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Golpes de destino.... Muerte espiritual....

A la muerte mental ya han caído los hombres, que ya no tienen fe en un Dios y Creador, a una vida del alma después de la muerte, porque ellos tampoco creen en un significado y propósito de su vida terrenal, sino que ven esta vida terrenal como un fin en sí misma. Solo se mueven en el plano terrenal, sus pensamientos no encuentran el camino al reino espiritual, porque resisten a aceptar pensamientos que vienen de allá y seguirlos.

Solo son criaturas orientados humanamente cuyo grado mental de madurez es tan bajo que con gran certeza esperan el destino de un destierro nuevo, porque su libre albedrio no se dirige hacia arriba sino hacia abajo nuevamente. Ya han llegado a una cierta vida y, sin embargo, nuevamente se entregan a la muerte.... Pero tampoco se les puede impedir porque es su libre albedrio, porque se trata de la última decisión de la voluntad en toda libertad en la tierra.

Pero Dios quiere dar a los hombres la vida que dura para siempre.... Y los hombres deben aceptarla también de Su mano, no pueden recibirla en ningún otro lugar, que no sea en su Dios y Creador desde la eternidad, pero en Él cual no creen y, por lo tanto, tampoco se la piden a Él. Y entonces Él solo puede ponerles un destino en la vida terrenal, que los aleje del mundo terrenal y les hace pensar.... Él solo puede destruir su felicidad y esperanza terrenal porque quiere salvarlos porque quiere ayudarlos a conseguir la vida que dura para siempre.... Pues, si el hombre siempre encuentra su cumplimiento de los deseos y ganas terrenales, siempre exigirá más, y sus pensamientos se vuelven cada vez más mundanos, y entonces para él la vida también seguirá siendo un fin en sí misma, pero nunca se convertirá en un medio para un fin.

Por lo tanto, no deberíais sorprenderos si en los últimos tiempos se multiplican los sucesos, lo que tienen un efecto fatal en el sentido terrenal para los afectados.... Cuando las desgracias y catástrofes de todo tipo demandan innumerables vidas, cuando la propiedad terrenal es destruida y los hombres se enfrentan a enfermedades y sufrimientos....

Porque solo son medios que Dios Mismo emplea para poder encontrar acceso a los corazones de los hombres, que, por su bienestar terrenal, Le niegan el acceso.... Lo que Él puede hacer todavía, también lo hará por la salvación de aquellos hombres que están caminando a la muerte. Porque la muerte espiritual es mucho peor que la muerte corporal, de la cual el alma no necesita ser afectada, si el hombre ha llevado su vida terrenal correspondiente al fin y objetivo.... El alma no puede morir, pero tiene que soportar las consecuencias del pensamiento y estilo de vida del hombre en la tierra.

Y ella tendrá que experimentar irrevocablemente el destino del nuevo destierro si no ha encontrado a Dios antes del final, si no aprende a reconocerle antes del final y Le reconoce conscientemente y Le pide ayuda y misericordia en su angustia mental. Y para que esto sea posible todavía, sucederá mucho más, lo que no creéis poder relacionar con el amor de un Dios....

Pero es amor, y aunque os parezca tan cruel todavía, porque la muerte mental del alma es mucho más agonizante de lo que pueden ser los golpes de destino más terribles en esta tierra....

Porque la vida terrenal pasa, pero el alma tiene que pasar otra vez por tiempos infinitos en sufrimiento y oscuridad, antes de que nuevamente se le concede la gracia de andar como humano sobre la tierra, con la misma tarea: En el libre albedrio decidirse a favor de Aquello, del Quien una vez surgió.... en el libre albedrio decidirse para Dios, de Quien una vez se apartó en el libre albedrio, y por lo tanto se volvió desafortunado. Y ella puede volver a la felicidad cuando haya cumplido el significado y propósito de su existencia como ser humano....

Ella también volverá a la vida, ya no tendrá que temer la muerte, vivirá eternamente, tan pronto como haya regresado a Dios, tan pronto como se haya reunificado con Él, para lo cual la existencia como ser humano le brindó la oportunidad y si ahora su voluntad se decide correctamente....

Amén

Traductor
Traducido por: Hans-Dieter Heise

Schicksalsschläge.... Geistiger Tod....

