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Sin la Redención por Jesucristo no hay bienaventuranza

Sed conscientes, los seres humanos, que Yo quiero ayudaros a conseguir ya en esta Tierra un grado de madurez que os facilita a entrar en el Reino de Luz nada más dejando la Tierra atrás...

Bien es verdad que todos vosotros vais a entrar en este Reino, pero hasta entonces el tiempo aún os puede traer tormentos inconmensurables si sin la menor espiritualización entráis en el Más Allá donde las Puertas para el Reino de Luz todavía os resultan cerradas.

Aunque mi Misericordia y mi Perdón sean válidos para cada alma aun si en la Tierra haya llevado una vida pecaminosa, pero Yo no puedo agraciarla de otra manera que mi Justicia lo permite, dado que en el Reino espiritual ella siempre sólo puede ocupar esferas que corresponden a su modo de vida - y entonces aún tiene que soportar sufrimientos y tormentos inconmensurables para expiar su culpa de pecados...

Y si en el Reino del Más Allá el alma no llega a encontrar a Jesucristo, entonces tendrá que sufrir sin fin porque se hunde cada vez más. Y finalmente tendrá que cargar con el hado de la nueva cautividad del espíritu en la materia porque no hay expiación sino mediante Jesucristo. Todos vosotros no percibís la Obra de Redención en todo su significado; y eso es lo que causa vuestra penuria espiritual...

Yo quiero ayudar a mis criaturas para que ya en la vida terrenal encuentren el camino hacia la cruz, el que entonces asegura al alma de una suerte muy distinta... porque una remisión de la culpa de pecados aún antes de la muerte del hombre es lo más deseable en toda la vida terrenal... entonces para el alma la Puerta para el Reino de Luz está abierta de par en par, y podrá gozar de Bienaventuranzas en profusión. Pero la humanidad no es consciente de la gran importancia de la Obra de Redención, y mi adversario se esfuerza mucho a mantenerla perpetuamente en ignorancia acerca de esto.

Y aunque los seres humanos crean que en aquellos años el Hombre Jesús haya pasado por la Tierra viviendo para los hombres una Vida ejemplar sumamente perfecta, y exhortándolos a que la imiten, aun así no quieren creer que haya sido una Misión espiritual muy sublime la que dio lugar a que Jesús realizara este paso por la Tierra... Pues no quieren creer que se trataba de una Obra de suma Misericordia... que Jesús quería redimir una enorme culpa y también la redimió mediante su muerte en la cruz - una culpa que no podía ser remediada sino por una Obra de Amor extraordinario y sufrimientos corporales inconmensurables... pues no quieren creer que así fue franqueado el enorme abismo entre el Reino de Luz y el reino de las tinieblas.

Pero ahora cada ser humano puede pasar por este puente - si cree en la Obra de Redención de Jesucristo y si también cree en que Yo me hice Hombre en Él. Esta Encarnación es otro Misterio que sólo pueden comprender los seres humanos cuyo espíritu está despierto, porque el estado pecador del hombre excluye toda comprensión para esto. De modo que el hombre antes debe tomar una posición que aprueba la Obra de Redención de Jesús, pues debe rogar por la remisión de su culpa y luego, en íntima unión con Él, debe ser enseñado por el Espíritu en él, el que sólo puede expresarse cuando la Remisión del pecado original ya está consumada.

Entonces también mi Encarnación en Jesús resultará al hombre comprensible, porque entonces el Espíritu que se halla en él le puede introducir en toda Verdad e instruirle sobre todas relaciones espirituales... De modo que el hombre puede volver a obtener la comprensión que en tiempos remotos había perdido a causa de su apostasía de Mí.

A la comprensión de todas estas relaciones sólo llegará mediante su espíritu. Pero aun así este Saber puede ser presentado al hombre... y si mediante Jesucristo, su Obra de Redención y mi Encarnación en Jesús él está informado conforme a la Verdad... entonces la Verdad también puede convencer a un hombre y hacer que este ande por el mismo camino - el camino hacia la cruz... Y cada vez más le resultará comprensible lo que antes sólo había oído por parte de un semejante inspirado.

