Cada uno tendrá que responder de cómo aprovechó Mi Palabra, como permitió que lo afectara, cómo respondió cuando tuvo la gracia de que Yo Mismo le hablara.... No le condenaré si no la reconoció como Mi Palabra, sin embargo, un día lamentará amargamente haber rechazado un don de gracia que podría haber reconocido, si hubiera querido seriamente descubrir la verdad y hacer lo correcto.... Pero aquellos, que no fueron indiferentes a Mi Palabra, que sintieron que Yo les hablaba y, sin embargo, por conveniencia y frivolidad la ignoraron, tendrán que responder por sí mismos, porque todavía se resistieron a Mí, de lo contrario Mi voz habría tenido que tocarlos....

Yo Me dirijo a cada ser humano de tal manera que su corazón se conmueve si no se resiste a Mí.... Sin embargo, Mi Palabra exige una transformación de su ser, y si un ser humano no está preparado para esto, cierra su corazón y también su oído, y entonces hace que Mi Palabra sea ineficaz.... “El que come Mi carne y bebe Mi sangre vivirá para siempre”.... He dicho estas Palabras y os he aclarado la importancia de aceptar Mi Palabra.... Porque Yo Mismo soy la Palabra hecha carne, y Yo Mismo vengo a vosotros en la Palabra y os traigo el alimento para vuestra alma, que no debéis subestimar, porque solo ella os garantiza una vida en la eternidad. Vosotros no podéis vivir sin este alimento; caeréis presas de la muerte eterna si no aceptáis el alimento y la bebida que dan vida a vuestra alma....

Tenéis que aceptarme a Mí Mismo dentro de vosotros, y como Yo Mismo soy la Palabra, ahora también os será comprensible que no podáis rechazar o menospreciar Mi Palabra, que no quedará sin consecuencias si pasáis con indiferencia ante Mi Palabra cuando se os presenta.... Vosotros os juzgaréis a vosotros mismos cuando un día reconozcáis lo que se os ha ofrecido y cómo habéis respondido a este don de gracia.... cuando reconozcáis que Yo Mismo Me he acercado a vosotros en la Palabra y os he ofrecido alimento y bebida para vuestra alma, que vosotros descuidadamente habéis rechazado....

Mi Palabra testificará contra vosotros; se levantará en el Último Día un alma marchita y hambrienta se pondrá un día delante de Mí, y a través de su condición dará testimonio de cómo esta alma valoró Mi Palabra durante su vida terrenal.... Y Yo no puedo considerar al alma de otra manera según su condición.... Porque rechazó lo que podría haberla ayudado a vivir, y lo que ahora necesita urgentemente para prepararse un destino miserable, tendrá que luchar para obtenerlo, y su remordimiento será grande por haber perdido por su propia culpa en la Tierra lo que estaba abundantemente disponible para ella y le habría conseguido un destino glorioso en la otra vida....

Yo hablo a los seres humanos una y otra vez, pero sólo unos pocos reconocen la voz del Padre, y por eso sólo hay unos pocos que aceptan Mi Palabra.... Pero éstos serán bendecidos, porque continuamente recibirán alimento y bebida para sus almas, que ahora entran en la vida en gloria cuando dejen el cuerpo terrenal.... Y así, el alma que ignora Mi Palabra se juzga a sí mismo, porque sólo puede ser considerada según la forma en que se forma a sí misma, y entrará en el reino del más allá deformada, y Mi Palabra testificará en contra de ella....

amén

Este comunicación no se menciona en ninguna folleto temático.