Io raddrizzerò ciò che voi avete piegato storto, farò di tutto per sgravarvi, perché non voglio lasciarvi nella miseria e portarvi sempre il Mio Aiuto, affinché possiate fare il lavoro per Me. Ma la Mia preoccupazione è che voi ridate la Parola fedelmente, cosa e come l’avete ricevuta da Me e se vi invito a ciò, ne ho davvero il Mio motivo, perché Io voglio che nessun’opera d’uomo vi sia da riconoscere, dato che Mi sta davvero a disposizione il Potere di rendere il contenuto così comprensibile che ogni uomo lo possa comprendere.
Ciò che ora voi credete di migliorare, è critica alla Mia Parola, che non vi compete, ma dovete evitarla. Ma Io conosco la vostra volontà e così so che voi effettuate tali miglioramenti nella migliore intenzione di servirMi. Ma allora non è la “Mia Parola” così come Io La offro agli uomini e voglio anche averLa ridata in questo modo, quindi invariata. Perché soltanto la Parola come fluisce da Me, ha la Forza convincente. Appena un uomo vi apporta delle variazioni, non è più la Mia Parola, perché non è uscita da Me.
Ed Io so bene, chi non ha apportato nessuna variazione arbitraria, chi ha parlato in quel modo, come corrisponde alla Mia Volontà. E perciò potevo anche scegliere di ricevere nel dettato la Mia Volontà, che Mi ha quindi preparato un involucro umano come vaso d’accoglienza del Mio Spirito ed ora Io potevo “rivelarMi a lei”, come ora l’ho riconosciuta giusta e Mi Sono Espresso in modo che era comprensibile per tutti, perché ho parlato così come ho anche potuto farlo, perché il ricevitore non lo ha riprodotto con le sue parole, ma l’ha ricevuto da Me direttamente in dettato.
E questo dovreste guardare, non dovete nulla aggiungere e nulla tralasciare di ciò che venne dettato da Me. Perché Io Sono intervenuto nel dettato sull’uomo, affinché non possa far valere nulla come produttore dei pensieri, ma ha sovente scritto la frase che non capiva intellettualmente ma, cosa che è possibile soltanto nel dettato, le è divenuto comprensibile soltanto con la frase successiva. E questo è il segno visibile del fatto che ha avuto Origine in Me, che cioè si può parlare della “Mia Parola”.
Amen
TraduttoreYo enderezaré lo que vosotros habéis torcido, Yo haré todo, para descagaros, pues Yo no quiero dejaros en el apuro y ofreceros siempre Mi Ayuda, para que podáis prestar el trabajo para Mí. Pero esta es Mi preocupación: que transmitáis literalmente lo que de Mi habéis recibido y como lo habéis recibido y si Yo os induzco a ello, tengo para ello realmente Mi motivo, pues Yo quiero que ninguna obra humana sea perceptible en ella, puesto que todo el poder esta a Mi disposición, en verdad, para hacerlo, de modo que el contenido sea comprensible, que pueda comprederlo cada hombre.
Lo que creéis, por lo tanto mejorar, eso es crítica en Mi Palabra, la que a vosotros no os corresponde, sino que se debe dejar de hacer. Pero Yo sé sobre vuestra voluntad y así tambié sé, que lo hacéis con la mejor intención de servirme tales mejoramientos. Pero entonces ya no es Mi Palabra de ese modo, como Yo se la ofrezco a los hombres y ella quiero Yo que sea transmitida de esta forma. Pues sólo la Palabra como ella afluye de Mí, tiene la fuerza convincente. Tan pronto que un hombre haya hecho en ella modificaciones, ya no es más Mi Palabra, pues así no ha salido ella de Mí.
Y Yo sé bien, quien no ha hecho en ella arbitrariamente modifiación, quien hablaba en la manera como corresponde a Mi Voluntad. Y a él pude Yo elegir también por lo mismo, a que recibiera en Mi Voluntad el dictado, quien por eso preparó su envoltura humana en recipiente receptivo de Mi Espíritu y Yo podía ahora "manifestarme a él" como Yo lo reconocí por justo y Yo me expresé en él, de manera tal que era comprensible para todos, pues Yo hablé así, como ahora Yo también podía, puesto que el receptor no tradujo con sus propias palabras, sino que de Mí fueron dirigidas a él en forma de dictado.
Y eso debéis tener en cuenta, no añadéis o suprimáis ninguna letra de lo que por Mí le fue dictado. Pues Yo por eso he actuado en él en forma de dictado, para que él no pase por el generador de los pensamientos, para que él no pueda comprender frecuentemente la frase escrita, sino que le sea comprensible primeramente a través de la siguiente frase. Y esta es la señal evidente de que ella ha partido de Mí, de que es por lo tanto, y que puede decirse de: "Mi Palabra."
Amén
Traduttore