5761 Vida... Muerte... Dones de Espíritu...

5 de septiembre de 1953: Libro 63

De Mí emana toda la vida, la luz que es necesaria para la vida emana de Mí... la verdad emana de Mí porque Yo Mismo soy vida, luz y verdad, y ningún ser puede vivir sin luz y verdad, a menos que las tuviera de Mí, porque no hay vida aparte de Mí. La verdadera vida, sin embargo, no debe entenderse como un ser en sí mismo, pues también puede ser un ser que carece de vida, porque no acepta Mi poder de amor de Mí, porque rechaza este poder de amor y por eso habita en las tinieblas, en la ignorancia y en la completa impotencia... en estado de muerte... Entonces el ser está fuera de Mí, huye de la fuerza positivamente efectiva, huye de la luz, está sin amor y sin vida. Y primero debe volver a Mí otra vez, si de verdad quiere vivir...

Pero una vida se prueba a sí misma a través de una actividad constante... a través de la aparición constante de nueva vida, a través de un aumento en el poder... La vida es un intercambio constante de poder, la vida es un poder que está siempre en movimiento, que mantiene todo unido, que está constantemente construyendo, por lo que tiene un efecto positivo. Y es por eso que la vida que emana de Mí, el poder que emana de Mí nunca puede producir un éxito negativo... Pero donde esto es reconocible, Mi poder dador de vida no puede obrar en esto... Donde hay luz, verdad y vida de Mí, inevitablemente debe ser reconocido Mi poder, porque donde Mi poder no obra, hay oscuridad de espíritu, error y un estado de impotencia, y muerte obviamente reconocible. Así que ahí ya no hay ninguna conexión conmigo a través de la cual pudiera dar poder de despertar a la vida a los seres, y por lo tanto estos seres están fuera de Mí...

La humanidad se encuentra en este estado, que no puede llamarse “vida”, y permanecerá en este estado hasta el final... (05.09.1953) porque la conexión Conmigo, la fuente de la fuerza, sólo puede establecerse a través del amor y porque a la gente le falta amor. Un corazón amoroso se abre a Mi poder, pero un corazón sin amor, frio, se endurece y se cierra a toda irradiación, que Mi gracia y misericordia permite que le conceda una y otra vez para despertarlo de la muerte de la vida. Y así, una vida correcta solo puede ser reconocida en una persona que está enamorada, y esta vida se expresa en capacidades espirituales.

Ahora Mi poder, Mi Espíritu puede obrar en el hombre; por lo tanto, podrá lograr algo inusual, poseer capacidades que no están naturalmente presentes en el hombre, pero que se despiertan a través de Mi poder y, por lo tanto, pasan a primer plano. En un tiempo de total falta de fe y de amor de la gente, tales capacidades espirituales son particularmente evidentes, cuando en realidad son parte del destino del hombre y deberían ser un fenómeno general, porque el hombre debe hacer uso de Mi poder, de Mi obra del Espíritu durante su tiempo en la vida terrenal, y puede hacerlo tan pronto como cumpla los mandamientos del amor...

Pero ¿qué pasa con la humanidad ahora? Ya nadie tiene comprensión para una obra extraordinaria, para capacidades espirituales, por el contrario, los que realmente viven entre la multitud de muertos en la tierra son atacados... Sólo viven porque aman, porque Yo Mismo estoy donde está el amor, y porque donde Yo estoy solo puede haber vida, Sin embargo, donde Yo estoy, también hay verdad y luz... Donde vosotros humanos ahora podéis comprobar visiblemente Mi obra, donde se puede reconocer los dones del Espíritu, de los cuales está escrito que debéis luchar por ellos, allí solo se representa la verdad, allí Yo Mismo obro a través de Mi Espíritu...

Pero ¿dónde se manifiesta todavía hoy la obra del Espíritu? Dónde aparecen capacidades inusuales, dónde pueden reconocerse hechos inusuales que no podéis calificar como milagros de falsos profetas porque están asociados con la proclamación de Mi Palabra... la proclamación de Jesucristo y Su obra de Redención... Y dónde están estos señales visibles de la obra del espíritu divino que faltan en todas partes? Pensadlo y preguntados seriamente dónde hay vida y dónde la muerte es inconfundible... Y esforzaos seriamente por despertar a la vida, por dejar fluir Mi fuerza en vosotros y hacerlo posible a través de una vida de amor, cumpliendo los mandamientos del amor a Dios y al prójimo... al conectar Conmigo y aceptar Mi fuerza... pero solo quien permanece enamorado...

amén

Traducido por: Hans-Dieter Heise

Este comunicación no se menciona en ninguna folleto temático.

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