Es por eso que me importa tanto la divulgación de la pura Verdad, porque quiero que esta Verdad también llegue a aquellos hombres que no son malos pero que todavía carecen de toda fe... los que ahora se sienten interpelados por la Verdad y tocados por la Fuerza de la Verdad, de modo que de esta manera también pueden llegar a tener fe. Si vosotros los seres humanos supierais lo mucho que vosotros mismos podéis mejorar vuestra suerte al entrar en el Reino del Más Allá - cuando mediante Jesucristo estáis redimidos de vuestra culpa del pecado, entonces también comprenderíais por qué Yo cada vez de nuevo llamo vuestra atención sobre este problema... por qué Yo cada vez de nuevo os explico las relaciones espirituales y procuro estimular vuestro razonamiento para reflexionar sobre ello. Porque la más mínima voluntad de cumplir con la finalidad de vuestra vida terrenal ya me sirve para que Yo os encamine y os facilite cada posibilidad de llegar a la comprensión...

Y precisamente el saber final sólo os puede ser regalado mediante el efecto surtido por mi Espíritu, porque bajo la influencia de mi adversario los seres humanos siempre querrán renegar precisamente lo más importante: la Redención de toda culpa por Jesucristo... Pues sí, hacen concesiones porque reconocen Su Existencia, y también a Él mismo le reconocen como hombre que en la vida terrenal ha logrado la máxima perfección. Pero aquí se trata de un problema totalmente distinto... pues se trata de que sin Él la humanidad sigue siendo eternamente separada de Mí –de su Dios y Creador– y que las almas en el Más Allá nunca podrán progresar en su desarrollo porque están por los suelos, agobiadas por la carga del pecado original... ¡pero esto no lo quieren creer!

Allí estas almas tienen una existencia miserable y digna de pena, hasta que también allí encuentren al Redentor divino... hasta que hagan caso a los seres de Luz y les permitan que las lleven hacia Él sin oponer resistencia, porque Él las sacará de las profundidades y les perdonará su culpa del pecado - si ellas tan sólo se lo piden...

De modo que primero debe haber una fe en que Jesús mediante su Obra de Redención –mediante su muerte en la cruz– haya redimido a los seres humanos de su culpa original. Sólo entonces la Misión del Hombre Jesús en la Tierra es justificada - y no sólo por Su modo de Vida que también hace falta para ello porque ningún hombre puede llegar a ser bienaventurado sin amor... de modo que la Doctrina del Amor era el argumento de todas sus Enseñanzas a los seres humanos, a los que quería salvar de las tinieblas del espíritu y de las ataduras del príncipe de las tinieblas.

Los seres humanos andaban por ahí en toda ignorancia, pues no se reconocían a sí mismos como criaturas de un Ser completamente perfecto. No reconocían su propia deficiencia y sólo amaban su propio “yo”; y su amor propio los instigaba a la pecaminosidad, a pecados que también habrían podido expiar en el Reino del Más Allá - aunque esto habría significado un tiempo casi eterno de tormentos...

Pero estos pecados no fueron la causa de mi Descenso a la Tierra, en el Hombre Jesús, sino que se trataba del gran pecado original, él de la apostasía de Mí hace tiempos remotos, el que ningún hombre habría podido redimir él solo aun sufriendo tormentos durante eternidades. Pues éste es el pecado que fue la causa de que Yo mismo haya descendido a la Tierra y en el Hombre Jesús haya llevado a cabo la Obra de Redención... Porque el Amor mismo redimió la culpa... y este Amor se hallaba en el Hombre Jesús...

