Y, sin embargo, se dará información a un ser humano hambriento de conocimiento cuando se dirige a Dios con una petición, porque Dios no niega el conocimiento a un ser humano en la Tierra, aunque toque áreas que están lejos del conocimiento espiritual.
(24.06.1947) No se debe pasar por alto que Dios, Creador del cielo y de la tierra, Se inclina hacia sus criaturas para instruirlas en la verdad, en lo que se refiere al conocimiento espiritual. Sin embargo, el conocimiento mundano también cuento con el apoyo con Dios, siempre que los seres humanos estén conectados con Dios en sus actividades terrenales, es decir, que también someta su trabajo terrenal a la bendición de Dios y también da testimonio de un sentimiento de unión con Dios. Entonces podrá hacerle a Dios sus preguntas en cualquier momento y serán respondidas.
Sin embargo, es diferente cuando el ser humano quiere satisfacer su sed de conocimiento para ampliar su conocimiento terrenal, por lo que el conocimiento espiritual está fuera de discusión. Entonces dejará a su criterio hasta qué punto penetra en la verdad, siempre que intente sondearla puramente intelectualmente. Pero siempre hay límites puestos para él, porque sólo Dios se los abre, porque no quiere ser pasado por alto cuando explora las cosas que Dios parece mantener ocultas a los hombres. Pero Él resuelve las cuestiones espirituales en cualquier momento, tanto más comprensiblemente cuanto más madura es el alma de quien busca la aclaración:....
Las leyes de la naturaleza se relacionan entre sí de la misma manera que el principio divino en el ser humano, el Amor, se relaciona con la Deidad Eterna, con la Fuerza Primordial, es decir, Dios y el Amor no pueden pensarse el uno sin el otro, y el ser humano que quiere llegar a Dios también tiene que llevar el amor en sí mismo, de lo contrario nunca podría entrar en contacto con Dios. Lo mismo ocurre con las leyes de la naturaleza.... una es un complemento de la otra, y todas las leyes establecen el orden divino. Una violación en contra de esto crea un desorden y al mismo tiempo significa un distanciamiento de Dios. Quien Se encuentra en la más alta perfección y orden. Y así la estructura de toda la creación se llevó a cabo en el más alto orden y perfección; la sabiduría insuperable estableció este orden y el amor más profundo yacía en su fundamento.
En consecuencia, la esencia, cuando comenzó su carrera de desarrollo, tenía que lograr su objetivo de llegar a ser perfecta en este orden y ley.... Tenía que dejarse penetrar por la corriente de poder del Amor Eterno hasta la más pequeña sustancia, de lo contrario se mantenía incapaz de cumplir su tarea, la cual, sin embargo, es el propósito del camino terrenal de la esencia.
Lo esencial, sin embargo, a través de su antigua apostasía de Dios, ya no era capaz de establecer una conexión con Dios Mismo, ni con Su poder, que es sólo una emanación de Dios y por lo tanto algo divino que no puede unificarse con la imperfección. Así que primero había que crear algo que fuera adecuado para la recepción de lo espiritual inmaduro, que contuviera dentro de sí mismo tanto de lo divino que la esencia pudiera ser alimentada cuando tuviera un deseo de fuerza que le faltaba.
Y así Dios dirigió Su irradiación de poder hacia el universo de modo que tocara todo el infinito, pero en la medida más pequeña, porque esto ya era suficiente para llenar todo el infinito con Su poder. Entonces surgió una vida inimaginable, un movimiento en el universo, porque el poder de Dios Mismo causa vida eterna, actividad eterna. Y esta vida se multiplicó a través de la unificación de las más pequeñas chispas de poder, se apoderó de lo muerto, lo impotente en el universo para atraerlo al proceso de actividad, si quisiera ser capturado. Lo vivo encerró a lo muerto, lo vivo mantuvo cautivo a lo muerto, pero no con odio, sin con amor, porque el poder de Dios es amor y nunca cambia.
