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Por qué Jesucristo y Su obra de Redención deben ser reconocidos....

El pecador es perdonado a través de la muerte de Jesucristo. El amor del hombre Jesús tomó sobre sí toda la culpa del pecado en la tierra y la expió a través de Su muerte. Él pagó la gran deuda con su sangre y, por lo tanto, todo pecador puede ser redimido con tal de que crea en Jesucristo y en Su obra de Redención.... La muerte sacrificial de Cristo fue así traída para toda la humanidad, pero solo pocos participan en ella, solo pocos reclaman conscientemente las gracias adquiridas por el hombre Jesús a través de Su muerte. Y por eso la Redención, la liberación de toda culpa del pecado, es siempre un acto del libre albedrío y debe seguir siéndolo, el hombre mismo debe querer liberarse a través de Él, porque de otro modo no puede llegar a Dios, Que se ha encarnado en Jesucristo.

Creer en Dios es solo una figura de lenguaje ociosa hasta que se prueba. Creer en Dios también implica reconocer la propia relación con Dios. Creer en Dios como el ser supremo y más perfecto revela también la gran distancia que hay entre uno mismo y Dios, y esta distancia debe reducirse inevitablemente porque no existía al principio cuando el ser fue creado perfectamente por Dios.... Y el hombre se reconoce como “criatura” de Dios en cuanto pretende creer en Dios.... Y así la fe debe resultar en que el ser se esfuerce de nuevo hacia Dios, que quiera volver a entrar en la relación en la que estaba al principio.

Pero también debe buscar una justificación para su distancia de Dios y así darse cuenta de que la criatura creo esta distancia a través del pecado mismo.... y en consecuencia liberarse de esta culpa.... pero como la culpa es enorme porque el pecado fue dirigido contra Dios Mismo, el hombre en su corta vida terrenal no es capaz de pagar esta enorme culpa del pecado. Debe aceptar una ayuda que se le ofrece, una ayuda que quiere traerle el Dios-hombre Jesús, Que Se compadeció de la humanidad pecadora y Que, por tanto, en Su amor por los hombres ofreció un sacrificio expiatorio para ayudarlos a liberarse de la culpa. La liberación de toda culpa solo es posible por medio de Jesucristo....

(25.11.1952) Tuvisteis que pagar una gran deuda porque vuestro pecado anterior estaba dirigido contra Dios Mismo. Dios es el amor, y quien peca contra el amor, peca contra Dios Mismo, y hace imposible que el amor se hace cargo de él porque fue rechazado de antemano. Por lo tanto, el camino a Dios es simplemente un absurdo, porque un ser que se aleja voluntariamente de Dios no puede llegar a Dios por este camino.... comprendedlo, que habéis pecado contra el amor y por lo tanto solo podéis encontrar el perdón si reconocéis el amor y defendéis el amor.... Y es por eso que el hombre Jesús asumió esta misión, para rendir homenaje al amor eterno, lo que demostró Su profundo amor por Dios y los humanos....

Una deuda que estaba dirigida contra el Amor eterno solo podía ser redimida a través del amor. Pero por eso vosotros los humanos tampoco podéis ignorar a Jesucristo, no podéis excluirlo, porque sólo podéis posibilitar el retorno a Dios a través del amor, pero también, si practicáis el amor, reconoceréis clara y brillantemente la obra misericordiosa del amor del hombre Jesús y reconocerlo como vuestro Salvador, porque el amor se une con todo lo que es amor, y Jesucristo fue el amor encarnado y así absorbió a Dios Mismo, Cuyo sustancia original es el amor....

Y así el poder del amor de Dios se manifestó en un ser humano, tomó forma, por así decirlo; el poder que fluyó hasta el infinito, que está en todas partes en todo el universo, el poder, que debe ser abordado como Dios Mismo, pero no visible para nadie como tal, eligió una forma imaginable para los hombres y la irradiaba de modo que Dios Mismo estaba en el hombre Jesús, que Éste debe ser reconocido como Dios porque todo Su ser era Dios porque era amor, y solo la forma exterior era hombre mientras permaneció en la tierra, hasta que después de Su muerte en la cruz, esta forma fue irradiada por la luz del amor de Dios y, por lo tanto, pudo ascender al cielo transfigurad y espiritualizada, pero solo visible para aquellos cuyas almas ya tenían un cierto grado de madurez para poder ver las cosas divinas- espirituales, sin tener que perecer ellos mismos....

