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Revelaciones de Dios a través de la creación y directamente....

Así como la voluntad creativa divina se revela en la naturaleza, así también el Espíritu de Dios se revela en los seres humanos a quienes Su voluntad creativa ha creado. Lo que surgió de Él y de Su poder es algo perfecto cuando es consciente de su origen, cuando sabe acerca del poder creador y Su perfección. Debe, por así decirlo, sentir Su fuerza en sí mismo y debe saber acerca del origen esta fuerza y su efecto.

Por lo tanto, a lo que ha surgido de Dios tiene que tener el don de la cognición, tiene que ser capaz de imaginar algo que corresponda a la verdad y se le tienen que acercar estas ideas. El ser creado tiene esta capacidad en su etapa de ser humano.... Puede pensar, actuar, querer y sentir.... puede reconocer y por tanto también llegar a ser perfecto su utiliza sus capacidades correctamente, y puede percibir las revelaciones de Dios para sí mismo mediante el uso correcto.... puede ser iluminado por Su Espíritu, de modo que todo conocimiento llegue a él y el hombre ahora llegue a ser sabiendo....

Dios Mismo Se revela a los seres humanos a través de Su Espíritu. Es la profundidad del amor que Le mueve para hacer esto, pero sigue siendo incomprensible para el humano porque le falta toda imaginación de la grandeza de la creación, de los innumerables seres vivientes que vivifican la gran creación. Y también le falta la incomprensión de la insignificancia del ser individual frente a la creación infinita. Pero nada en esta creación es demasiado pequeño para el Amor Eterno para ser captado por ello.... Cada ser es gobernada por la voluntad divina, cuidado por Su amor e inundado por Su fuerza, y Dios Se revela a cada ser, si éste quiere aceptar Sus revelaciones en un cierto estado de madurez.... Pero no siempre de la misma manera.

Pero Él habla a todos los seres humanos a través de la creación. Permitió que todo surgiera alrededor de los humanos y les dio el don de pensar.... el entendimiento. De modo que todo ser humano puede entender el lenguaje de la creación y todos los seres humanos pueden reconocer a Dios en ella. Y si el humano ahora utiliza correctamente el don de pensar, es decir, que hace del conocimiento adquirido a través de la creación las base de su pensamiento intelectual y lucha por un mayor conocimiento, en el sentimiento de pertenencia con el poder que hizo existir la creación.... si se conecta conscientemente con este poder en el deseo de ampliar sus conocimientos, entonces inconscientemente cumple las condiciones necesarias que se requiere para futuras revelaciones del Poder creativo.

El deseo por la verdad sólo es sentido por un ser humano en un cierto estado de madurez y por eso se corresponde a este deseo de la manera más comprensible para el ser humano. Las revelaciones directas del Espíritu divino requieren condiciones especiales y suelen estar asociadas con una tarea que debe ser encomendada a otros seres humanos. Aunque estas revelaciones atestiguan evidentemente la obra divina, sin embargo se ofrecen de tal manera que pueden ser rechazadas por personas que no desean la verdad, porque la aceptación de las revelaciones divinas requiere su voluntad.

Y es por eso que la creación como tal tampoco obligará a los humanos a reconocer una Deidad poderosa y llena de fuerza, sino que sólo el ser humano que quiere reconocer, percibe en la creación el lenguaje de Dios, pues los innumerables milagros de la creación no necesitan causar una impresión, si el ser humano los deja desapercibidos o sólo los ve como necesarios para la vida humana. Por lo tanto, Dios nunca puede revelarse a él, porque si lo hiciera de manera evidente, sin que el humano mismo lo solicite por su forma de vida y su deseo por la verdad, también se pondrá en duda la libertad de creencia, que definitivamente no está en la voluntad de Dios.

