6597 Acción de ayuda para las almas del más allá...

17 de julio de 1956: Libro 71

La tarea que se os ha encomendado no solo se extiende a la gente de esta tierra, sino que también a las almas del reino del más allá os son entregadas para que las cuidéis, porque a ellas se les debe abrir la posibilidad para que ellas sean oyentes de la Palabra divina, para que todavía puedan compensar lo que se perdieron en la vida terrenal... para que todavía puedan encontrar a Jesucristo allí, a quien tienen que huir en su necesidad y angustia para ser redimidos por Él... también a esas almas hay predicarles sobre todo el amor... porque su estado de miseria sólo puede remediarse cuando adquieren la fuerza de amor a través de su propia voluntad de amor y sólo entonces pueden ser activos en el amor.

En el último tiempo antes del fin, la redención de las almas en el más allá es por tanto urgente porque es tan más dispuestas a aceptar la Palabra divina, el Evangelio del amor que las personas en la tierra... y porque cada alma que da un paso hacia arriba en el más allá, también puede volver a ser un ayudante para las personas terrenales, si ahora puede actuar mentalmente sobre ellas, y su esfuerzo siempre consistirá solo en la salvación espiritual de aquellas. Donde la influencia de una persona a otra es solo débil, la influencia del reino espiritual aún puede tener éxito cuando las personas piensan en sus seres queridos fallecidos y ya han alcanzado un cierto grado de luz... al cual vosotros, como trabajadores celosos en la viña del Señor, por tanto podéis ayudarlos.

Es por eso que vuestra tarea es particularmente importante, y siempre se os advierte repetidamente que la sigáis concienzudamente para que se pueda aprovechar una oportunidad tan rara en la que las almas del más allá puedan obtener alimento para sus almas... Es cierto que a ellas también se les ofrece el mismo alimento en el reino espiritual, pero su grado de conocimiento es inicialmente tan bajo que no pueden evaluar lo que se les ofrece y están más inclinados a rechazar, como lo hicieron en la tierra.

Pero a través de vuestra mediación ellas se sienten atendidas y conmovidas beneficialmente porque la gracia de Dios en el último tiempo hace que sea especialmente fácil para ellas de llegar a la fe, y porque estas almas inmaduras están todavía demasiado conectadas con la tierra, por lo que también son más fáciles de influir desde la tierra... cómo, a la inversa, más tarde sus esfuerzos también se aplican a las personas en la tierra, a quienes conocen en la misma necesidad después de su muerte física. Esta vinculación y acciones de ayuda de la tierra al más allá y viceversa siempre ha sido posible, pero de cara al fin surgen más claramente cuando las personas son conscientes de su tarea y trabajan con amor por la salvación de las almas... Entonces Dios bendice especialmente esas conexiones, y Sus bendiciones también significan éxito.

El número de almas que todavía luchan por la Redención es infinito, pero la gracia y el amor de Dios también lo es... Pero un rayo de amor también tiene un efecto infinito... Y si una persona solo obra en amor por la Redención de una alma única, esta alma redimida ahora podrá volver a estar activa hasta tal punto que innumerables almas encontrarán nuevamente la salvación a través de ella... Y es por eso que, con vuestra ayuda, innumerables almas aún pueden salvarse antes del final. Siempre debéis recordar esto y tener en cuenta la importancia de vuestra tarea. Entonces seréis celosos en vuestra obra y crear y obrar incansablemente Para Dios y Su reino... y Dios bendecirá vuestro labor, porque Le ayudáis a traer de vuelta lo que ha estado separado de Él por siglos...

amén

Traducido por: Hans-Dieter Heise

Este comunicación no se menciona en ninguna folleto temático.

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