La justicia divina fue satisfecha, el amor divino fue reconciliado a través de la muerte de Cristo en la cruz, pero sin el reconocimiento de Jesús y Su obra de Redención, el hombre permanece irrevocablemente en el pecado, que lo separa de Dios, y nunca podrá ser salvado...._>amén

Perché dev’essere riconosciuto Gesù Cristo e la Sua Opera di Redenzione

Il peccatore avrà il Perdono tramite la morte di Gesù Cristo. L’Amore dell’Uomo Gesù ha preso su di Sé ogni colpa di peccato sulla Terra e l’ha espiato con la Sua morte. Egli ha pagato la grande colpa con il Suo Sangue e perciò ogni peccatore può trovare la Redenzione, se crede in Gesù Cristo e la Sua Opera di Redenzione. La morte di Sacrificio di Cristo era perciò portata per l’intera umanità, ma solo pochi ne prendono parte, solo pochi si avvalgono coscientemente delle Grazie che l’Uomo Gesù ha conquistato con la Sua morte. E perciò l’Espiazione, la liberazione da ogni colpa di peccato, è sempre un Atto della libera volontà e lo deve anche rimanere, l’uomo stesso deve volere che diventi libero tramite Lui, perché altrimenti non può giungere a Dio, il Quale Si E’ incorporato in Gesù Cristo. La fede in Dio è solo un vuoto modo di parlare, finché non viene dimostrata. La fede in Dio ha anche per conseguenza la conoscenza del proprio rapporto con Dio. Credere in Do come l’Essere il più alto e più perfetto, fa anche riconoscere la grande distanza da sé a Dio, e questa distanza dev’essere inevitabilmente diminuita, perché non era nel principio, quando l’essere era stato creato perfetto da Dio. E l’uomo si riconosce come ‘creatura’ di Dio, appena dice di credere in Dio. E quindi la fede dev’essere la conseguenza che l’essere tende di nuovo a Dio, che vorrebbe di nuovo entrare nel rapporto nel quale stava in principio. Ma nella distanza fra sé e Dio deve anche cercare una motivazione e quindi giungere alla conoscenza, che lui stesso l’ha creato attraverso il peccato, quindi voler diventare libero da questa colpa. Ma dato che la colpa era gigantesca, perché il peccato era rivolto contro Dio, nel breve tempo della vita terrena l’uomo non è in grado di rimettere questa gigantesca colpa di peccato. Deve accettare un Aiuto che gli viene offerto, un Aiuto che gli vuole portare l’Uomo-Dio Gesù, il Quale aveva Compassione dell’umanità empia e perciò nel Suo Amore ha portato agli uomini un Sacrificio d’Espiazione per aiutarli a diventare liberi dalla colpa. Solo tramite Gesù Cristo quindi è possibile una liberazione da ogni colpa. (25.11.1952) Perciò avevate da rimettere una enorme colpa, perché il vostro peccato di una volta era rivolto contro Dio Stesso. Dio E’ l’Amore e chi pecca contro l’Amore, pecca contro Dio Stesso, rende pure impossibile che l’Amore Si prenda Cura di lui, perché dapprima era stato respinto. Perciò la via verso Dio è semplicemente una assurdità, perché un essere che si è liberamente allontanato da Dio, non può giungere su questa via a Dio, comprendetelo, avete trasgredito contro l’Amore e perciò potete trovare il Perdono solamente, quando riconoscete l’Amore e vi mettete dalla Sua Parte. E per questo l’Uomo Gesù ha preso questa Missione su di Sé, di pagare all’eterno Amore il tributo che Gli dimostrava il Suo profondo Amore per Dio e gli uomini. Solo attraverso l’Amore poteva essere estinta una colpa che era rivolta contro l’eterno Amore. Perciò voi uomini non potete oltrepassare Gesù Cristo, non Lo potete escludere, perché solo tramite l’Amore potete rendere possibile il ritorno a Dio, ma riconoscerete anche chiaramente e limpidamente la compassionevole Opera d’Amore dell’Uomo Gesù, se esercitate l’amore e Lo riconoscete come il vostro Salvatore, e Gesù Cristo Era l’Amore incorporato e con ciò ha accolto Dio Stesso in Sé, la Cui Sostanza Ur è l’Amore. E così la Forza dell’Amore di Dio Si è manifestato in un Uomo, ha assunto una forma; la Forza che defluiva nell’Infinito, che E’ ovunque nell’intero Universo, la Forza Che E’ da considerare come Dio Stesso, ma Che non E’ visibile come Tale a nessuno, ha scelto per Sé una Forma immaginabile agli uomini e la irradiava in modo, che Dio Stesso Era nell’Uomo Gesù, che Lui dev’Essere riconosciuto come Dio, perché tutto il Suo Essere Era Dio, perché Era Amore, e solo la forma esteriore era Uomo, finché dimorava sulla Terra, finché anche dopo la Sua morte sulla Croce questa forma era irradiata dalla Luce d’Amore di Dio e perciò poteva ascendere al Cielo trasfigurata e spiritualizzata, ma visibile solo a coloro le cui anime possedevano già un certo grado di maturità, per poter contemplare dello spirituale-divino, senza doverne scomparire. Alla divina Giustizia era stata data Soddisfazione, l’Amore divino era stato rappacificato tramite la morte sulla Croce di Cristo, ma senza riconoscimento di Gesù e la Sua Opera di Redenzione l’uomo rimane irrevocabilmente nel peccato che lo separa da Dio e non può mai e poi mai diventare beato.

Amen