B.D.-Nr. 4924
Yo estoy von vosotros todos los días hasta el fin del mundo.... Y, sin embargo, a menudo no Me reconocéis, aunque evidentemente estoy obrando entre vosotros. Y Yo no puedo revelarme a vosotros mientras sigáis viendo con los ojos del mundo, mientras prestéis atención a lo que ocurre fuera y no profundicéis en lo que hay dentro de vosotros. Quiero recibiros con brazos de amor, pero os alejáis de Mí y por eso no Me reconocéis. Esto sea dicho a todos aquellos que no son capaces de reconocerme en la Palabra que viene desde arriba y llega a Mis siervos que he elegido.
Mi voz es clara, entonces puede ser reconocida como la voz del Padre. El no reconocimiento caracteriza un estado de incapacidad para recibir Mi Palabra, que se basa en el hecho de que es la mente y no el corazón el que está preparada para la crítica, y que la mente fría nunca puede juzgar correctamente porque Mi voz sólo puede ser escuchada por el corazón. El corazón y la mente ciertamente tienen que ser activos, porque Mi Palabra puede soportar un examen intelectual, pero sólo el juicio del corazón es decisivo.
Pero os señalo Mi Evangelio, que Mis discípulos han de ser reconocidos en esto: que tienen amor los unos con los otros. El amor os convierte a todos a mis hijos, pero también tenéis que mostrar el amor unos a otros si queréis ser Mis verdaderos discípulos. Donde un ser humano actúa como oponente de otro, hay falta de amor y, por tanto, también la capacidad de juzgar, ya que el ser humano sin amor también carece de sabiduría. Por Mí debéis amaros los unos a los otros, porque de otra manera no puedo impartiros sabiduría, el único conocimiento verdadero de lo alto.
Como gotas de rocío, las pruebas de Mi amor caen en los cálices abiertos de los corazones amorosos (01.07.1950), y así sólo una cosa puede daros la prueba de que soy Yo Mismo Quien habla Palabras de amor a los humanos.... que el receptor camina en el amor, porque es un ser humano bueno, dadivoso y desinteresadamente servidor, que por lo tanto también está en Mi gracia. Los seres humanos que aman Me reconocen, reconocen Mi voz, pero un corazón sin amor nunca Me reconoce. Por eso, amaos los unos a los otros si queréis ser activos como Mis discípulos y escuchar Mi voz paternal.... Esto es para todos aquellos que dudan de la autenticidad de la Palabra que les es traída como misión divina.
Pero a Mis fieles colaboradores les digo lo siguiente: (02.07.1950) Dejad que el tiempo obre.... el tiempo realizará muchas cosas que a vosotros os parecen imposibles. No debéis haceros ilusiones de que Mi Palabra pura de lo alto encontrará la difusión que debería tener y que estaría en consonancia con su valor inconmensurable. No debéis olvidar que las fuerzas de las tinieblas están trabajando con el mismo afán para socavar la verdad pura, y debéis recordar que a Mi adversario se le ha dado un gran poder en esta Tierra por última vez, el cual utilizará.
Todo depende del libre albedrío del ser humano; Yo, probablemente, guío a los humanos, pero no los obligo.... Lo que doy desde arriba está destinado tanto al individuo como también a todos; Todos pueden beneficiarse de ello, pero quien no quiero hacerlo, no está obligado por Mi a hacerlo. El que tiene corazón hambriento desea alimento para su alma y lo encuentra, porque de una manera u otra Yo se lo daré tan pronto como lo pida.
En efecto, los seres humanos podrían ser considerados abundantemente, porque hay mucho pan del Cielo a vuestra disposición. Si Yo obstaculizara a las fuerzas contrarias, esto impondría una cierta coerción de voluntad tanto a Mi adversario como también a los humanos, que ya no tendrían que decidirse, sino que tendrían que decidirse, sino que tendrían que aceptar lo que se les ofreciera. Sólo la voluntad de ser humano decide. Y aun cuando la voluntad del ser humano parezca dañar a su prójimo, allí estoy Yo dispuesto con Mi don de gracia, para que nadie que quiera ser alimentado en Mi mesa quede atrás. Distribuyo Mi cena a todo aquel que quiera ser Mi invitado. Y ninguna voluntad del ser humano Me impide hacerlo.
Pero vosotros que debéis dar pan a Mis huéspedes en Mí nombre, no os neguéis a hacerlo si vuestro ámbito de actividad es todavía pequeño.... Muy pronto podréis desarrollaros, muy pronto se os exigirá un trabajo al que podáis dedicaros plenamente y comprenderéis también que hasta ahora sólo os he exigido un trabajo preparatorio, porque la misma voluntad humana os ha impedido trabajar con diligencia por Mí y por Mi Reino. Muy pronto seréis llamados a poneros indivisamente a Mi servicio.
Quiero atar a Mi adversario por mucho tiempo.... Pero esto no debe suceder arbitrariamente, porque Mi amor y Mi justicia determinarán siempre Mi voluntad. Mientras Mi adversario no exceda su autoridad, mientras sólo haga lo que Yo le he concedido y lo que contribuya al libre albedrío del ser humano, no le disputaré este derecho.
Pero él sobrepasará los límites de su poder.... al impedir que los humanos lleguen a conocerme a Mí, a un Ser sumamente perfecto, Que en Sí Mismo es Amor, Sabiduría y Omnipotencia y que quiere ser reconocido como Creador y Preservador de todas las cosas.... Él busca impedir este conocimiento, y Yo le daré completa libertad también en esto, hasta que su medida esté llena.... Y ahora entended que su primer esfuerzo consiste en expulsar la verdad pura de lo alto, privando así a los humanos de la posibilidad de llegar a conocerme a través de la Palabra de Dios traída a la Tierra. Entended que siempre comenzará donde la verdad de Mí comience a afirmarse....
Y entonces comprenderéis también los muchos obstáculos que se os oponen en la difusión del Evangelio puro, los cuales ciertamente podría quitar con Mi poder y Mi voluntad, si no fuera contra Mi orden eterna usar la coerción, ni hacia arriba ni hacia abajo....
Y creadme que bendigo hasta la más pequeña actividad por Mí y por Mi Reino, que se haga con respecto al libre albedrío a pesar de la gran oposición que dificulta vuestro trabajo por Mí. Todavía tendréis mucho trabajo por hacer y por eso no debéis cansaros de trabajar en pequeñas cosas hasta que Yo os llame cuando sea el momento adecuado....
amén