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Exhortación al amor y paz.... Llevando la cruz.... Venir y tomar forma....

¡Cuánto menospreciáis Mi mandamiento, que os enseña el amor, si vosotros, que queréis ser Míos, no os esforzáis por hacer soportable el tiempo de sufrimiento en la tierra los unos a los otros. Si penséis en el corto tiempo en la tierra que estáis juntos, entonces todos sois solo simples huéspedes en la tierra y, por lo tanto, todos debéis vivir en paz unos con otros, si no queréis que vuestros días en la tierra sean insoportables por vuestra propia culpa.

Y ahora ved, hijos Míos, cómo cuido a cada individuo y Yo no pregunto hasta qué punto es digno de Mi cuidado. Así también tendréis que cuidar de cada uno con amor, si queréis ser justos a Mis ojos y haceros dignos de Mis gracias. Por lo tanto, todo vuestro esfuerzo en la tierra primer debe ser la actividad en el amor.... Y este amor debe aplicarse a cada uno, sea digno o indigno, igual como Yo os abrazo con Mi amor, vosotros que todavía no venís completamente sin escoria ante Mi cara. No os condeno, sino que os recibo con amor, estoy dispuesto a vosotros en cualquier momento, desde que Me llaméis.

Y ahora también quiero revelarme a Mi hijo y atender la petición silenciosa de su corazón.... Vuelo a la tierra y llevo la carga de la cruz una vez más, por así decirlo, porque Me he convertido en objeto de risa y burla.... Soy negado y deshonrado por las palabras. Y sólo unos pocos se Me acercan en el amor porque me he vuelto un extraño para la gente y por eso es Mi intención formar corazones que estén dispuestos a aceptarme y que Me defienden con la mayor disposición y devoción.... Quiero ser un guía constante para tales niños tan dispuestos, quiero vivir Yo Mismo en sus corazones para que Me vean y sientan Mi cercanía, y se supone que esto les dará la verdadera felicidad durante su existencia terrenal.

Quien ahora Me sirve y Me sacrifica su voluntad y no desfallece en este trabajo por Mí, es aquel a quien amo y a quien Me doy a conocer en el menor tiempo posible, en una forma que os será comprensible más adelante, porque debéis dar y recibir sin este conocimiento.... dar vuestro amor al querido prójimo y recibir Mi amor y Yo a cambio. Y ciertamente captaréis la gran gracia y aceptaréis Mi amor con la mayor humildad y el más profundo agradecimiento porque quiero considerar con una fuerza extraordinaria a aquellos que quieren ser activos por Mí y Mi nombre. Y por eso ninguno de Mis hijos se va con las manos vacías, que sólo desea acogerme a Mí Mismo.

Todavía no ha llegado la hora, pero vendré en medio de la noche.... Vendré en plena luz del día.... Vendré en una forma que será el cumplimiento de vuestro anhelo, y suavemente dejare descansar Mis ojos sobre vosotros.... porque no podréis soportar Mis ojos radiantes y por eso tengo que cubrirme con el abrigo de un caparazón terrenal, y así tengo que acercarme a vosotros y aun así sentiréis una dulce felicidad cuando vosotros Me miráis.

Por eso toma nota, hijo Mío, de Mi amor siempre dispuesto.... y quiero expresar este amor de tal manera que lo reconozcas.... que de ahora en adelante solo trabajes para tu Salvador y Le servirás en amor constante....

amén

Ammonimento all’amore ed alla pace - Il portare la croce – La Venuta in una Figura

Quanto disprezzate il Mio Comandamento che v’insegna l’amore, se voi che volete essere Miei, non vi adoperate a rendere sopportabile reciprocamente il tempo della sofferenza sulla Terra; se pensate al breve tempo terreno che vivete insieme, allora siete tutti soltanto ospiti sulla Terra e di conseguenza dovete vivere tutti in pace, se non vi volete rendere insopportabile per propria colpa i giorni terreni. Ora vedete, voi figli Miei, quanto Mi prendo cura di ogni singolo e non domando, quanto sia degno della Mia Provvidenza. Così pure voi dovrete prendervi cura nell’amore di ognuno, se volete stare giusti dinanzi ai Miei Occhi e rendervi degni delle Mie Grazie. Allora, tutto il vostro tendere sulla Terra dev’essere dapprima la messa in pratica dell’amore, e questo deve valere per ognuno, se sia degno o indegno, come pure Io afferro con il Mio Amore voi che, non ancora del tutto privi di scorie, vi presentate dinanzi al Mio Volto. Non vi condanno, ma vi vengo incontro amorevolmente, Sono sempre pronto per voi, quando M’invocate. Così voglio ora anche rivelarMi al figlio Mio ed esaudire la silenziosa richiesta del suo cuore. Vengo sempre di nuovo sulla Terra e porto per così dire ancora una volta la Croce del peso, perché vengo deriso e schernito, vengo rinnegato e disonorato attraverso delle parole. Soltanto pochi Mi vengono incontro nell’amore, perché Sono diventato estraneo agli uomini e così è la Mia Intenzione di formarMi dei cuori che sono pronti ad accoglierMi e che si adoperano per Me nella più grande disponibilità e dedizione. Per tali figli volenterosi voglio sempre essere la Guida, Io Stesso voglio dimorare nei loro cuori, affinché Mi contemplino e percepiscano la Mia Vicinanza, e questo deve preparare loro una vera felicità durante la loro esistenza terrena. Chi ora Mi serve e Mi sacrifica la sua volontà e non si stanca in questo lavoro per Me, Io lo amo e Mi faccio riconoscere da lui nel più breve tempo, in una Forma che vi viene comprensibile soltanto dopo, perché dovete dare e ricevere senza il vostro sapere, dare al caro prossimo il vostro amore e ricevere per questo Me ed il Mio Amore. Comprenderete bensì la grande Grazia ed accoglierete il Mio Amore nella più grande umiltà e profondissima gratitudine, perché voglio provvedere con straordinaria Forza coloro che vogliono essere attivi per Me ed il Mio Nome. Perciò nessuno dei Miei figli che desidera soltanto accogliere Me Stesso, andrà a mani vuote. Non è ancora giunta l’ora, ma verrò nel mezzo della notte. Verrò nel giorno più chiaro, verrò in una Figura, che è per voi l’esaudimento della vostra nostalgia, e lascerò riposare soavemente su di voi i Miei Occhi e non potrete sopportare (nel vostro involucro terreno) il Mio Occhio raggiante, perciò Mi devo coprire con il Manto di un Involucro terreno e venirvi incontro così, ma sentirete comunque una dolce felicità quando Mi contemplate. Perciò prendi conoscenza, figlio Mio, del Mio Amore sempre pronto e Lo voglio manifestare in modo che tu Lo riconoscerai, che d’ora in poi sarai attivo soltanto per il tuo Salvatore e Lo servirai in costante amore.

Amen