El hombre debe esforzarse hacia delante y no permanecer en su etapa de desarrollo. La corta vida terrenal le es dada para la perfección; su alma debe madurar para deshacerse de sus últimos grilletes externos. La persona que no se da cuenta de esto, que se cierra al conocimiento de esto, cuando se le ofrece, no usa su energía vital terrestre para su propósito real y, por lo tanto, vive la vida terrenal en vano. Aunque tiene la oportunidad de madurar también en el más allá, nunca podrá recuperar el tiempo perdido en la tierra, porque el éxito espiritual de una vida terrenal aprovechada correctamente es completamente diferente del que puede lograr en el más allá a través de un ascenso laborioso.
Un estilo de vida terrenal de acuerdo con la voluntad de Dios trae al alma la filiación de Dios, puede alcanzar la perfección más alta en la tierra, puede transformarse en un ser de luz al que se le permite disfrutar de todas las glorias de la vida eterna.... Convertirse en hijo de Dios es solo posible para los seres que han recorrido la vida terrenal en el más fiel cumplimiento de los mandamientos de Dios, en ejercicio del amor al prójimo desinteresado y en un estilo de vida justo ante Dios por amor a Él. La filiación de Dios es la expectativa de todos los derechos del niño, y el hijo de Dios ha restaurado la relación correcta como existía al principio....
El ser podrá creer y dar forma por propia fuerza, será perfecto, así como el Padre en el cielo es perfecto.... Nunca alcanzará este grado de perfección un ser, que no ha vivido en la tierra de acuerdo con la voluntad divina, y por lo tanto se ha desarrollado hacia la altura. Probablemente pueda remediar su estado inferior en el más allá, entonces todavía puede trabajar sobre sí mismo y convertirse en un receptor de luz y fuerza y, por lo tanto, también alcanzar un alto de dicha, pero su actividad en el más allá es completamente diferente que la de los buenos hijos de Dios....
Estos reciben directamente la fuerza de Dios, y su plenitud de luz es inimaginable.... Su voluntad es igual a la acción realizada, porque con la fuerza de Dios que fluye hacia ellos son capaces de lograr todo lo que quieren y, por lo tanto, pueden crear y formar como Dios. Pero ellos mismos son una parte de Dios, emergidos de Su fuerza y vueltos de nuevo al poder primordial, y a través de la fusión con el poder primordial se han convertido en seres angelicales extremadamente poderosos, porque la voluntad y el pensamiento han permanecido en ellos y, por lo tanto, son libres y seres de luz autoconscientes de sí mismos, que ahora son extremadamente creativos. Todo pensamiento se convierte en acción porque se ajusta a la voluntad de Dios y la fuerza para llevarlo a cabo está constantemente disponible.
Crear y diseñar es la actividad más feliz, porque también se basa en el amor más profundo, el amor por lo no redimido, a quienes lo espiritual luminoso, los hijos de Dios, vuelven a dar nuevas posibilidades para la redención al permitir constantemente que surjan nuevas creaciones como cubierta para lo espiritual todavía no redimido, para que pueda desarrollarse hacia arriba.
Los hijos de Dios están impregnados de la sabiduría más profunda, conocen el propósito y el objetivo de cada obra de creación, y también conocen el grado de madurez de cada ser que se le permite encarnar en la creación de la tierra, y por lo tanto también sobre los medios más convenientes de maduración. Y pueden aplicar todos los medios ellos mismos, puede quererlo y también completarlo, pueden convertir cada pensamiento en una obra, están completamente libres de obstáculos en su actividad, siempre llenos de la fuerza de Dios, y su voluntad es igual a Dios....
Y están en plena armonía unos con otros, porque el amor está en todas partes en el reino de la luz, que es la fuerza de Dios. El amor de Dios irradia a través de todos los seres y los impulsa a una actividad cada vez activa, impulsa a los seres de luz unos a otros, a la unificación, y puesto que todos están inspirados por la semejante voluntad de Dios de permitir que surjan nuevas creaciones para redimir lo imperfecto, la fuerza divina fluye continuamente hacia el espacio. Crea continuamente nuevas creaciones, que son aceptadas y llevadas a cabo por los seres de luz como el pensamientos de Dios y que, por lo tanto, testifican nuevamente la insuperable sabiduría de Dios y Su gran amor, porque los creadores y diseñadores de las mismas están en la más estrecha asociación con Dios, que siempre y constantemente cumplieron Su voluntad tanto en la tierra como en el más allá....
