Para vosotros hombres sólo hay una posibilidad de llegar a la madurez de vuestras almas en la tierra: tenéis que vivir en el amor. Siempre os digo Yo sólo lo uno, de que podéis ser bienaventurados sólo por el amor. Y cada vez de nuevo tengo que citaros como lo más urgente Mis Preceptos de amor, porque no hay ninguna sustitución para una vida de amor, porque nada puede ayudaros a la bienaventuranza, si no cumplís Mis Preceptos del amor.
Por eso podéis hacer lo que queráis. Podéis aplicaros fanáticamente en cumplir los preceptos promulgados por hombres, podéis observar todos los suplementos y dogmas que os han sido declarados como necesarios, no daréis ni un paso hacia adelante en vuestro desarrollo espiritual, si desatendéis el amor. Y por eso pensadlo bien, cuando emprendáis algo si habéis sido impulsados por el amor en vosotros a ello, o si sólo cumplís "preceptos" que por parte del hombre os fueron dados y que en ningún modo tienen nada que ver con una obra de amor.
Reflexionad siempre lo que os motiva a vuestro pensar y obrar, y no toméis nada por importante que deje echar de menos el amor. Precisamente los hombres que se sienten obligados religiosamente, son tibios en el cumplimiento de Mis Preceptos de amor. Fijan toda su atención a los usos tradicionales, cumplen obligaciones que les son presentados como importantes, pero esas obligaciones no elevan ni aumentan de ninguna manera la madurez del alma a través de ellas. Y que sepan sin embargo, que sólo y únicamente a causa de ella están sobre la tierra, para que sus almas alcancen la madurez.
Pero Yo acentúo cada vez de nuevo que para ello es imprescindible necesario una vida en el amor, y que ninguna otra cosa reemplazará el amor desinteresado. Y aunque por mucho que observen los preceptos promulgados por los hombres tan fanáticos, no les aportarán ni el menor éxito para sus almas. Por eso es sin valor e inútil todo lo que vosotros hombres ejecutéis, si el amor no es decisivo al acto.
Y cuando decís: "Todo en honor de Dios..". ¿Cómo podéis honrarme, si no me amáis? ¿Y cómo podéis amarme, si no hacéis caso de las necesidades del prójimo, quien es por cierto vuestro hermano? Cómo podéis tener amor a Dios, si os falta el amor misericordíoso de caridad al prójimo, por medio del cual podéis poner la prueba del amor a Mí? Vosotros vivís una vida falsa si os sentís ligados a oficios y costumbres religiosas, a ceremonias y deberes, vosotros despilfarráis la fuerza vital, que por Mí parte se os fue dada para que os adquiráis en la tierra fuerza espiritual y ésta sólo puede ser adquirida mediante obras de amor.
Vosotros hombres, tomad en serio la vida terrenal, no vegetéis tan indolentes, que ni siquiera reflexionáis sobre si vuestro Dios y Padre puede acaso contentarse con eso que lleváis a cabo. Reflexionad sobre lo que Yo Mismo pediría de vosotros quizás, si estuvíera de nuevo como hombre en medío de entre vosotros, si Yo anduviera como hombre otra vez sobre vuestra tierra. ¿Creéis que Yo pudíera sentir con eso alegría, de que vosotros hombres viváis en una fe muerta, de que mecánicamente ejecutéis sólo cosas que jamás pueden tener valor ante Mis ojos? ¿Cómo os imagináis, vosotros hombres a vuestro Dios y Padre? ¿Cómo podéis vosotros hombres conciliar eso con Mi Sabiduría, eso que os habéis organizado, lo que os habéis imaginado como "La Iglesia de Cristo" ? ¿Cómo podía Yo encontrar agrado en usos, oficios y tradiciones, en acciones, que os presentaron y pusieron como "Mi Voluntad" ? Yo puedo alegrarme y me alegraré sólo e, lo que tiene como motivo el amor, y las almas podrán sólo entonces madurar, si el hombre se cambia y se vuelve amor, si combate el amor egoísta, y en amor desinteresado se abre al prójimo. Pues el amor es lo que os falta y el que debéis apropiaros de nuevo, mientras caminéis por la tierra. Tenéis que llevar una conducta de vida en amor, de lo contrario vuestro caminar terrenal es vano y jamás alcanzáis vuestra meta.
