Para alcanzar la Filiación de Dios se requiere un gran auto superación y un trabajo constante sobre su alma, es decir, un control constante de los pensamientos, palabras y acciones. El ser humano debe esforzarse por lograr el bien desde el corazón y, por lo tanto, permanecer completamente en el amor; Debe dejar de lado todas las malas cualidades, ser puro y verdadero en todo su ser, debe permanecer en constante conexión Conmigo, de lo contrario, no tiene fuerza, incluso si tiene buena voluntad. Él debe sacar constantemente fuerza de Mí, a través de actos de amor o de oración, es decir, a través de la conexión mental Conmigo con le petición de fuerza.
Vosotros, los humanos, podéis lograr mucha en la Tierra, pero Mi gracia siempre tiene que apoyaros, la cual nunca os será negada si tan sólo la deseáis. Sin gracia sois débiles y sin pedir fuerza no podéis recibirla, por eso, inevitablemente debéis entrar en contacto Conmigo, pero entonces también podéis estar seguros de que recibiréis fuerza para poder cumplir vuestra tarea en la Tierra.... para formaros en hijos de Dios, a quienes se les abre toda bienaventuranza en el reino espiritual.
La filiación de Dios es el grado de perfección más alto que podéis lograr en la Tierra, por eso comprenderéis que para lograr este grado de perfección se requiere una vida extremadamente difícil en la Tierra, y comprenderéis entonces el destino de muchos seres humanos buenos y creyentes que tienen que sufrir mucho durante su vida en la Tierra. El amor y el sufrimiento cristalizan el alma y la hacen receptiva a la luz; El amor y el sufrimiento disuelven la densa envoltura y espiritualizan el alma para que pueda entrar en el reino espiritual completamente liberada.
Una vida tranquila y sin sufrimiento en la Tierra nunca podrá producir el grado de madurez que da derecho a convertirse en la filiación de Dios, al estado que le permite permanecer en Mi cercanía, para poder crear, por así decirlo, Conmigo y en Mi voluntad en una dicha ilimitada. La vida en la Tierra es corta, y aunque fuese una de la más duras y dolorosas, todavía no se compara con la bienaventuranza que corresponde a quienes alcanzan el grado de filiación de Dios en la Tierra. Pero que se os diga una y otra vez que sólo con Mi apoyo, con la mediación de la gracia y de la fuerza, podéis alcanzar este grado, y que por tanto debéis permanecer siempre en contacto Conmigo, porque si Mí nada podéis hacer....
amén
TraductorPara alcançar a infância para Deus é necessária uma grande autoconquista e um trabalho constante na sua alma, ou seja, um controlo constante dos seus pensamentos, discursos e acções. O ser humano deve lutar pelo bem do coração e, portanto, também estar completamente apaixonado, deve descartar todas as características más, ser puro e verdadeiro em todo o seu ser, deve permanecer em contacto constante comigo, caso contrário, está sem forças, mesmo tendo boa vontade. Ele deve constantemente tirar força de Mim através de actividade amorosa ou oração, ou seja, contacto mental comigo com o pedido de força. Vós, humanos, podeis alcançar muito na terra, mas deveis sempre ser apoiados pela Minha graça que, no entanto, nunca vos será negada se apenas a desejardes. Sem graça é fraco, e sem um pedido de força não o pode receber. Assim, deve inevitavelmente entrar em contacto comigo, mas também pode ter a certeza de que receberá forças para cumprir a sua tarefa na terra.... para vos educardes a tornar-vos filhos de Deus a quem todas as bem-aventuranças são acessíveis no reino espiritual. A infância para Deus é o mais alto grau de perfeição que se pode alcançar na terra, por isso também será compreensível para si que este alcance do grau de perfeição exija uma vida terrena extremamente difícil, e então muitas pessoas boas e devotas terão de lhe explicar o destino de pessoas que têm de sofrer excessivamente durante a sua vida terrena. O amor e o sofrimento cristalizam a alma e tornam-na receptiva à luz, o amor e o sofrimento soltam a cobertura densa e espiritualizam a alma para que ela possa entrar no reino espiritual completamente despreocupada. Uma vida terrena tranquila e livre de sofrimento nunca pode produzir o grau de maturidade que lhe dá o direito de ser filha de Deus, o estado que lhe permite habitar directamente na Minha proximidade, poder criar, por assim dizer, Comigo e na Minha vontade em êxtase ilimitado. A vida terrena é apenas curta, e mesmo que fosse uma das mais difíceis e dolorosas, não se compara com aquela felicidade que faz parte daquele que alcança o grau de filantropia a Deus na terra. No entanto, deve ser-lhe dito repetidamente que só poderá atingir este grau com o Meu apoio, com a transmissão da graça e da força, e que, por isso, tem de permanecer sempre em contacto comigo, pois sem Mim nada pode fazer...._>Ámen
Traductor