B.D.-Nr. 5296

La morada de Dios en el corazón del ser humano....

Quiero habitar en vosotros.... Quiero irradiar Mis criaturas completamente con Mi Espíritu, quiero que estén llenos de Mi sustancia primigenia, de amor, para que Yo Mismo habite irrefutablemente en ellas y se conviertan, por así decirlo, en Mi envoltura, lo que significa dicha ilimitada para el ser. Quiero habitar en todos los corazones humanos y poder llamar a todas Mis criaturas Mis hijos, que han acogido al Padre en sí mismos....

De tal relación entre un hijo y el Padre surgen unas dichas increíbles, y proporcionar estas dichas a Mis criaturas es siempre y para siempre Mi objetivo y Mi esfuerzo. Por eso fueron creados el mundo visible y espiritual.... el mundo visible para dar a Mis criaturas la oportunidad por primera vez de lograr una deificación de su ser, el mundo espiritual para ofrecer a estos seres deificados una dicha inimaginable. Y en este mundo espiritual Yo Mismo apareceré entonces visiblemente ante Mis hijos; En este mundo espiritual se formará primero la relación del hijo con el Padre y a través del intercambio constante el amor aumentará hasta el más alto fervor hasta que pueda tener lugar una fusión completa Conmigo, lo que significa una felicidad inimaginable para vosotros.

En el reino espiritual, un ascenso constante está asegurado, una vez que el alma Me ha encontrado en la Tierra o luego también en el reino espiritual. Pero hasta que se produzca este giro hacia Mí, a menudo suelen pasar tiempos interminables, y durante este tiempo Yo lucho por cada alma, cortejando su amor, porque sólo el amor puede transformar la voluntad que antes no Me pertenecía. El cambio de voluntad y el giro consciente hacia Mí garantizan entonces también el logro del objetivo final, la unión Conmigo en la Tierra o en el reino espiritual.

Quiero establecerme en vuestros corazones.... El corto tiempo que vivís en la Tierra tiene como fin que Me encontréis, y por eso la vida en la Tierra es a menudo difícil y ardua. Pero una vez que hayáis logrado el objetivo, seréis completamente compensados incluso por la vida más difícil en la Tierra, porque el reino espiritual se abre ante vosotros en una gloria que supera toda imaginación.... Porque ningún ojo humano ha visto jamás, ni ningún oído humano ha escuchado jamás, lo que he preparado para los que Me aman....

Sólo pido vuestro amor, entonces el reino de la bienaventuranza os pertenecerá, entonces heredaréis al Padre como Mis hijos, pues entonces os habéis convertido verdaderamente en Mis hijos, porque a través del amor os habéis formado a Mi imagen y ahora tenéis luz y fuerza en toda abundancia, que ahora utilizaréis en Mi voluntad para vuestra propia indescriptible felicidad.... Dejadme entrar en vuestros corazones, abridme la puerta de par en par.... convertiros en lo que Yo Mismo soy en Mi Ser original, convertiros en amor.... para que Yo pueda permanecer en vosotros y vosotros en ....

amén

Traducido por: Hans-Dieter Heise

Este comunicación no se menciona en ninguna folleto temático.