Comparar anuncio con traducción

Otras traducciones:

"A quienes les descontéis los pecados ..."

A causa de la falsa interpretación de Mi Palabra se ha originado y propagado ya mucho error, y es difícil eliminar un tal error, sustituyéndolo por la pura Verdad, pues los hombres admiten mucho antes el error y lo divulgan como Verdad antes que se dejen enseñar y admitan la pura Verdad. Y eso siempre podía suceder tan pronto como Mi Palabra fuera interpretada según la letra sólo, pero el sentido espiritual de la Palabra no fue jamás comprendido. El hecho de que los hombres estén cargados de pecados, es consecuencia de su caída antigua de Mí. Consecuencia del pecado primero original, la que trajo sobre los seres la tiniebla espiritual que en un principio estaban en plena luz, en el más claro conocimiento. Por lo que la humanidad aún se encuentra bajo ese pecado, si de ella no está redimida por Jesucristo. Y por amor a esta desgraciada humanidad descendí Yo Mismo a la tierra y me ofrecí en sacrificio en la Cruz como Hombre Jesús para expiar esa inmensurable culpa: Puesto que ahora ellos son libres de ver en Jesús al Salvador divino, en quien Yo Mismo me hice Hombre, tienen también que estar informados en un saber acerca de Él, para que sean introducidos acerca de la argumentación de Su humano Ser y de la Obra de Redención, y por este motivo envié Yo a Mis discípulos afuera en el mundo, a los que Yo antes había enseñado, y que por eso también como Mis representantes podían anunciar a las naciones Mi Evangelio. Es muy fácil comprender, pues, de que los hombres fueron liberados de su gran culpa de pecados los que aceptaron las Gracias de la Obra de Redención, de que todos los pecados se les quitaba si ellos se confesaban como pecadores y recurrían a la Cruz, al Salvador divino.

Mis discípulos daban a los hombres la noticia de Mí y de Mi Obra redendora, y el que admitía su enseñanza a esos podían ellos asegurarles también el perdón de toda culpa, pues esa orden la habían recibido de Mí, de que dieran explicación a los hombres, por lo qué ellos eran infortunados y cargados de pecados, y por eso podían ellos darles la promesa también por encargo de Mí, de quedar libres de toda culpa, si me reconocían a Mí y me pedían a Mi por perdón. Pues ellos fueron por todo el mundo, para predicar en Mi lugar la Palabra de la Cruz, y de ese modo podían en lugar de Mí perdonar a los hombres los pecados. Pues mientras ellos llevaban a los hombres el Evangelio como Mis representantes, estaban también por Mir Espíritu iluminados, y reconocían también el estado pecaminoso del hombre, como también su estado penitente anímico, el que les daba además el derecho de absolverlos de todo pecado en lugar de Mí. Y ellos sólo hacían, lo que Yo Mismo hubiese hecho cuando caminaba en la tierra. Así pues, la Palabra tenía su autorización: "A quienes perdonéis los pecados, a esos les están perdonados ..." Y esto tiene que ser entendido en este sentido.

Mas ahora se trata de quien actúa de Mi verdadero representante en la tierra y quien lo es, pues sólo de ello depende, si por parte de los hombres es posible que un pecado sea perdonado, es decir, si está sancionado por Mi Voluntad. Pues no todos los que se llaman Mis representantes están por Mi Espíritu iluminados, para que conozca el estado anímico de ese, a quien él o ellos quieren perdonar los pecados. No cada uno, que se llama Mi representante, puede anunciar Mi Evangelio a sus semejantes, porque sólo los hombres iluminados por Mi Espíritu saben sobre la Obra de Redención de Jesús, sobre su argumentación espiritual y la gran culpa original y de ahí que sea absolutamente posible el "Obrar de Mi Espíritu", pero lo que no es de constatar en aquellos que se hacen pasar por Mis representantes en la tierra. Por consiguente estos tampoco están autorizados ni son capaces de juzcar sobre el estado anímico de sus semejantes y de perdonarles los pecados. Y si lo hacen, el hombre sin embargo no queda liberado de su gran culpa, si él mismo no va el camino a Jesucristo y a Él Mismo le pide por el perdón de su culpa.

