6103 La hora de rendir cuentas-el juicio.... justicia compensatoria....

9 de noviembre de 1954: Libro 66

Alto o bajo.... pobre o rico, joven o viejo.... todos tenéis que rendir cuentas un día por vuestro estilo de vida en cuanto llegue el último día. Nadie podrá escurrirse de esta responsabilidad, porque un día llegará la hora de rendir cuentas, la hora del juicio que decide sobre el estado de vuestro alma y sobre su destino futuro.... Aunque los hombres dudan de una vida después de la muerte, aunque creeis que la vida termina con la muerte de vuestro alma.... tampoco podéis escurriros del último juicio.... y cuando tenéis que reconocer con terror que vuestro pensamiento fue equivocado y vuestra vida fue en vano, porque solo pocos llevan una vida con amor que niegan una vida después de la muerte.... Y a estos pocos llega el reconocimiento y el anhelo de revolcar el malhecho. Y pronto van a encontrar ayudantes que los apoyan en su miseria espiritual.... Pero donde falta cualquier fe y se ve poco amor, allí la hora del juicio va a ser amarga, porque su desarrollo espiritual está según su destino que los espera ahora.... con la falta de fuerza y luz.... vegetar inconscientes en la oscuridad terrorífica.... Y ningún alma puede escurrir de este destino, da igual que puesto o honores más altos han mantenido en la tierra, porque todos están desnudos y pobres en el más allá, los que no se han creado anteriormente en la tierra un vestido espiritual.... los que solo se preocupaban por el cuerpo y no por el alma, cuyo anhelo sólo se concentraba en su objetivo en bienes terrestres y que no tenían ninguna fe en un juicio recomendatorio, en una vida después de la muerte. Tener que crear una funda en el reino del más allá, que significa un alivio, es aún más difícil.... pero no imposible.... pero a menudo dura mucho tiempo hasta que aquellas almas encuentran la voluntad para realizarlo. Y como el alma misma tiene que comenzar con la transformación, muchas veces puede durar eternidades hasta que tome la decisión. En la tierra los hombres no piensan en su final y en la responsabilidad a la cual se acercan, y por esto no se preparan; y después de la muerte les viene débilmente la idea de su situación, pero ya no pueden hacer mucha cosa para mejorar su situación, porque les falta cualquier fuerza la cual tenían en abundancia en la tierra. Y como solo los actos de amor en la tierra ayudan a conseguir la perfección del alma, también es el caso en el reino espiritual del más allá.... Los actos del amor significa: dar, querer ayudar, hacer feliz.... Pero las almas llegan completamente pobres y sin nada lo que pudieran regalar; no tienen fuerza para poder ayudar, ellos mismos son infelices y por esto no pueden repartir felicidad.... son pobres y desgraciados y ellos mismos necesitan ayuda. Pero el hombre no es consciente de que va a cosechar lo que anteriormente ha sembrado.... Pero según la justicia divina todo se tiene que equilibrar, y cada uno va a recibir según su mérito. Cada alma tendrá que cargar con su destino que se ha ganado por su estilo de vida en la tierra.... Y para cada hombre llega la hora en la cual se tiene que responsabilizar.... para cada alma viene la hora del juicio durante su último día....

amén

Traducido por: Bea Gato

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