B.D.-Nr. 8815

Juan Bautista – “La voz que clama en el desierto”

También a esta pregunta quiero darte una respuesta, ya que es de gran importancia que vosotros, los que recibís Mi Palabra, no incurráis en un pensamiento erróneo, porque muchos creen que son el Precursor esperado desde hace mucho tiempo que anunciará mi Venida. Sin embargo, os digo siempre de nuevo que vendrá en el tiempo del anticristo, que su aparición coincidirá con él, y que entonces también lo reconoceréis. Su aparición será de breve duración y se manifestará cuando los hombres lo necesiten, cuando quieran recibir consuelo y fuerza. Por lo tanto, no podréis esperarlo hasta que haya comenzado la última fase, cuando la catástrofe natural haya pasado, cuando un gobernante se haya subido al trono a quien podáis reconocer claramente como el anticristo, y cuando éste deje estallar la lucha de fe.

Entonces se manifestará aquel que “clama en el desierto” y dará testimonio de Mí y de Mi Reino. Pero no lo sospechéis ya ahora, porque aún no es consciente de su misión. Pero cuando aparezca, todo el mundo lo reconocerá por la fuerza de su voz y de sus palabras. Entonces, tampoco deseará de ser reconocido como “la voz que clama en el desierto”, pero él lo será, y hablará, impulsado por el Espíritu en sí mismo, porque su deseo de dar testimonio de Mí, de anunciar Mi Venida e inducir a los hombres a hacer penitencia será tan grande en él que descuidará toda consideración, que hablará en medio de enemigos que tratan de destruirlo. Pero considerad que el tiempo del fin aún no ha llegado, que todavía es un tiempo de libertad de expresión, lo cual cambiará pronto cuando Mi intervención haya tenido lugar, cuando la miseria entre la humanidad sea tan grande que uno se presentará para remediar esta gran miseria.

Pero entonces también habrá llegado su tiempo, porque él es el último de los profetas, y quien le escuche recibirá gran fuerza. Se os ha dicho siempre de nuevo que será un hombre sencillo cuya fuerza de elocuencia no sospecharéis mientras que ande en toda la humildad. Sin embargo, de repente irrumpe en él, muy de repente se dará cuenta de su misión y se convertirá en un orador que habla poderosamente por Dios, que proclama Mi Nombre a todo el mundo y no tendrá miedo de luchar por Mi Nombre. Me presentará como el Redentor de la humanidad; luchará por Mí y por Mi Reino. Y por esto lo conoceréis, que Me reconoce a Mí Mismo como la Palabra hecha carne, que ponga claramente en evidencia Mi Encarnación en Jesucristo, que no deje valer ninguna diferencia entre Mí y Jesús, que reconozca a Jesús como Dios.

Y sus palabras coincidirán con Mi Enseñanza que os ha sido dada desde Arriba. Y esta es la señal de que él es “Juan el Bautista, la voz que clama en el desierto”, Mi Precursor que ha vuelto para anunciarMe, que no vendré mucho tiempo después Yo Mismo a buscar a los Míos cuando se encuentren en el mayor apuro de sus almas. Una y otra vez se encontrarán personas que se imaginan ser la encarnación de Juan. Una y otra vez les desengañaré y les diré que Él se les dará a conocer de manera inusual y que no puede ser buscado en aquellos círculos que se sienten llamados a ello. Él vendrá de donde menos lo sospecharéis.

Y esto os bastará a vosotros que lo esperáis prematuramente, porque aún no ha llegado el tiempo, pero no tardará mucho más en llegar, y entonces todo se consumará rápidamente uno tras otro, porque para él no existe una larga vida; pagará con la muerte su ministerio en la Tierra, como se ha anunciado por la Palabra y por la Escritura.

Amén

Traducido por: Diemo Landgraf

Este comunicación se menciona en los siguientes folletos temáticos:
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70/2 El regreso a Dios 2 ePub   PDF   Kindle  
162/2 Época final / parte 2 ePub   PDF   Kindle