Mientras estas diminutas chispas siguen volando en el espacio, mientras sigan libres, es decir, en constante movimiento, no se puede hablar todavía de materia, aunque sea el comienzo de ella y las chispas de fuerza.... electrones.... en cierto sentido son los componentes originales de la materia. Sólo se convierten en materia una vez que se hayan solidificado, es decir, cuando a través de la esencia inmadura, que ahora obstaculiza la movilidad de los electrones, entra en un estado de endurecimiento, por lo que la esencia ahora está atada y la irradiación de poder de Dios se disminuye en su efecto por un cierto período de tiempo según la voluntad de Dios, hasta que la esencia atada comienza a debilitarse en su resistencia. Entonces la fuerza vuelve a moverse y una vida tranquila se hace notar incluso en la materia más dura, una vez transcurrido el tiempo de destierro de lo espiritual.
Así que, los electrones en su estado de movilidad son probablemente sustancia espiritual, pero no una sustancia del alma humana, que se desarrolla después de un tiempo infinitamente largo, mientras que la sustancia inmadura, la esencia atada, debe incluirse al respecto, porque esta esencia comienza ahora su proceso de desarrollo ascendente que finaliza con la etapa como ser humano. Los electrones son el poder más puro de Dios y, por lo tanto, son indestructibles. Son, por así decirlo, el cruce de la frontera entre lo espiritual y lo terrenal, una emanación de Dios que toma forma con la entrada en el reino terrenal. Si se puede hablar de forma en una medida incomprensible pequeña.
Lo puramente divino se conecta con lo imperfecto por amor y por misericordia, porque de lo contrario éste nunca podría desarrollarse hacia la altura porque está totalmente debilitado y aún resiste a Dios al no aceptar Su poder.... Y así el poder se apodera de lo imperfecto, atándolo y explicándole la consecuencias y los tormentos del rechazo del poder divino, para que él mismo pueda cambiar su voluntad y desear el poder de Dios para poder volver a Su cercanía....
amén
TraductorE ciononostante all’uomo affamato di sapere viene dato il chiarimento, se si rivolge pregando a Dio, perché Dio non nasconde nulla del sapere all’uomo sulla Terra, benché sfiori dei campi che si trovano lontano dal sapere spirituale. (24.06.1947) Nulla deve essere misconosciuto, che Dio, il Creatore del Cielo e della Terra, china Sé Stesso alle Sue creature, per istruirli nella Verità, quando si tratta del sapere spirituale. Ma anche il sapere mondano viene sostenuto da Dio, finché l’uomo è unito a Dio anche nell’attività terrena, cioè che sottopone il suo lavoro terreno alla Benedizione di Dio e con ciò testimonia il sentimento di appartenenza a Dio. Allora può rivolgere in ogni tempo le sue domande a Dio e gli verranno risposte. E’ invece differente se l’uomo vuole soddisfare la sua brama di sapere, per ampliare le sue conoscenze terrene, quindi il sapere spirituale rimane fuori questione. Allora Dio lascerà a lui stesso, fin dove penetra nella Verità, in quanto cerca di sondarla in modo puramente intellettuale. Ma allora gli sono sempre posti degli ostacoli, perché questa gliela apre Dio solamente, perché Lui non vuole Essere sorpassato nella ricerca di cose che Dio tiene apparentemente nascoste. Ma Egli risolve in ogni tempo delle questioni spirituali, e questo più comprensibilmente più l’anima è matura di colui che cerca il chiarimento. Le leggi della natura si comportano reciprocamente precisamente come il Principio divino nell’uomo, come si comporta l’amore verso l’eterna Divinità, verso la Forza Ur, cioè Dio e l’Amore non sono pensabili Uno senza l’Altro, e l’uomo che vuole raggiungere Dio deve portare anche in sé l’amore, altrimenti non potrebbe mai entrare in contatto con Dio. Proprio così stanno le cose con le leggi della natura, l’una è il completamento dell’altra e tutte le leggi rappresentano l’Ordine divino. Un infrangere contro queste leggi causa disordine e significa contemporaneamente