Las revelaciones divinas sólo serán transmitidas a la Tierra con el propósito de alertar a los humanos sobre un gran peligro que amenaza sus almas.... Y los acontecimientos mundanos sólo se mencionan porque son simplemente el resultado de un bajo nivel espiritual y, al mismo tiempo, un medio para remediarlo. Dios sólo anuncia los acontecimientos mundanos a través de sus profetas porque están estrechamente relacionados con el desarrollo espiritual y porque su único propósito consiste en influir en los humanos para que puedan cambiar en relación espiritual, para que recuerden su alma y la ayuden a levantarse.

Las revelaciones nunca deben tener el propósito de influir en los humanos en relación mundana, y por lo tanto, toda revelación que ofrezca la perspectiva de acontecimientos mundanos puede considerarse como una pista espiritual, siempre que sea difundida por seres humanos que se esfuercen obviamente por servir a Dios, trabajar para Su Reino y proclamar Su Palabra. Pues tales revelaciones nunca serán transmitidas a la Tierra sin la Palabra divina, porque proclamar esta Palabra es la tarea más importante de quien posee el espíritu profético y a quien tanto la Palabra divina como las predicciones de acontecimientos mundanos futuros provienen de lo alto con el propósito de difundirse, con el propósito de instruir a quienes caminan en las tinieblas del espíritu y no recuerdan sus almas.

Sin embargo, cualquiera que busque revelar el futuro en un sentido terrenal, que crea poder ver el futuro con clarividencia, que proporcione información acerca del futuro para obtener ganancias terrenales, es considerado un falso profeta y tiene que ser rechazado como poco fiable, incluso si afirma hablar en nombre de Dios.... Porque una misión divina solo se concede a quien se pone conscientemente a disposición de Dios para trabajar por Su Reino. Pero éste ya no presta atención a los bienes terrenales, y su único objetivo consiste en liberar a sus semejantes de la materia, presentarles los esfuerzos materiales como inútiles y únicamente tratar a promover el desarrollo espiritual humano. Por esta razón, informa a los humanos con total desinterés, de lo que se le da a conocer a través de la revelación de Dios....

Siempre debéis considerar el propósito de una revelación.... Ya sea que se busque únicamente el desarrollo espiritual o ventajas terrenales.... y podréis juzgar correctamente el valor o la inutilidad de las predicciones y ajustar vuestra vida en consecuencia. Solo lo que contribuye a la Salvación del alma se ha de valorar como divino y hay que rechazar todo lo demás, que prometa progreso o ventajas terrenales, pues Dios Se revela sólo por el bien del alma, para que pueda escapar de su angustia espiritual....

amén

Este comunicación no se menciona en ninguna folleto temático.