Y, a los seres humanos, cada vez de nuevo os comunicaré esto mediante mi Espíritu, pues cada vez de nuevo procuraré a explicaros el mayor Misterio... Y en la etapa final enviaré mis discípulos para que comuniquen a los hombres la Verdad sobre Jesucristo, el Hijo de Dios y Redentor del mundo, El que me alojó a Mí mismo en Él; y Él y Yo somos Uno y lo seremos hasta en toda eternidad...

Amén.

Traductor
Traducido por: Ion Chincea

Sem salvação através de Jesus Cristo não há beatitude....

Considerai, humanos, que vos quero ajudar a alcançar um grau de maturidade na vida terrestre que vos permita entrar no reino da luz após a vossa partida desta terra. Um dia todos entrarão de facto neste reino, mas o tempo até lá pode ainda trazer-vos um tormento incomensurável se entrarem no reino do além completamente desencantados e os portões para o reino da luz ainda estiverem fechados para vós. A minha misericórdia e graça aplicam-se certamente a cada alma, mesmo que tenha levado uma vida má na terra, mas não posso considerá-la de forma diferente do que a Minha justiça permite, e ela só pode alguma vez tomar posse de esferas no reino espiritual que correspondam ao seu modo de vida e depois ainda tem de suportar imenso sofrimento e tormento a fim de expiar a sua culpa de pecado. E se não encontrar Jesus Cristo no reino do além, então o seu sofrimento não terá fim, afundar-se-á cada vez mais e terá finalmente de aceitar o destino de um novo banimento, porque não há outra expiação pelo pecado original senão através de Jesus Cristo. Todos vós não compreendeis o trabalho de redenção em todo o seu significado.... E isto é o que constitui a sua grande dificuldade espiritual.... E quero ajudar as minhas criações vivas a encontrar o caminho para a cruz enquanto ainda estão vivas na terra, o que depois assegura um destino completamente diferente para a alma.... Para um perdão da culpa do pecado antes da morte do ser humano é a coisa mais desejável em toda a vida terrestre.... Então o portão para o reino da luz estará aberto à alma, e então poderá desfrutar de êxtase em abundância. Mas a humanidade nada sabe sobre o grande significado do acto de Salvação, e o meu adversário esforça-se por mantê-los constantemente ignorantes.... E mesmo que as pessoas acreditem que o homem que Jesus uma vez atravessou a terra e exemplificou uma vida perfeita às pessoas e as chamou a segui-lo, não querem acreditar que uma alta missão espiritual causou a vida terrena de Jesus.... Não querem acreditar que foi uma obra da maior misericórdia, que Jesus quis redimir e resgatar uma grande dívida através da Sua crucificação, que não podia ser paga de outra forma que não através de uma obra de imenso amor e excessivo sofrimento físico.... e que, assim, o grande abismo entre o reino da luz e o reino das trevas foi colmatado. Esta ponte poderia agora ser introduzida por todas as pessoas que acreditam no acto de Salvação de Jesus Cristo e que também acreditam na Minha manifestação humana n'Ele. Esta manifestação humana é novamente um mistério que só pode ser compreendido pelas pessoas despertas pelo espírito, porque o estado pecaminoso das pessoas exclui toda a sua compreensão, pelo que o ser humano deve primeiro aproximar-se afirmativamente do acto de Salvação de Jesus, pedir perdão da sua culpa e depois, em contacto íntimo com Ele, ser instruído pelo espírito dentro de si mesmo, que só pode expressar-se quando o perdão do pecado original tiver tido lugar.... Então a Minha manifestação humana em Jesus será também compreensível para ele, pois então ele poderá ser apresentado a toda a verdade e instruído pelo espírito dentro de si mesmo sobre todas as correlações espirituais.... Assim, ele pode alcançar novamente os conhecimentos que uma vez perdeu através da sua rebelião contra Mim. Ele só conseguirá a compreensão para todas estas correlações através do seu espírito. Mas este conhecimento pode no entanto ser