Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/8147

8147 Invitación al trabajo diligente en la viña....

10 de abril de 1962: Libro 86

Tengo que amonestar repetidamente a mis trabajadores en la viña a que sean diligentes en su actividad, porque a través de su ayuda muchas almas son abordadas directamente de Mí y, por lo tanto, pueden recibir fuerza y luz directamente de Mí. para las almas de los humanos a quienes Mi Palabra es transmitida, es al mismo tiempo una provisión de alimento y de bebida, un alimento que necesitan urgentemente para poder madurar todavía en el corto tiempo hasta el fin.

Y hay que darles este alimento para que no se debiliten en tiempo venidero de necesidad, cuando tendrán que demostrar su fe en Mí, cuando tendrán que aguantar todas las presiones del oponente que quiere hundirlos en la ruina, al querer robarles toda la fe.... Y tampoco le será difícil hacerlo con aquellos que sólo tienen un fe muerta, que se llaman cristianos pero que no pueden ir más allá del cristianismo formal. Donde falta la fe viva, allí el adversario tendrá gran poder y les quitará incluso la fe débil.... Pero el que es alimentado con el pan del cielo, con el agua de la vida, logrará la fe viva y se mantendrá firme, incluso en la más feroz lucha de la fe, porque estará lleno de fuerza, la cual saca de Mi Palabra....

Y por eso vosotros debéis transmitir constantemente Mi Palabra, vosotros que la recibís y la recibiréis constantemente cuando os entreguéis a Mí, cuando Me dejéis estar presente en vosotros y escucháis lo que Yo os hablo. Y Mi amor os ofrecerá todo lo que necesitáis, lo que os servirá para la salvación de vuestra alma.... Mi amor os dará alimento que será beneficioso para vuestra alma porque la ayudará a madurar.... Y Yo quiero deciros una y otra vez que Yo sólo quiero ganar vuestro amor....

Por eso tengo que consideraros de tal manera que aprendáis a amarme, que a través de Mi Palabra os encendáis cada vez más en el amor por Mí.... que reconozcáis cada vez más Mi perfección y os sentís atraídos hacia Mí.... Porque lo que puede contribuir a aumentar vuestro amor por Mí, eso os lo revelo. Y así vuestro conocimiento se ampliará y estaréis cada vez más convencidos de la verdad de este conocimiento, porque os da una luz brillante acerca de todo lo que mueve vuestros pensamientos, lo que veis a vuestro alrededor y lo que aún no estaba claro para vosotros, ya que sólo el Uno puede instruiros en la verdad, Quien es la Verdad Misma desde la eternidad....

Y si tal conocimiento es transmitido a otros seres humanos, así también les ofrece la oportunidad de encender su amor en Mí. Ellos también aprenderán a amarme porque Me reconocen como un Ser sumamente perfecto; y el amor por Mí también trata de establecer la unificación Conmigo que es el objetivo y el propósito de la vida terrenal como ser humano. Una y otra vez quiero daros Mis dones de gracia, una y otra vez quiero transmitiros Mi Palabra, una y otra vez quiero probaros Mi amor y revelarme a vosotros.... Pero una y otra vez también os exijo la transmisión los dones de la gracia, porque Yo, el Amor, aún quiero conquistar a muchos humanos y por eso tengo que dirigirme a ellos Yo Mismo.

Pero todos vosotros a quienes Yo pueda revelarme de esta manera, también sentiréis Mi presencia, sentiréis que estoy cerca de vosotros, que Me dirijo a cada uno de vosotros con sólo que tome nota de Mi Palabra, que Yo transmito de arriba a la Tierra.... Y Mi presencia que puede sentir, le hará también entrar en el vínculo más íntimo Conmigo, y entonces él mismo experimentará el poder de Mi Palabra, aceptará Mi Palabra de lo que es: alimento y bebida para su alma, que necesita de un alimento fuerte.

Invito a todos a recibir de Mí este alimento, porque todo aquel que venga a Mi mesa quedará satisfecho de Mí.... los que aceptan Mi Palabra, que les llega a través de Mis mensajeros.... pero cada uno debe tener la voluntad de dejarse alimentar y refrescar por Mí Mismo, porque Yo no uso ninguna coerción.... Pero ganará infinitamente quien se abre a Mí y a Mi Palabra, quien bebe de Mi fuente y bebe el agua viva que fluye hacia él, si tan sólo es de buena voluntad....

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise