Con l’agire dell’anticristo nel tempo della fine viene anche accelerata la fine, perché ora aumenta al massimo la miseria dei Miei, e rende necessaria la Mia Venuta per finire questa miseria. L’anticristo ha soltanto questa meta, di detronizzarMi, e di sedere sé stesso sul trono, cioè di togliere totalmente agli uomini la fede in un Dio e Creatore dall’Eternità, per stare più in alto lui stesso nella fama, per essere onorato e temuto, come Dio. Non vuole possedere l’amore degli uomini, ma soltanto la loro sottomissione, vuole avere il potere su tutto e quindi essere l’unico dominatore. Finché gli uomini sono ancora credenti, finché riconoscono un Potere al di sopra di loro, davanti al quale una volta dovranno rispondere, non saranno della volontà di colui che pretende da loro qualcosa di anti divino. E perciò l’anticristo procederà contro ogni Potere, mentre cerca di estirpare la fede in Me con mezzi brutali, con dei mezzi che renderanno difficile ai Miei di rimanerMi fedeli. Ma loro ricevono da Me Forza in abbondanza. Mi rivelerò a loro così apertamente, che vengono sempre fortificati nella fede, che devono prendere su di sé ogni ingiustizia nella conoscenza, che Io Solo posso dare, e li ricompenso veramente per ciò che è stato loro incaricato sulla Terra. L’aspirazione dell’anticristo è l’estirpazione della Dottrina cristiana, l’impedimento di ogni sapere su Gesù Cristo come Figlio di Dio e Redentore del mondo. Mi dichiara apertamente l’inimicizia, e questa è la sua fine. Il Mio avversario si incorporerà in un uomo, che gli è totalmente succube, cioè possederà la sua anima totalmente, ma prima illuderà gli uomini mediante dei vantaggi di ogni genere, che gli assicurano un ultragrande seguito. Ed il suo parlare ed agire sarà una maschera, sotto la quale nasconde i più malvagi pensieri. Saprà maestosamente nascondere l’arroganza, la menzogna, la brama di vincere, ma il disamore lo scoprirà presto, ma soltanto davanti agli occhi dei Miei, perché nei confronti dei suoi seguaci finge comprensione per tutte le sofferenze, che però non cerca di mitigare, ma contribuirà solamente ad aumentare queste sofferenze. Il credente lo riconoscerà, perché ha molto da soffrire sotto il suo dominio; ma chi fa la sua volontà, chi si stacca apertamente da Me, viene trattato da lui come amico ed onorato e rispettato in modo terreno. E così presto si formeranno due parti, la maggioranza apparterrà a lui, ma soltanto una piccola schiera rimarrà fedele a Me nel suo pensare ed agire. E questi saranno sempre in pericolo, perché il Mio avversario spinge gli uomini, di arrecare loro del danno in ogni modo. L’anticristo ricompensa questo procedere contro i Miei, per far cadere ancora gli ultimi credenti, che gli prestano ancora resistenza. Inizierà un amaro periodo di miseria per i Miei, ma sarà comunque sopportabile, perché possono ricevere un insolito Dono di Grazia, $$perché$$ $$Io$$ $$Stesso$$ $$Mi$$ $$mostro$$, dove gli uomini minacciano di diventare deboli. Io conosco la volontà e la predisposizione di ogni singolo che è per Me, e non lascerò davvero conquistare il sopravento al Mio avversario su queste anime. Inoltre la fine è vicina, e dato che i Miei Mi sono fedelmente affezionati nel cuore, allora posso perciò anche comparire oltre la legge, per donare loro la Forza. E molti Mi vedranno, ed allora nessun potere del mondo può togliere loro la fede in Me. Allora darebbero anche gioiosi la vita se la chiedessi. Ma termino il crudele gioco del Mio avversario. Quando crede di averlo vinto, O verrò nelle nuvole e giudicherò il vivente e ciò che è morto.
Amen
TraduttoreLa intervención del anticristo en los tiempos finales acelerará también el fin, porque los sufrimientos de los Míos aumentarán hasta el extremo - lo que requiere mi Venida para poner un fin a sus sufrimientos.
El anticristo tiene por único objetivo quitarme el trono y colocarse allí él mismo, es decir, quitar a los hombres definitivamente la fe en un Dios y Creador desde la eternidad, y eso para aumentar su propio prestigio, para ser honrado y temido como un Dios.
Al anticristo no le interesa obtener el amor de los hombres sino únicamente su sumisión.... y desea tener el poder sobre todas las cosas, pues, quiere ser todopoderoso.
Pero mientras los hombres tengan fe en Mí, mientras reconozcan un Poder por encima de ellos ante el cual en su día tengan que rendir cuentas, no se someterán a la voluntad de aquel que les exige hacer cosas contrarias a mi Voluntad. Por eso el anticristo se rebelará contra mi Poder, intentando extinguir la fe de los Míos, utilizando para ello los medios más brutales que dificultarán a los Míos el mantenerse fieles a Mí.
Y para que puedan mantenerse firmes, mis fieles recibirán fuerza abundante de Mí; pues, me manifestaré tan obviamente a ellos que su fe se fortalecerá y serán capaces de soportar todas las penurias, reconociendo que soy sólo Yo Él que puede dar y tomar, y que les premiaré por lo que tengan que sufrir en la Tierra.
El afán del anticristo es la extinción de la enseñanza cristiana.... abolir todo conocimiento acerca de Jesucristo, el Hijo de Dios y el Redentor del mundo.... Me ha declarado abiertamente la guerra, ¡y esto es su final!
Mi adversario se incorporará a un hombre que le será totalmente sometido, es decir, él dominará totalmente el alma de este hombre. Ante todo, el adversario engañará a los hombres mediante sucesos impresionantes de toda clase que le garantizarán una enorme afluencia de seguidores.
Sus palabras y hechos serán una mascarada debajo de la cual se esconderá una mente infame. Sabrá ocultar a la perfección la soberbia, la mentira y la codicia. No obstante, pronto la falta de amor le pondrá al descubierto - pero eso solamente ante los ojos de los Míos, porque ante sus seguidores simulará comprensión por todos los sufrimientos - calamidades que no intentará a aliviar sino incluso contribuirá a incrementarlas.
El creyente le reconocerá, porque tendrá que sufrir mucho bajo su dominio; pero el que se somete a su voluntad y reniegue de Mí, será tratado por él como un amigo, y recibirá honra y respeto de él a nivel mundano.
De esta manera se formarán dos bandos: la mayoría seguirá al anticristo y solamente un pequeño grupo se mantendrá fiel a Mí en sus convicciones y actividades. Pero estos fieles estarán siempre en peligro porque mi adversario incitará a los suyos a que hagan daño a los Míos en todos los aspectos.
El anticristo recompensará este comportamiento en contra de los Míos, esperando que fallen también los últimos creyentes fieles que todavía le ofrezcan resistencia. Empezará entonces un tiempo muy cruento para los Míos; no obstante, lo podrán soportar porque recibirán de Mí dones extraordinarios de mi Gracia, pues Yo mismo me mostraré en donde los hombres estén en peligro de enflaquecer. Yo conozco la voluntad y las intenciones que cada individuo me dedica a Mí y de ninguna manera permito que mi adversario se apodere de su alma.
Dado que el final está cerca y mis fieles en su corazón siguen entregados a Mí, también podré manifestarme a ellos -aunque sea fuera de toda regla- para proporcionarles fuerza. Muchos me verán, y entonces ya no habrá poder del mundo que pueda apartarlos de Mí.... Su fe será tan fuerte que incluso darían su vida con alegría si Yo se lo pidiese.
Yo, no obstante, terminaré con las jugadas crueles de mi adversario....
Cuando él se imagine haberlo ganado todo, vendré Yo en las nubes y juzgaré lo vivo y lo muerto.... Yo rescataré a los Míos antes de ejecutar la obra de la destrucción de la Tierra y de todos sus habitantes. Antes, la miseria y los sufrimientos serán grandes, pero mi Amor os salvará y mi Poder encadenará al que está en contra de Mí, porque su tiempo ha vencido....
Amén.
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