Por eso los hombres no pueden fiarse de la seguridad por parte de aquellos que no son ellos mismos capaces de perdonar pecados, porque no Yo los ha trasladado y transmitido en ese puesto. Y por eso al herejía repercute de forma muy perjudicial en las almas que luego creen de haberse quedado libres de sus pecados, y han descuidado y omitido de entregarse ellos mismos a Jesucristo y pedirle a Él entrañablemente que Él quiera perdonarles su culpa. Porque la expiación de la culpa original sólo y únicamente puede ser concedida a los hombres por Jesucristo, y para eso se requiere el saber sobre ello, el que por otro lado sólo a través de la pura Verdad puede ser obtenido, Pero mientras los hombres se consideren autorizados a ello, los que no fueron ellos mismos nombrados por Mí para ello tendrá como consecuencia solamente que se presente una tibia actitud, porque el hombre ahora cree que está suspendido, dispensado, de su responsabilidad, así como a él se le asegure por parte de un hombre semejante el perdón de los pecados. Mismo bajo la indicación, de que Yo Mismo he dado esa promesa.

Yo dije a Mis discípulos estas Palabras: "A quien vosotros rebajéis los pecados, a esos les son rebajados ..." Y estas Palabras conservarán siempre su autorización también en aquellos que Yo Mismo me escoja como a Mis verdaderos discípulos. Sin embargo, jamás pueden ser referidas las mismas Palabras a aquellos que ellos mismos se hacen de Mis seguidores o a través de sus semejantes. Porque Yo únicamente solo sé, quien me puede servir en la forma justa y quien muestra las previas condiciones que se requieren. Y por lo tanto Yo me elijo ahora también de nuevo a Mis verdaderos representantes en la tierra, los que anuncien Mi Evangelio con toda Verdad y los que han de subrayar también claramente el error y han de combatirlo. Pues sólo la Verdad puede significar para los hombres una luz verdadera, con la que ellos encuentran el camino a la Altura, a Mí, a su Casa, en su Casa paternal.

Amén

Traductor
Traducido por: Meinhard Füssel

"Que remetereis pecados...."

