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Desafíos por el inframundo y lucha....

Todo lo que se desarrolla hacia las alturas también está expuesto a los desafíos del inframundo, porque la lucha de las tinieblas contra todo lleno de luz y lo que está esforzándose hacia la luz se libra con perseverancia y requiere una dura resistencia. Y es por eso que el hombre debería ver cada lucha espiritual como una prueba de que él también pertenece a aquellos que se esfuerzan hacia arriba y que estas luchas sólo ponen a prueba su voluntad y también la fortalecen. Ningún ser humano que lucha quedará sin ayuda, y su alma será protegida por figuras de luz, que ciertamente ven esta lucha y está siempre dispuestas a ayudar porque conocen la debilidad humana, pero también su voluntad de superar la debilidad.

Ellas también exigen su recompensa por su ayuda, pero quieren dar más de lo que reciben del hombre.... sólo exigen atención para impartirles un conocimiento que hace feliz. Y a su vez este conocimiento ayuda a defenderse de las fuerzas del inframundo, es decir, a salir victorioso en la lucha contra las fuerzas del mal. Las armas de las fuerzas del mal son ineficaces contra una persona conocedora, porque reconoce su astucia y puede actuar contra ellas victoriosamente.

Un cierto peligro sólo existe mientras la indiferencia del hombre se imponga y éste no logra luchar contra ella, y esta situación es peligrosa porque el oponente de Dios está inmediatamente dispuesto a apoderarse de la voluntad indiferente del hombre, y entonces la lucha que el hombre debe librar se vuelve cada vez más difícil. Porque en esto consiste la fuerza del hombre de que inmediatamente se puede entregar a Dios y pedirle protección y así también irá este camino a través del conocimiento que ha recibido.

Por eso el oponente de Dios sólo tiene pocas posibilidades de conquistar un alma que se esfuerza hacia Dios, incluso si las tentaciones se acercan a ella en forma de depresiones del alma, lo que siempre ocurre cuando la persona se cree lo suficientemente fuerte y que la ayuda de Dios tiene menos importancia. Dios siempre quiere ser consultado, siempre quiere apoyar a las personas como guía en todas las situaciones de la vida, pero también siempre quiere ser llamado, y si la persona no lo hace, Dios aparentemente se aleja de ella y la deja entrar en problemas, para a través de eso atarle nueva a Si, para ser llamado nuevamente desde lo más íntimo de su corazón, para que a través de este llamado las fuerzas del inframundo sean desplazadas y el ascenso a la altura pueda realizarse ahora sin esfuerzo. Porque Dios quiere ponérselo fácil a las personas, pero la debilidad de la voluntad les dificulta llegar a la altura....

amén

Desafios do submundo e da batalha....

Tudo o que se desenvolve para cima também está exposto a desafios especiais do submundo, pois a batalha das trevas contra tudo o que está cheio de luz e luta em direção à luz é travada com perseverança e requer resistência tenaz. E é por isso que o ser humano deve considerar cada batalha espiritual como prova de que ele também pertence àqueles que lutam para cima e que essas batalhas apenas testam a sua vontade e também o tornam mais forte. Nenhuma pessoa que luta ficará sem ajuda, e sua alma será protegida por seres de luz que vêem bem essa luta e estão sempre prontos para ajudar, porque sabem da fraqueza do ser humano, mas também da sua vontade de dominar a fraqueza. Eles também exigem sua homenagem por sua ajuda, mas querem dar mais do que recebem do ser humano.... eles só exigem atenção a fim de lhes transmitir um conhecimento gratificante. E mais uma vez, este conhecimento ajuda-os a serem capazes de se defenderem contra as forças do submundo, ou seja, de saírem vitoriosos na batalha contra as forças do mal. Pois para um homem conhecedor as armas dos poderes malignos são ineficazes, pois ele reconhece a sua astúcia e pode agir vitoriosamente contra eles. Um certo perigo só existe enquanto a indiferença se apoderar do ser humano e ele negligenciar a luta contra ele, e este estado é, portanto, perigoso porque o adversário de Deus está imediatamente pronto para tomar a vontade indiferente do ser humano e então a batalha se torna cada vez mais difícil que o ser humano tem de travar. Pois esta é a força do ser humano que ele se entrega imediatamente a Deus e apela a Ele para proteção e também tomará este caminho devido ao seu conhecimento recebido. É por isso que o adversário de Deus tem poucas chances de conquistar uma alma que luta por Deus, mesmo que as tentações se aproximem dela sob a forma de ataques mentais que sempre ocorrem quando o ser humano acredita ser suficientemente forte e faz menos uso da ajuda de Deus. Deus quer sempre ser consultado, quer sempre ajudar o ser humano como guia em todas as situações da vida, mas também quer sempre ser chamado, e se o ser humano negligenciar esse Deus aparentemente se afasta dele e o deixa entrar em apuros para assim o acorrentar novamente a si mesmo, a fim de ser chamado novamente do íntimo do coração, para que através desse chamado as forças do submundo sejam deslocadas e a ascensão para cima possa agora acontecer sem esforço. Pois Deus quer facilitar às pessoas, mas a fraqueza da vontade torna o caminho para a altura difícil para elas._>Amém