Amén
TraductorVorwärts streben soll der Mensch und nicht auf seiner Entwicklungsstufe verharren. Das kurze Erdenleben ist ihm gegeben worden zur Vollendung; es soll seine Seele ausreifen, um ihrer letzten äußeren Fessel ledig zu werden. Der Mensch, der sich dessen nicht bewußt ist, der sich dem Wissen darum verschließt, so es ihm geboten wird, nützet seine Erdenlebenskraft nicht zu dem eigentlichen Zweck, und er lebt daher das Erdenleben vergeblich. Obzwar er Gelegenheit hat, auch im Jenseits auszureifen, wird er die versäumte Erdenzeit niemals mehr nachholen können, denn der geistige Erfolg eines recht genützten Erdenlebens ist ein ganz anderer, als den er im Jenseits durch einen mühevollen Aufstieg erreichen kann. Ein dem Willen Gottes entsprechender Erdenlebenswandel trägt der Seele die Gotteskindschaft ein, sie kann auf Erden zur höchsten Vollkommenheit gelangen, sie kann sich zum Lichtwesen gestalten, das alle Herrlichkeiten des ewigen Lebens genießen darf.... Ein Kind Gottes zu werden ist nur den Wesen möglich, die das Erdenleben zurückgelegt haben in treuester Erfüllung der Gebote Gottes, in Ausübung uneigennützigster Nächstenliebe und gerechtem Wandel vor Gott aus Liebe zu Ihm. Es ist die Gotteskindschaft die Anwartschaft auf alle Kindesrechte, und es hat das Kind Gottes das rechte Verhältnis wiederhergestellt, wie es im Uranfang bestanden hat.... Es wird das Wesen schaffen und gestalten können aus eigener Kraft, es wird vollkommen sein, wie der Vater im Himmel vollkommen ist.... Niemals wird diesen Grad der Vollkommenheit ein Wesen erreichen, das auf Erden nicht dem göttlichen Willen entsprechend gelebt und sich also zur Höhe entwickelt hat. Es kann wohl seinen mangelhaften Zustand im Jenseits beheben, es kann auch dann noch an sich arbeiten und Licht und Kraftempfänger werden, also auch einen hohen Seligkeitsgrad erreichen, aber seine Tätigkeit im Jenseits ist eine ganz andere, als die der rechten Gotteskinder ist....
Diese empfangen unmittelbar die Kraft von Gott, und ihre Lichtfülle ist unvorstellbar.... Ihr Wille ist gleich der vollbrachten Tat, weil sie mit der ihnen zuströmenden Kraft aus Gott alles vermögen, was sie wollen, und also schaffen und gestalten können gleich Gott. Sie sind selbst ein Teil Gottes, aus Seiner Kraft hervorgegangen und zur Urkraft wieder zurückgekehrt und durch die Verschmelzung mit der Urkraft zum überaus mächtigen Engelwesen geworden, weil der Wille und der Gedanke ihm verblieben ist und es sonach ein freies, seiner selbst bewußtes Lichtwesen ist, das nun überaus schöpferisch tätig ist. Jeder Gedanke wird zur Tat, weil er mit dem Willen Gottes konform geht und die Kraft zur Ausführung ihm ständig zu Verfügung steht. Das Schaffen und Gestalten ist die beglückendste Tätigkeit, denn ihm liegt gleichfalls die tiefe Liebe zugrunde, die Liebe zu dem Unerlösten, dem das lichtvolle Geistige, die Kinder Gottes, wieder neue Möglichkeiten gibt zur Erlösung, indem sie ständig neue Schöpfungen entstehen lassen als Hülle für das noch unerlöste Geistige, auf daß es sich zur Höhe entwickeln kann. Es sind die Kinder Gottes von tiefster Weisheit durchdrungen, Zweck und Ziel jeden Schöpfungswerkes ist ihnen bekannt, und sie wissen auch um den Reifegrad eines jeden Wesens, das in der Schöpfung auf Erden sich verkörpern darf, und also auch um die zweckmäßigsten Mittel zum Ausreifen. Und ein jedes Mittel können sie selbst in Anwendung bringen, sie können es wollen und auch vollenden, sie können jeden Gedanken zum Werk werden lassen, sie sind völlig unbehindert in ihrem Schaffen, immer von der Kraft Gottes erfüllt, und ihr Wille ist gleich dem Willen Gottes.... Und in vollster Harmonie stehen sie auch zueinander, weil überall im Lichtreich die Liebe ist, die da ist die Kraft aus Gott. Die Liebe Gottes durchstrahlt alle Wesen und treibt sie zu immer regerer Tätigkeit, sie drängt die Lichtwesen zueinander, zur Vereinigung, und da alle von Gott-gleichem Willen beseelt sind, neue Schöpfungen erstehen zu lassen, um das Unvollkommene zu erlösen, strömet ununterbrochen die göttliche Kraft ins Weltall. Sie erzeugt andauernd neue Schöpfungen, die als Gedanke Gottes von den Lichtwesen aufgenommen und ausgeführt werden und die darum wieder die unübertreffliche Weisheit Gottes und Seine übergroße Liebe bezeugen, weil die Schöpfer und Gestalter derer in engstem Verband stehen mit Gott, die stets und ständig Dessen Willen erfüllten auf Erden wie im Jenseits....
Amen
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