B.D.-Nr. 6092
Una bendición inimaginable fluye de la pura Palabra de Dios a todo aquel que la escucha y la valora como Su Palabra. Los seres humanos a menudo carecen de falta de juicio, la escuchan y no reconocen su gran valor para sus almas. Y como no la siguen, como no actúan conforme a la Palabra divina, tampoco pueden sentir ninguna bendición, aunque contenga poder divino.... Sin embargo, la Palabra de Dios, una vez pronunciada, es una fuente de fortaleza para todos los que la reciben fielmente en sus corazones, en la Tierra o en el reino del más allá.
Las almas que se abren a la Palabra de Dios recibirán fuerza y luz, porque la Palabra misma es fuerza y luz. Y este efecto lo sienten especialmente las almas del más allá, que aún carecen de luz y fuerza, cuando son tocadas por la Palabra divina.... o incluso.... cuando se dejan tocar voluntariamente por ella.... para las almas que aún habitan en las tinieblas, la Palabra de Dios es visible como destello de luz, a la que ahora deben dirigirse voluntariamente para sentir también de la luz y la fuerza.
La Palabra de Dios suena continuamente en el Reino espiritual.... pero sólo se reconoce y se siente cuando las almas están dispuestas a que Dios les hable.... cuando desean conocimiento y fuerza, para utilizarla conforme a la voluntad de Dios.... Como Dios irradia continuamente Su amor al infinito, Su Santa Palabra también resonará continuamente, pero sólo se escuchará cuando Sus criaturas deseen escucharla. Porque el amor de Dios no se impone a ningún ser, pero que siempre está listo para irradiar. Y la Palabra de Dios es la irradiación de Su amor, la que, por lo tanto, tiene que significar una bendición inconmensurable para todo lo espiritual que se abre a Su irradiación de amor....
En la Tierra, el efecto benéfico de la Palabra divina no es tan obvio, pero es recibido con gratitud por todo aquel que la recibe con su corazón y actúa en consecuencia.... En el más allá, sin embargo, hay luz donde resuena la Palabra divina.... Y estas fuentes de luz son el punto de encuentro de innumerables seres que tienen hambre de la Palabra de Dios, que la reciben con agradecimiento y alegría y, de este modo, aumentan su riqueza de luz y fuerza, porque la Palabra de Dios los inspira a actuar con amor y las almas en el más allá siguen tales sugerencias muy voluntariamente, que, sin embargo, son poco notadas en la Tierra.
Los habitantes de la Tierra disponen de mucha luz y fuerza, pero la pasan de alto.... En el mundo espiritual, sin embargo, se busca la luz, y donde brilla, la voluntad de amar de las almas se estimula tanto, que también desean llevar la luz a las tinieblas, y por lo tanto, la obra de Redención se lleva a cabo continuamente.... para guiar las almas de las tinieblas a la luz.... Y la actividad de los seres no disminuirá, porque una nueva fuerza y una nueva luz más brillante siempre fluirán hacia ellos, impulsándolos a una nueva actividad de amor.... Este efecto de luz y fuerza ciertamente puede sentirse también en la Tierra, pero sólo cuando los humanos desean conscientemente esta dirección de Dios.... Porque entonces Dios Se revela e irradia Su divina luz de amor en el corazón humano, quien entonces también siente la bendición de Dios y Le agradece por impartirles luz y fuerza.... la cognición correcta y una fe fuerte....
amén