En particular, el desarrollo espiritual tiene que ser esforzado completamente libre desde dentro de uno mismo, ya que el desarrollo espiritual está incondicionalmente garantizado si un humano se hace digno de las revelaciones de Dios, porque es Su Palabra, pronunciada con amor que deja llegar a los seres humanos. A través de esta Palabra les informa de todo lo que al hombre le es útil saber. Y lo que les presenta ahora deja claro nuevamente cuán infinitamente grande y bondadosa es la Deidad Eterna, cómo Ella se preocupa constantemente sólo por el bienestar de lo que ha surgido de Ella y en qué consiste la obra de Dios en el universo.

Y tan pronto como el hombre es consciente de esto, también se esfuerza conscientemente hacia la Deidad Eterna y desea el aflujo de la fuerza que fluye de Dios a cada ser y es sentido por el hombre; él se esfuerza por la perfección para poder unificarse con Poder, Que dejo surgir todo lo que existe desde un amor sobremanera grande....

amén

Revelations of God through creation and directly....

Just as the divine creative will is revealed in nature, God's spirit is also revealed in the people brought into being by His creative will. What came into being from Him and from His power is only something perfect if it is aware of its origin, if it knows about the creating power and about Its perfection. It must, as it were, feel Its power in itself, and it must know about the origin of this power and about its effect. Thus the being that has emerged from God must be given the gift of cognition, it must be able to imagine something that corresponds to the truth and these ideas must be made accessible to it. The created being possesses this ability in its stage as a human being.... It can think, act, want and feel.... it can recognize and therefore also become perfect if it uses its abilities correctly, and it can perceive God's revelations to itself through correct use.... it can be enlightened by His spirit so that all realization comes to it and the human being now becomes knowledgeable.... God reveals Himself to people through His spirit. It is the depth of love which moves Him not to be grasped by man, for he lacks any measure for the greatness of creation, for the countless living beings which animate the great creation. And he therefore also lacks an understanding of the insignificance of the individual being compared to the infinite creation. Yet nothing in this infinite creation is too small, too insignificant for eternal love to grasp.... Every being is governed by divine will, cared for by His love and flooded by His strength, and God reveals Himself to every being if it wants to receive His revelations in a certain state of maturity.... But not always in the same way. But He speaks to all people through creation. He allowed everything around man to come into being and gave him the gift of thinking.... the mind. So the language of creation can very well be understood by every human being, and God can be recognized in it by all people. And if the human being now uses the gift of thinking correctly, i.e. makes the knowledge gained through creation the basis of his intellectual thinking and struggles for further knowledge in the feeling of belonging together with the power Which brought creation into being.... if he thus consciously connects himself with this power in the desire to extend his knowledge, he now unconsciously fulfils the conditions which are required for further revelations of the creative power. The desire for truth is only felt by a person in a certain state of maturity, and therefore this desire is also fulfilled in the most understandable way for the human being. The direct revelations of the divine spirit require special conditions and are mostly connected with a task for the fellow human being. Although these revelations obviously testify to divine activity, they are nevertheless offered in such a form that they can also be rejected by a person who does not desire truth, for the acceptance of divine revelations requires his willingness. This is why creation as such will not force people to recognize a powerful and mighty deity, but only the human being who wants to recognize will perceive God's language in creation, for the countless miracles of creation need not make any impression if he ignores them or only regards them as necessary for human life. God can therefore never reveal Himself to him, for if He were to do so in an obvious way without man himself applying for it through his way of life and his desire for truth, freedom of faith would also be called into question, which is not at all God's will. spiritual development in particular has to be striven for completely freely of its own accord, but spiritual development is absolutely guaranteed if the human being makes himself worthy of God's revelations, for these are His word spoken to people out of love which He sends to them. Through this word He informs them of everything that is useful for the human being to know. And what He now presents to them makes it clearly recognizable again how infinitely great and kind the eternal deity is, how It is only ever concerned about the well-being of that which has emerged from It and what God's activity in the universe consists of. And as soon as the human being has knowledge of this he also consciously strives towards the eternal deity and desires the influx of strength which flows from God to every being and is felt by the human being, he strives towards perfection in order to be able to unite with the strength Which gave rise to everything that exists out of greater than great love....

Amen