8881 Tarea de los discípulos del tiempo del fin...

12 de noviembre de 1964: Libro 93

Vosotros, que queréis servirme, sois mis discípulos del tiempo del fin, ocupándoos de la difusión de la verdad, porque el error ha tomado una ventaja aterradora, porque esta es la última arma en la lucha del oponente contra la luz, que está obrando ansiosamente para extinguirla. Y vuestra tarea consiste en actuar contra el error, desenmascarar a Mi oponente y siempre solo defender la pura verdad, que recibís directamente de Mí. Y aunque os creáis enemigos... tenéis que aceptarlo si queréis servirme a , porque solo hay una verdad y esta la recibís directamente de Mí.

Por eso usé un recipiente vacío, que no había recibido un conocimiento previo, para poder derramar Mi Espíritu en este sin resistencia, que se habría producido a través de un conocimiento ya existente. Y ahora podía enseñar a un ser humano, podía ponerlo en un estado de reconocimiento (cognición), podía presentarle Mi plan de Salvación desde la eternidad y explicarle el significado y el propósito de la existencia... Este recipiente tenía que estar completamente vacío, desligado de la enseñanzas eclesiásticas, libre de toda concepción y tan devoto de Mí que puede llenarlo, que aceptó sin resistencia cualquier cosa que la “Eterna Verdad” le presentaba.

A un ser humano se le ha introducido ahora a un conocimiento que antes no poseía; se le ha abierto un área, por así decirlo, en la que aún no había entrado, que le era ajena hasta el momento en que Yo Mismo le deje echar un vistazo a esta área. Y que esto sucedió con toda verdad no puede ser dudado, porque Mi promesa decía: “Yo os guiaré a toda la verdad...? Si ahora reconozco que se han creado todas las condiciones previas que presupone el cumplimiento de Mi promesa, entonces no debéis dudar, porque mantengo Mi Palabra, pero vosotros también debéis defender esta “Mi Palabra” ante el mundo. Porque estáis en posesión de la pura verdad de Mí...

Y así también habéis recibido información de Mi gobierno y obra, sobre la creación de los espíritus, sobre su apostasía, acerca del origen de la creación y acerca de Mi plan de repatriación... Y estáis en el conocimiento de vuestro principio y de vuestro objetivo final... Todos los que tomáis nota de este conocimiento, ya seréis llevados a un cierto nivel de cognición, lo que ya significa un ascenso, una cierta madurez del alma, lo que también quiero lograr con la transmisión de este conocimiento. Porque sólo la verdad puede lograr tales cosas. Y es por eso que vosotros, Mis discípulos del fin del tiempo, tenéis la tarea de defender la verdad del conocimiento que Yo os he transmitido.

Y todos vosotros sois mis discípulos, quienes fuisteis introducidos a ese conocimiento a través de Mi portador de luz, porque Yo no transmito Mi palabra a la tierra para un ser humano, sino a través de uno para todos, los que la aceptan y estos también pueden considerarse como discípulos del fin del tiempo... Porque podrán notar un fuerte efecto contrario por parte de quien una vez os hizo caer. Porque para él sois portadores de luz, y él busca extinguir la luz... Os combate con astucia y engaño, y sólo tiene una voluntad, atraeros bajo su hechizo, socavar la pura verdad, extinguir la luz y arrojaros de nuevo a las tinieblas...

Pero no lo logrará porque donde Yo mismo estoy obrando a través de Mi Espíritu, hay una luz radiante y la verdad se ilumina... ella lo desenmascara a él y a sus acciones y ya no puede ser oscurecido, porque emana de Mí, porque un espíritu de luz está disponible para Mí, que también se cierra a las acciones del oponente. Vosotros humanos debéis tener siempre presente que en el tiempo del fin descenderán mensajeros de arriba que no sucumbirán a sus artes de seducción, que solo son receptivos para Mí, la verdad pura de arriba, que nunca cederán a sus insinuaciones y así ellos mismos se harían incapaces de recibir la verdad pura...

(12.11.1964) Y así podéis creer en las Palabras sin vacilar, porque es un gran don de gracia, que Yo Me cuide de aquellos humanos que no quieren caer en el error, que solo quieren vivir siempre según Mi voluntad y a quienes, por lo tanto, también protejo de la influencia del oponente. Pero él intentará de ir contra la luz hasta el final y donde los hombres están dispuestos, también tendrá éxito.

Por eso prestad a los discípulos del fin del tiempo, y aceptad Mi don de gracia, porque en cuanto defiendan la Palabra, que han recibido directamente de Mí, también vosotros podréis creer en ellos, y no os arrepentiréis, porque pronto llegará el fin, y con este vendrá el juicio final, el día en que se decidirá sobre la vida y la muerte... Y entonces podréis consideraros bienaventurados los que habéis guardado Mi Palabra... Entonces entraréis a la vida eterna...

amén

Traducido por: Hans-Dieter Heise

Este comunicación no se menciona en ninguna folleto temático.

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