apresentado ao ser humano, e se ele for então verdadeiramente informado sobre Jesus Cristo, o Seu acto de Salvação e a Minha manifestação humana Nele, então a verdade pode também convencer uma pessoa e deixá-la tomar o mesmo caminho, o caminho para a cruz.... E o que antes só tinha ouvido através de um ser humano esclarecido tornar-se-á cada vez mais compreensível para ele. É por isso que atribuo tanta importância à divulgação da verdade pura, afinal, quero que esta verdade chegue também àquelas pessoas que não são más mas que ainda não acreditam, que agora se sentem abordadas pela verdade e são tocadas pela força da verdade e, assim, também podem alcançar a fé. Se vocês, humanos, soubessem o quanto vocês mesmos podem melhorar a vossa sorte ao entrarem no reino do além quando forem redimidos da vossa culpa de pecado através de Jesus Cristo, então também compreenderiam porque continuo a destacar este problema, porque continuo a explicar-vos as correlações espirituais e a tentar estimular o vosso intelecto a pensar nisso, pois apenas a mínima vontade de cumprir o vosso propósito de vida terrena já é suficiente para Mim vos guiar e criar todas as possibilidades de alcançarem a realização.... E precisamente o último conhecimento só lhe pode ser dado através do trabalho do Meu espírito, pois as pessoas, sob a influência do Meu adversário, quererão sempre negar precisamente o mais importante: a redenção através de Jesus Cristo de toda a culpa.... Fazem certamente concessões ao admitir a Sua existência e também o retratam como um ser humano que alcançou a mais alta perfeição na vida terrena. Mas não querem acreditar que se trata de um problema completamente diferente.... que se trata do facto de que sem Ele a humanidade permanecerá eternamente separada de Mim, seu Deus e Criador, nem querem acreditar que as almas nunca poderão progredir no seu desenvolvimento no além, mas sim ficar no chão enquanto o fardo do pecado original as pesar. Assim, levam uma existência miserável e lamentável até encontrarem o divino Redentor do outro lado, até seguirem os esforços dos seres de luz e se deixarem guiar sem resistência a Ele, Que os levantará do abismo e perdoará a sua culpa de pecado assim que Lhe pedirem.... Portanto, primeiro tem de haver fé que Jesus, através da Sua obra de misericórdia, através da Sua morte na cruz, redimiu o povo do seu pecado original. Só então é fundada a missão do homem Jesus na terra, mas não só no Seu modo de vida.... que também faz parte dela, pois sem amor nenhum ser humano pode tornar-se abençoado, e o ensino do amor foi o conteúdo de todos os Seus ensinamentos às pessoas que Ele quis salvar das trevas do espírito, dos grilhões do príncipe das trevas. As pessoas caminhavam na completa ignorância, não se reconheciam como criaturas de um Ser supremamente perfeito, não reconheciam as suas falhas e apenas amavam o seu ego, e o seu amor-próprio levou-as à pecaminosidade, a pecados que poderiam de facto ter expiado no reino do além, mesmo que isso significasse tempos intermináveis de tormento.... Mas estes pecados não foram a causa da Minha descida à terra no ser humano Jesus.... mas era sobre o grande pecado original da antiga apostasia de Mim, que nenhum ser humano se poderia ter redimido, mesmo que passasse eternidades na miséria.... Este pecado foi a razão pela qual eu próprio desci à terra e realizei o trabalho de Salvação no homem Jesus.... Pois o próprio amor apagou a culpa, e o amor estava no homem Jesus.... E uma e outra vez vos proclamarei isto, humanos, através do Meu espírito, uma e outra vez tentarei explicar-vos o maior mistério, e enviarei os Meus discípulos nos últimos dias para proclamar a verdade às pessoas sobre Jesus Cristo, o Filho de Deus e Redentor do mundo, que Me abrigou em Si mesmo e Ele e eu somos e continuaremos a ser um só por toda a eternidade...._>Ámen

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Traducido por: DeepL