B.D.-Nr. 6871
Donde vuestro trabajo para Mí haya concluido, la Mía también podrá empezar ahora, siempre que Yo no encuentre una fuerte resistencia. Pero anteriormente tiene que haber sido construido un puente, porque la resistencia significa un profundo abismo que aún separa al ser humano de Mí. Por lo tanto, vuestro trabajo no es en absoluto insignificante ni innecesario, pues podéis ayudar a construir este puente; tendrá que ser construido desde vuestro lado, porque el abismo también se originó de vuestro lado.... Y si el ser humano mismo no se pone a trabajo para cerrar la brecha de nuevo, entonces el semejante tiene que darle un empujón y ayudarle a empezar este trabajo.... Pero entonces estaré preparado con Mi ayuda y enviaré Mis fuerzas auxiliares. Y ahora vengo Yo Mismo a su encuentro, para facilitarle el camino hacia Mí....
La “gracia de Dios” un día se manifestará obviamente en cada ser humano; Un día extenderé Mi mano a cada ser humano, la cual debe tomar.... un día hablaré a cada ser humano con tanta claridad que su corazón le conmoverá si él se deja hablar sin resistencia interior.... Cada ser humano una vez se encontrará en una encrucijada y verá un sendero angosto que lleva hacia arriba, mientras que el otro camino esté llano y le parece más atractivo. Pero si tiene el impulso interior hacia las alturas entonces también elegirá el sendero angosto. Y una y otra vez Mis mensajeros también se interponen en el camino, cuyas instrucciones y directivas solo necesita seguir.
Y tales mensajeros sois vosotros, Mis siervos en la Tierra, que debéis estar constantemente activos para Mí. Pero mientras sigáis vagando por la Tierra, en medio del mundo y sus peligros, entre seres humanos que no tienen ningún impulso de levantarse desde las profundidades, siempre os costará también esfuerzo a guiar esos humanos hacia el sendero angosto, pues la mayoría de las veces solo os escuchan a regañadientes o pasan de largo de vosotros. Sin embargo, no debéis cesar de llamarles y de atraer su atención al camino hacia las alturas, porque primero tiene que despertarse su voluntad antes de que Yo Mismo pueda presentarme ante ellos para ofrecerme como su guía. Pero una resistencia abierta Me repele; una resistencia abierta no la rompo violentamente, sino que Me contengo.
Vuestra voluntad se dirige hacia Mí y, sin embargo, estáis más cerca de los seres humanos que Yo, porque vosotros mismos camináis entre ellos como seres humanos.... Por lo tanto, vosotros podéis influir favorablemente en vuestros semejante, mientras que a Mí Me está negada tal influencia, precisamente por su resistencia, que demuestra su lealtad a Mi adversario. Si lográis vencer tan solo esta feroz resistencia, entonces el ser humano también, en ocasiones, dirigirá su mirada más allá del abismo ante el cual se encuentra, y entonces construirá un puente en sus pensamientos, pues incluso los pensamientos dirigidos hacia Mí son los primeros pilares que Yo sostengo para que no se derrumben.
Desde Mi punto de vista, sería realmente fácil construir un puente hacia vosotros, los seres humanos en la Tierra.... De hecho, también he construido este puente a través de Mi obra de Redención, por lo tanto, existe.... pero solo se hará visible para el ser humano cuando Me reconozca como Redentor y Me invoque.... y esto siempre significa la renuncia de sus resistencia, la activación de su libre albedrío. Por lo tanto, el deseo de tender un puente tiene que surgir de su voluntad.... y para que este deseo despierte en él, esto debéis lograr vosotros a través de vuestro trabajo en la viña, que consiste precisamente en proclamar Mi Evangelio, dirigiendo los pensamientos de los seres humanos al Reino donde Yo soy el Soberano absoluto, para que también Me recuerden a Mí, a Mi Poder y a Mi Gloria....
Si ahora son capaces de reconocerme como un Dios de amor, entonces ya no se resistirán a Mi irradiación de amor, y entonces también puedo ejercer ahora Mi influencia, sin aplicar ninguna coacción de voluntad. La libertad de voluntad del ser humano requiere vuestra cooperación, porque debido a la voluntad de libertad no puede expresarme tan obviamente, que tengan que llegar a creer en Mí.... pero vosotros podéis decirles lo mismo lo que Yo tengo que decirles. Pero pueden creeros o no, también pueden rechazaros, porque lo que oyen a través de vosotros aún no es una prueba irrefutable para ellos.... Pero puede conmover sus corazones; pueden sentir que es verdad y abandonar su resistencia. Y entonces vuestro trabajo preliminar ha sido exitoso; entonces Yo Mismo podré intervenir, y entonces se cerrará la brecha que nos separaba; el ascenso será fácil porque Yo Mismo podré guiar al ser humano para que alcance la meta a salvo....
amén