2224 Difundir las revelaciones es la voluntad de Dios....

30 de enero de 1942: Libro 31

Es la voluntad de Dios que sus revelaciones se difundan para que los hombres aprendan a ver todos los sucesos mundiales como una misión divina o aprobación por el propio bien de sus almas; para que aprendan a reconocer una relación de eso con el estado mental de los hombres.

Esta relación solo puede explicarse por la Palabra de Dios, que Él Mismo transmite a los hombres, porque los hombres deben ser instruidos de antemano sobre la necesidad mental/espiritual y sus efectos en las almas para poder comprender qué contramedidas son necesarias para remediar esta miseria de la gente en la tierra.

El saber del significado y propósito de la creación, de la gracia de la encarnación y las consecuencias de una vida correcta e incorrecta en la tierra hace que todo sea comprensible que de otro modo sería incomprensible para los hombres. Y solo hay un camino de transmitir este saber a los hombres, porque de lo contrario no se les puede ofrecer. Porque tan pronto como un hombre quiere instruir a otro, no encontraría fe en él, aunque solo diga la verdad, porque la humanidad ya está demasiado aturdida, es decir, se ha alejado demasiado de la verdad para poder reconocerla como verdad.

Los hombres tienen un enfoque tan terrenal que solo se ríen de manera sublime de todo lo que se les enseña como enseñanza mental/espiritual. Es por eso que tiene que ser construido sobre una base terrenal, es decir, las enseñanzas mentales/espirituales deben ser transmitidas a las personas de una manera que despierte los intereses de las personas, deben ser capaces de convencerse del efecto de un poder, incluso si no quieren reconocer este poder. Y, por lo tanto, deben ser conscientes de este efecto, deben ser informados del contenido de los anuncios para que puedan convencerse ellas mismas, que corresponden a la verdad, cuando los sucesos mundiales se desarrollan de acuerdo con los anuncios.

El incrédulo seguirá manteniéndose en su incredulidad, ya que es libre de creer o no.... Pondrá todo como coincidencia y también tratará de influir en su prójimo. Pero muchas personas también pensarán y cambiarán su opinión, y Dios sabe de estas personas y quiere ayudarlas porque no pueden salir de la confusión por su propia fuerza.... Y así Él se les revela, y bendecidos son, quienes Le reconocen y creen en Sus revelaciones.... Serán salvados de la miseria mental/espiritual porque están dispuestos a recibir instrucciones....

Amén

Traducido por: Hans-Dieter Heise

Este comunicación no se menciona en ninguna folleto temático.

Descargas

Descargar cotizaciones para libro _book
 ePub  
 Kindle  
  Más descargas

Este Comunicación

 descargar como MP3  
Vista de impresión
 Manuscritos

Translations