Dem geistigen Tode sind nun schon die Menschen verfallen, die keinen Glauben mehr haben an einen Gott und Schöpfer, an ein Leben der Seele nach dem Tode, denn diese glauben auch nicht an einen Zweck und Sinn ihres Erdenlebens, sondern sehen dieses Leben nur als Selbstzweck an. Sie bewegen sich nur auf irdischer Ebene, ihre Gedanken finden nicht den Weg in das geistige Reich, denn sie wehren sich dagegen, von dort ausgehende-Gedanken anzunehmen und ihnen zu folgen. Sie sind nur menschlich-ausgerichtete Geschöpfe, deren geistiger Reifegrad so niedrig ist, daß sie mit großer Sicherheit das Schicksal der Neubannung erwartet, weil sich ihr freier Wille nicht nach oben, sondern wieder nach unten richtet.... Sie sind schon zu einem gewissen Leben gelangt und liefern sich doch wieder dem Tode aus.... Aber sie können auch nicht daran gehindert werden, weil es ihr freier Wille ist, weil es um den letzten Willensentscheid in aller Freiheit im Erdenleben geht. Gott aber will den Menschen das Leben geben, das ewig währet.... Und es müssen die Menschen es auch aus Seiner Hand annehmen, sie können es nicht anderswo entgegennehmen als nur bei ihrem Gott und Schöpfer von Ewigkeit, an Den sie jedoch nicht glauben und Ihn daher auch nicht darum angehen. Und so kann Er nur ihnen für das Erdenleben ein Schicksal auflegen, das sie von der irdischen Welt abbringt und sie zum Nachdenken veranlaßt.... Er kann ihnen nur irdisches Glück und Hoffnung zerschlagen, weil Er sie retten will, weil Er ihnen verhelfen will zum Leben, das ewig währet.... Denn findet der Mensch stets seine Erfüllung irdischer Wünsche und Begierden, so wird er stets mehr verlangen und seine Gedanken stets weltlicher richten, und dann wird für ihn auch das Leben nur Selbstzweck bleiben, niemals aber Mittel zum Zweck werden. Darum sollet ihr euch nicht wundern, wenn in der letzten Zeit sich die Geschehen mehren, die unheilvoll im irdischen Sinne sich für die Betroffenen auswirken.... wenn Unglücksfälle und Katastrophen aller Art zahllose Menschenleben fordern, wenn irdischer Besitz zerstört wird und die Menschen mit Krankheit und Leid geschlagen werden.... Denn es sind dies nur Mittel, die Gott Selbst anwendet, um Zugang zu finden in die Herzen der Menschen, die im irdischen Wohlleben Ihm den Zugang verwehren.... Was Er noch tun kann, das wird Er auch tun zur Errettung der dem Tode entgegengehenden Menschen. Denn der geistige Tod ist um vieles schlimmer als der leibliche Tod, von dem die Seele nicht betroffen zu werden braucht, wenn der Mensch entsprechend sein Erdenleben geführt hat.... die Seele kann nicht sterben, aber sie muß die Folgen tragen des Denkens und Wandels des Menschen auf der Erde. Und sie wird unwiderruflich das Los der Neubannung erfahren müssen, wenn sie nicht vor dem Ende noch zu Gott gefunden hat, wenn sie Ihn nicht vor dem Ende noch erkennen lernt und Ihn bewußt anerkennt und um Hilfe und Erbarmen bittet in ihrer geistigen Not. Und auf daß dies noch möglich ist, wird noch vieles geschehen, was ihr mit der Liebe eines Gottes nicht vereinbaren zu können glaubt.... Aber es ist Liebe, und mag es euch noch so grausam erscheinen, denn der geistige Tod der Seele ist um vieles qualvoller, als die furchtbarsten Schicksalsschläge auf dieser Erde sein können.... Denn das Erdenleben geht vorüber, die Seele aber muß endlose Zeiten wieder in Qual und Finsternis verbringen, bevor sie wieder die Gnade hat, als Mensch über die Erde zu gehen, mit der gleichen Aufgabe: im freien Willen sich zu entscheiden zugunsten Dessen, aus Dem sie einst hervorgegangen ist.... im freien Willen sich zu entscheiden für Gott, von Dem sie sich einst im freien Willen abwandte und darum unselig wurde. Und sie kann erst wieder zur Seligkeit gelangen, wenn sie den Sinn und Zweck ihres Daseins als Mensch erfüllt hat.... Sie wird dann auch zum Leben gelangen, sie wird dann den Tod nicht mehr zu fürchten brauchen, sie wird leben ewiglich, sowie sie wieder zu Gott zurückgekehrt ist, sowie sie sich mit Ihm wieder vereinigt hat, wozu ihr das Dasein als Mensch die Möglichkeit bot und ihr Wille sich nun recht entschied....

Amen

Traductor
This is an original publication by Bertha Dudde