l’allontanamento da Dio, il Quale Egli Stesso Si trova nella più sublime Perfezione ed Ordine. E così è fatta anche l’edificazione dell’intera Creazione nell’Ordine e nella Perfezione più sublimi, la Sapienza insuperabile ha stabilito questo Ordine, e l’Amore più profondo ne era alla base. Di conseguenza anche l’entità, quando cominciava un percorso di sviluppo, doveva raggiungere la sua meta in quest’Ordine e Legislazione per diventare perfetto. Doveva farsi compenetrare fino nella più minuscola sostanza dalla Corrente di Forza dell’eterno Amore, altrimenti rimaneva incapace per un compito, che però è lo scopo del percorso terreno per l’entità. Ma l’entità a causa della sua caduta d’un tempo da Dio non era più capace di stabilire il contatto con Dio Stesso, ugualmente nemmeno con la Sua Forza, che è soltanto un’Irradiazione di Dio e con ciò qualcosa di Divino, che non può unirSi con qualcosa d’imperfetto. Quindi dapprima doveva essere creato qualcosa che si rendeva idoneo per l’accoglimento dello spirituale immaturo, che quindi celava tanto del Divino, in modo che l’entità poteva essere nutrita, quando aveva il desiderio per la Forza che le mancava. E così Dio guidava la Sua Irradiazione di Forza nel Cosmo affinché sfiorasse l’intero Infinito, ma nella misura più infinitesimale, perché già questa era sufficiente, per colmare l’intero Infinito con la Sua Forza. Così si creava una Vita inimmaginabile, un movimento nell’Universo, perché la Forza di Dio E’ in Sé Vita eterna, che richiama l’eterna attività. E questa Vita Si moltiplicava mediante l’unificazione di minuscolissime scintille di Forza, afferrava ciò che era morto, senza Forza nell’Universo, per attirarlo nel processo d’attività, se voleva farsi afferrare. Così il vivente avvolgeva ciò che era morto, il vivente teneva catturato ciò che era morto, ma non con odio, ma con l’Amore, perché la Forza di Dio E’ Amore e non muta mai. Fintanto che ora queste minuscole scintille di Forza frullano ancora nel Cosmo, finché sono ancora libere, cioè in costante movimento, non si può ancora parlare di materia, benché sia l’inizio di questa e gli elettroni sono in certo qual modo le componenti Ur della materia. Diventano materia soltanto quando si sono una volta consolidate, cioè quando tramite l’entità immatura, che gli elettroni ora impediscono ora nella sua mobilità, entra in uno stato di indurimento, per cui ora l’entità è legata e l’Irradiazione di Forza di Dio cede per una determinata durata di tempo nella sua efficacia secondo la Volontà di Dio, finché l’entità legata comincia a paralizzarsi nella sua resistenza. Allora si muove anche di nuovo la Forza, ed una Vita minima si fa sentire anche nella più dura materia, quando è trascorso il tempo della relegazione dello spirituale. Quindi gli elettroni nel loro stato di mobilità sono ben una sostanza spirituale, ma non una sostanza dell’anima dell’uomo che si sviluppa dopo un tempo infinitamente lungo, mentre la sostanza immatura, l’entità legata, deve essere considerata tale, perché quest’entità comincia ora il processo del suo sviluppo verso l’Alto, che termina con lo stadio come uomo. Gli elettroni sono la Forza più pura di Dio e perciò indistruttibili, sono in certo qual modo il passaggio di confine dal Regno spirituale in quello terreno, una Irradiazione di Dio, che con l’ingresso nel regno terreno assume una forma, per quanto si possa parlare di forma nella dimensione inafferrabilmente più minuscola. Il puramente Divino si unisce con l’imperfetto per Amore e Misericordia, perché l’ultimo non potrebbe mai svilupparsi verso l’Alto, perché è totalmente indebolito e presta malgrado ciò resistenza a Dio non accettando la Sua Forza. E così la Forza afferra l’imperfetto, legandolo e facendogli sentire le conseguenze ed i tormenti del rifiuto della Forza divina, affinché cambi lui stesso la sua volontà e desideri la Forza di Dio, per giungere di nuovo vicino a Lui.
Amen
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