Muitos erros já surgiram e foram difundidos através da interpretação errada da Minha Palavra, e é difícil erradicar tal erro, substituí-lo por verdade pura, pois as pessoas têm muito mais probabilidades de aceitar o erro e de o difundir como verdade do que de se deixarem instruir e aceitar a verdade pura. E isto poderia sempre acontecer assim que a Minha Palavra fosse interpretada apenas de acordo com a letra, mas o significado espiritual da Palavra nunca foi compreendido. O facto de as pessoas estarem carregadas de pecados é o resultado da sua anterior apostasia de Me.... O facto de as pessoas estarem carregadas de pecados é o resultado da sua apostasia passada de Mim, o resultado do pecado original que trouxe escuridão espiritual sobre os seres que outrora tiveram a mais brilhante realização e estavam cheios de luz. A humanidade ainda está, portanto, sob este pecado se não for redimida dele através de Jesus Cristo. E por causa desta humanidade miserável eu próprio desci à terra e, como o ser humano Jesus, ofereci o sacrifício na cruz para redimir esta imensa culpa. Mas como as pessoas são agora livres de considerar Jesus como o divino Redentor, em Quem Eu Me tornei humano, devem também ser introduzidas ao conhecimento sobre Ele, sobre a razão da sua existência humana e sobre o acto de Salvação, e para este fim enviei os Meus discípulos ao mundo, a quem Eu próprio tinha anteriormente instruído e que, por isso, puderam também proclamar o Meu Evangelho às nações como Meus representantes. É agora bastante fácil compreender que as pessoas se libertaram da sua grande culpa de pecado que aceitou as bênçãos do acto de Salvação.... de que todos os pecados lhes foram tirados quando confessaram ser pecadores e se refugiaram na cruz, no divino Redentor. Os meus discípulos informaram então as pessoas de Mim e do Meu acto de Salvação, e qualquer um que aceitasse os seus ensinamentos poderia também ter a certeza do perdão de toda a culpa, pois tinham recebido esta missão de Mim para informar as pessoas porque estavam infelizes e sobrecarregadas, e por isso puderam também dar-lhes a garantia em Meu nome de que seriam libertadas de toda a culpa se Me reconhecessem e Me apelassem ao perdão. Pois eles saíram pelo mundo inteiro para pregar a Palavra da cruz em Meu lugar, e assim puderam também perdoar os pecados das pessoas em Meu lugar.... Enquanto levaram o Evangelho às pessoas como Meus representantes, foram também iluminados pelo Meu espírito, e reconheceram o estado pecaminoso das pessoas, reconheceram também o seu arrependimento que lhes deu o direito de absolvê-las de toda a culpa em Meu lugar.... E eles só fizeram o que eu próprio teria feito quando andei na terra. Portanto, a palavra: "A quem perdoardes os pecados, a quem os perdoardes, ser-lhes-ão perdoados" foi justificada, e também deve ser entendida neste sentido..... Mas agora é uma questão de quem é activo como Meu legítimo representante na Terra, pois só disto depende se é possível o perdão dos pecados por parte de uma pessoa, ou seja, sancionado pela Minha vontade.... Pois nem todos os que se intitulam Meu representante é iluminado pelo Meu espírito que reconhece o estado de alma da pessoa que quer 'perdoar pecados'. Nem todos os que se intitulam Meu representante podem proclamar o Meu Evangelho aos semelhantes, porque só as pessoas iluminadas pelo Meu espírito sabem do acto de Salvação de Jesus, do seu fundamento espiritual e do grande pecado original e, portanto, a "obra do Meu espírito" deve necessariamente ser possível, mas isto não pode ser determinado naqueles que fingem ser Meus servos, Meus representantes na terra.... Consequentemente, também não têm o direito e a qualificação para julgar o estado de alma dos seus semelhantes e para remir os seus pecados. E mesmo que o façam, o ser humano não está todavia livre da sua grande culpa se não enveredar pelo caminho de Jesus Cristo e não se aproximar dele para o perdão da sua culpa.... Por esta razão, as pessoas não devem confiar nas garantias daqueles que são incapazes de perdoar os pecados por si próprios, porque eu não lhes confiei este cargo. E, portanto, este ensino mal orientado tem um efeito muito prejudicial nas almas que acreditam ter-se libertado dos seus pecados através dos costumes prescritos e negligenciam entregar-se a Jesus Cristo e apelam sinceramente a Ele para que perdoe a sua culpa.... Pois a redenção da culpa original só pode ser dada às pessoas apenas por Jesus Cristo, e para isso é necessário o conhecimento, que mais uma vez só pode ser obtido através da pura verdade.... Mas enquanto as pessoas se considerarem autorizadas a fazê-lo que não foram chamadas por Mim, isso só resultará numa atitude tépida, porque o ser humano acredita agora que está livre da sua responsabilidade assim que lhe for assegurado o perdão dos seus pecados por um semelhante.... mesmo que seja com a indicação de que Mim mesmo fiz esta promessa.... Falei aos Meus discípulos as palavras: "A quem perdoardes todos os pecados, a eles serão perdoados....". E estas palavras também manterão sempre a sua justificação com aqueles que Eu mesmo escolho como Meus discípulos certos.... Mas as mesmas palavras nunca poderão ser aplicadas àqueles que se fizeram a si próprios ou novamente através de semelhantes Meus seguidores.... Pois só eu sei quem me serve da maneira correcta e quem pode demonstrar os pré-requisitos necessários para esta.... E assim escolho novamente os Meus representantes certos na terra que devem proclamar o Meu Evangelho em toda a verdade e que devem também expor e combater claramente o erro.... Pois só a verdade pode significar uma verdadeira luz para as pessoas, na qual elas podem encontrar o caminho para cima, casa para Mim na casa do seu Pai...._>Ámen

Traductor
Traducido por: DeepL