B.D.-Nr. 5767

Gran angustia de las almas en el más allá....

Sobremanera grande es la necesidad de las almas en el más allá. Describiros su condición a vosotros, los humanos en la Tierra, sería suficiente para cambiar vuestra vida en una dirección diferente, pero entonces vuestro libre albedrío desaparecería. Impulsados por el miedo a un destino similar, inevitablemente os esforzaríais por un estilo de vida diferente, haciendo así lo que se os exige, pero no por vosotros mismos, iniciado por el libre albedrío. Sin embargo, debéis saber acerca del destino de las almas; debería seros transmitido, y aún seríais libres de creer y sacar vuestras propias conclusiones.

Al entrar en el más allá, estas almas han perdido todo lo que atesoraban en la Tierra. No poseen nada, pues sólo pueden heredar lo adquirido espiritualmente, y en esto sufren la mayor carencia. Están rodeados de oscuridad total por haber llevado una vida sin Dios, y son completamente impotentes, aunque no insensibles, pues su entorno ahora representa tormento y terror. Y este tormento y error también lo sentirá el alma que, con valentía y fuerza, llevo a cabo todo en la Tierra que ahora la ha asumido en las tinieblas....

Estos son sufrimientos de una naturaleza indescriptible, que o bien despiertan en el alma el deseo de escapar de este estado, o bien sólo intensifican los impulsos malignos y la llevan a buscar satisfacción también en ese reino, lo que significa sucumbir por completo a las fuerzas de las tinieblas. Sin embargo, incluso aquellas almas que no abandonaron la vida terrenal en este estado pecaminoso, sino cuyas vidas estuvieron desprovistas de amor e indiferentes a todo lo espiritual, se encuentran en una situación extremadamente aflictiva, pues también son indescriptiblemente atormentadas por las tinieblas, que a veces dan paso a un estado crepuscular cuando el alma aún no está completamente endurecida, de modo que también anhela la luz, pues solo el deseo puede llevarla a ella.

Pero a todas las almas les falta la fuerza para querer lo correcto.... y, según la ley desde la eternidad, no se les puede brindar ayuda si ellas mismas no la desean. La obra de misericordia de Dios no termina cuando el alma abandona el cuerpo terrenal, pero lo que dejó desaprovechado en la Tierra, aunque lo poseyó en abundancia, tiene que adquirirlo primero en el más allá, y es demasiado débil para eso.... Imaginaos siempre a seres extremadamente débiles e indefensos que sufren indescriptiblemente y dependen de ayuda para liberarse de su sufrimiento.... sentirían una inmensa compasión por estos seres si pudierais verlos en su necesidad.

Y todos vosotros tenéis almas allá cuya condición desconocéis cuando entraron en el reino espiritual.... todos vosotros habéis perdido seres queridos a causa de la muerte.... Por lo menos recordad de estas almas y ayudadlas, porque la más pequeña obra de Redención por ellas trae consigo más Redención, y vosotros habéis contribuido enormemente a ello. Y sólo podéis ayudarlas mediante el recuerdo amoroso y la oración, a través de la intercesión por estas almas, que, si bien, aún no las libera de su tormento, pero les da la fuerza para que el alma pueda cambiar su voluntad y aspirar a la luz.

No puede ser redimida de su situación dolorosa en contra de su voluntad, pero para que ella pueda querer correctamente, es necesario vuestra intercesión; una oración que le ofrezcáis con amor tan pronto como os recordáis de ella. Porque debéis saber que el alma os pide ayuda en cuanto intervenga en vuestros pensamientos, que las almas os rodean constantemente, esperando vuestra ayuda, y que no debéis apartar regañadientes los pensamientos sobre los difuntos si no queréis intensificar sus tormentos....

Para no perjudicaros a vosotros ni a vuestro libre albedrío, el destino de estas almas permanece oculto para vosotros. Existen dos mundos en los que vosotros y las almas difuntas os encontráis. Se ha trazado un límite y se os impide ver su mundo, pero que, sin embargo, existe, y podéis enviarles mucho amor desde vuestro mundo, lo cual tendrá un efecto de tal manera y de tal medida que innumerables almas podrán escapar de su condición. Recordad a menudo a estas pobres almas y no las dejéis pasar desapercibidas en su necesidad, pues lo que hagáis por ellas con amor compasivo será generosamente recompensado, pues ya recibiréis ayuda espiritual en la Tierra a través de todas las almas que ha pasado de la oscuridad a la luz....

amén


Este comunicación no se menciona en ninguna folleto temático.