieder zuwendet, wie es sich einst im freien Willen von Ihr abgewandt hat. Diese letzte Willensprobe muß das Geistige bestehen, und dazu ist ihm das Erdenleben gegeben, auf daß es endgültig frei werde von der Gegenmacht Gottes und wieder seinen Urzustand erreicht.... daß es als Lichtwesen innig verbunden ist mit Gott, von Dem es einst ausgegangen ist....
Amen
ÜbersetzerLa esencia que se opuso a Dios tuvo que pasar por tiempos interminables de atadura, y sólo se le da una breve fase para probar su voluntad, pero esta breve fase es crucial para su estado futuro, su destina en la eternidad. El paso por el mundo material es doloroso para lo espiritual porque no puede actuar libremente según su voluntad. En la etapa final, sin embargo, se le da el libre albedrío y, por lo tanto, la vida como ser humano ya no le parece insoportable; de hecho, en esta etapa generalmente se siento tan cómodo que no hace ningún movimiento que no tiene ninguna intención para cambiarla por una vida libre, como espíritu, libre de toda materia terrenal y por tanto de toda grillete que anteriormente mantenía atado todo lo espiritual libre.
Y es por eso que la prueba final de la voluntad a menudo no se pasa, y el camino interminablemente largo de desarrollo ascendente fue en vano, si la vida en la Tierra todavía tiene como resultado en que la esencia retroceda, cayendo de nuevo en manos de su enemigo, que es el responsable de su falta de libertad. Y. sin embargo, esta prueba final tiene que imponerse a lo espiritual porque debe esforzarse hacia Dios con total libre albedrío si quiere volverse libre y recuperar su fuerza original.
Al comienzo de su encarnación como ser humano, se encuentra en un grado de madurez que garantiza su total libertad, es decir, cada ser humano puede liberarse del poder de su adversario durante su corta vida en la Tierra. Se le dan todas las oportunidades para hacerlo y también puede estar seguro del apoyo de Dios, si tan sólo lo pide. Pero para poner a prueba su voluntad, el adversario debe también tener el poder de someterlo a sus deseos, porque de lo contrario no se puede hablar de una decisión de voluntad. Y por eso la vida terrenal es rica en luchas y tentaciones, en todo tipo de resistencias, que lo espiritual debe y puede superar con la ayuda de Dios.
Por eso el ser humano tiene que aprovechar conscientemente la ayuda de Dios, hay que transmitirle el conocimiento acerca de un poder que puede hacer todo lo que quiere y que quiere todo lo que es bueno, porque es el Amor en Sí Mismo. El ser humano debe creer en este poder y entrar en contacto con Él y, lleno de deseo de pertenecer a este poder, pedirle fuerza para lograr el objetivo en la Tierra. Entonces se libera de su atadura, porque el amor de Dios se apodera de todo lo que consciente y libremente se vuelve hacia ello, así como una vez se alejó de ello por su propia voluntad. Lo espiritual debe pasar esta prueba final de voluntad, y la vida terrenal le ha sido dada para este propósito, para que finalmente se libere del poder opositor de Dios y regrese a su estado final.... para que esté íntimamente conectado con Dios, de Quien una vez surgió....
amén
Übersetzer