Es una lucha incomparable en el mundo espiritual, ya que la cantidad de los espíritus inferiores aumenta inconmensurablemente y se multiplican constantemente porque los humanos que abandonan la Tierra están completamente bajo el hechizo de aquel que gobierna el reino de las tinieblas. Es una tarea aparentemente insuperable redimir a las almas de este reino, Es una lucha por parte del reino de la luz, que siempre se lleva a cabo con amor y requiere de excesiva paciencia y perseverancia, pues los seres oscuros siempre están activos para retener a un alma que quiere escapar de ellos, por eso la lucha se da, por así decirlo, entre los seres de luz y las fuerzas de las tinieblas por las almas de los humanos que aún no han caído completamente sin esperanza ante el adversario de Dios.

Pero se trata de estimular la voluntad de las almas para que se esfuerce hacia arriba, porque entonces los seres de luz pueden intervenir con su fuerza, mientras que antes no se les permitía utilizar ninguna fuerza en absoluto. Y este esfuerzo por dirigir correctamente la voluntad de las almas es incomparablemente difícil y a menudo infructuoso. Todo lo que se les presenta a las almas, ellas no lo creen y no aceptan nada. Y aún así no deben ser abandonadas por los seres de luz, porque sólo la perseverancia conduce a la meta.

Tampoco pueden enfrentarse a las almas de las tinieblas en toda su plenitud de luz, para no forzar la voluntad de escuchar a ellos. Tienen que aparecer en el mismo envoltorio, y como dentro de sí mismos y explicarles su angustia para persuadirlas a cambiar su situación. Su amor las toca de manera beneficiosa, pero la angustia espiritual de las almas es a menudo tan grande que se vuelven embotadas y ya no son accesibles a ninguna instrucción. Sólo es posibles convencerlas a través de repetidos intentos, porque su angustia se vuelve más insoportable cuanto más dura su resistencia.

Si ahora los seres de luz reciben apoyo por parte de los humanos en la Tierra a través de la intercesión o la atención mental al Evangelio, las almas están más dispuestas a escucharlos porque reciben una fuerza que debilita su voluntad de rechazar, y entonces los esfuerzos de los seres de luz tienen éxito. Los pensamientos de los humanos en la Tierra pueden obrar verdaderos milagros en el reino espiritual.... Las almas son puestas así en un cierto impulso de actividad, sienten una fuerza que ahora desean usar, y de repente tienen el deseo de mejorar su miserable estado, miran a su alrededor, por así decirlo, buscando una oportunidad de escapar de su situación actual, y siempre encontrarán seres dispuestos a ayudar.... seres de luz que, sin embargo, no son reconocibles para ellas como tales, que ahora las ayudan con palabras y hechos.

Los seres de luz no se cansan de conducir a las alturas a aquellos que se les están confiados, pero el primero comienzo es a menudo increíblemente difícil antes de que la voluntad del alma esté lista para escucharlos. Porque entonces las fuerzas opositoras intentan constantemente influenciarlos de manera opuesta y rechazar a todos los que quieren ayudarlos. La oración de un ser humano en la Tierra puede entonces tener un efecto indescriptiblemente beneficioso, porque la fuerza que se imparte al alma al respecto se utiliza siempre de forma positiva. Es como si el alma entonces reconociera la hostilidad de las fuerzas inferiores y la voluntad de los seres de luz de ayudar, y ya se dirige voluntariamente hacia estos últimos y se apartara de las fuerzas inferiores.

Hay que llevar ayuda a las almas desde un lado, si ellas mismas aún no han comprendido de qué se trata. Y por eso la intercesión amorosa es la forma más segura de dar fuerza, porque la perciben como un beneficio, incluso al ser que aún está alejado de Dios, y entonces usa la fuerza, es decir, cambia su voluntad.... renunciando así a su resistencia mediante el influjo de fuerza y ahora es más fácil de guiar e influenciar por los seres que quieren ayudarlo a alcanzar la altura.... La lucha por estas almas es indescriptiblemente difícil, pero no desesperada, y es por eso que los seres de luz no se cansan, y no cejan hasta haber sacado a las almas de las tinieblas hasta la luz eterna....

amén

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