Amén
TraductorPer voi uomini esiste soltanto una possibilità per raggiungere la maturità dell’anima sulla Terra: dovete vivere nell’amore. Vi dico sempre soltanto una cosa, che potete diventare beati soltanto attraverso l’amore. E devo sempre di nuovo presentare dinanzi a voi i Miei Comandamenti dell’Amore come i più urgenti perché non c’è nessuna sostituzione per una vita d’amore, perché nulla può aiutare a giungere alla beatitudine se non adempite i Miei Comandamenti dell’Amore. Perciò potete fare quello che volete, potete adempiere ultraferventi dei comandamenti rilasciati da uomini, potete eseguire tutte le prescrizioni, che vi vengono presentate come necessari e non avanzerete d’un passo nel vostro sviluppo spirituale, se tralasciate l’amore. E perciò riflettete bene quando intraprendete qualcosa, se ne siete stati spinti dall’amore in voi, oppure se adempite solamente dei “comandamenti”, che vi sono stati dati da parte degli uomini, e che non hanno nulla a che fare con un’opera d’amore. Dovete sempre riflettere su ciò che vi stimola al vostro pensare ed agire, e non dovete considerare niente d’importante che fa mancare l’amore. E proprio quegli uomini che si sentono legati per confessione sono tiepidi nell’adempimento dei Miei Comandamenti dell’Amore. Loro rivolgono tutta la loro attenzione soltanto agli usi tradizionali, adempiono dei “doveri” che a loro vengono rappresentati come importanti, ma con ciò non aumentano in nessuna maniera la maturità dell’anima, ma dovrebbero sapere, che soltanto per questo soggiornano sulla Terra, che le loro anime giungano alla maturità. E sottolineo sempre di nuovo, che per questo è assolutamente necessario una vita nell’amore, e che null’altro può sostituire l’agire nell’amore disinteressato. E per quanto vogliano essere ferventi nell’adempimento dei comandamenti rilasciati da uomini, non potranno registrare il minimo successo per le loro anime. Perciò tutto quello che voi uomini eseguite è senza valore, se in ciò non è determinante l’amore. E quando dite: “Tutto in Onore di Dio”, ma come potete onorarMi, se non Mi amate? E come potete amarMi, se non badate alla miseria del vostro prossimo, che è comunque vostro fratello? Come potete avere amore per Dio, quando vi manca l’amore misericordioso per il prossimo, mediante il quale soltanto mettete alla prova l’amore per Me? Voi vivete una vita sbagliata, quando vi sentite legati ad usi e costumi confessionali, a cerimonie ed adempimenti di doveri, voi sprecate la forza vitale, che vi è stata donata da Me, affinché sulla Terra vi conquistiate la forza spirituale, e questa può essere guadagnata soltanto mediante un agire nell’amore. Voi uomini, prendete sul serio la vita terrena! Non vivete nell’indifferenza, che non riflettete nemmeno una volta sul fatto se il vostro Dio e Padre potrebbe accontentarsi di ciò che voi compiete soltanto esteriormente. Riflettete su questo, cosa pretenderei Io Stesso da voi, se camminassi di nuovo come Uomo sulla vostra Terra. Credete forse che potrei sentire gioia sul fatto che voi uomini vivete in una fede morta, che eseguite delle cose soltanto meccanicamente, che non possono mai avere un valore davanti ai Miei Occhi? Come v’immaginate voi uomini il vostro Dio e Padre? Come potete voi uomini mettere in sintonia con la Mia Sapienza ciò che vi siete edificati, ciò che v’immaginate come “Chiesa di Cristo”? Come potrei trovare Compiacimento negli usi e costumi, nelle azioni, che vi vengono presentati come la “Mia Volontà”, e che non sono richiesti da Me? Posso e Mi rallegrerò solamente di coloro che compiono delle opere d’amore. Farò sempre soltanto valere quello che ha origine nell’amore, e le anime possono maturare solamente quando l’uomo cambia nell’amore, quando combatte l’amore dell’io e sorge nell’amore disinteressato per il prossimo. Perché è l’amore che vi manca, e che dovete rendere di nuovo vostro, finché siete sulla Terra. Dovete condurre una vita nell’amore, altrimenti il vostro cammino terreno è inutile e non raggiungete mai la vostra meta.
Amen
Traductor