Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/7541

7541 El hombre define su propio destino....

7 de marzo de 1960: Libro 79

Según vuestro anhelo será el alojamiento en el reino.... Espíritu o materia será vuestra funda, según vuestra voluntad que es libre. El destino de vuestro alma después de la muerte habéis creado vosotros mismos a través de vuestra voluntad, la cual ha elegido el espíritu o la materia. Entended que sois vosotros mismos la causa que os espera después de la muerte. Porque vais a recibir lo que queréis: una estancia en la materia dura o en el reino espiritual...os esperará el destino de lo que habéis elegido vosotros mismos durante la vida terrestre. Pero son destinos muy diferentes.... bendición o torturas, y solo y cuando se anhela el reino espiritual ya en la vida en tierra podrá aprovechar de un estado bonito, será bendito, y aquellos que solo buscaban la materia su espíritu será atrapado en la funda de la materia y que se encuentra en un estado de pena y tortura.... pero por culpa propia. Los hombres viven en la tierra con el propósito de espiritualizarse su ser.... de vuestros almas que ya no se encuentran lejos de la perfección. Pero esa espiritualización tenéis que realizar por propia voluntad y no se puede evitar si preferís caer de nuevo en la tentación de la materia y vuestro ser se vuelve a endurecer lentamente.... si vuestro alma recae a la profundidad de la cual ya se había levantado, porque solamente se debe aprobar como hombre.... Tiene la posibilidad de espiritualizarse por completo durante el plazo corto de la estancia en tierra, porque se le da apoyo suficiente. Pero también tiene que enfrentarse a las tentaciones terrestres, está tentada repetitivamente por la materia y intenta de dominarla; puede poner el mundo material ante del mundo espiritual, y entonces irá sin remedio el camino atrás a la profundidad, entonces su perfección se pone en duda a no que se lo piense antes de su muerte corporal y anhela al reino espiritual con voluntad fuerte.... le es posible, porque se respeta esa voluntad y se lo apoya en cualquier momento. Por eso el mundo material para el hombre es un gran peligro cuya voluntad está debilitada.... Porque la voluntad define el estado espiritual del alma y fácilmente se puede echar atrás.... Y entonces la materia dará alojamiento al alma en cuanto el cuerpo se pierde a la muerte. Pero si el hombre busca al reino espiritual se mueve más en ello que en el reino terrestre, si busca más la unión con Dios, entonces no tiene que temer caer en la tentación de la materia, y su destino en el más allá se formará según eso.... El se encuentra en el reino espiritual que ya anhela en tierra, y solo el nivel de la madurez del alma determina el grado de la luz y de la bendición que el reino espiritual le ofrecerá.... pero es el reino espiritual.... el alma se ha podido soltar por completo de la forma de la materia, ha conseguido su forma de origen cuando trabajaba y se movía en libertad y fuerza plena.... Ha conseguido su meta en tierra y no hace falta pasar otra vez por el mundo de la materia, pero lo que es el destino del alma para los que solo eligieron solo la materia en tierra. Y es el último plazo de gracia, es el tiempo antes del final cuando se les presta ayuda aumentada a todos los hombre para que puedan realizar su transformación espiritual completa...actuaciones extraordinarias ayudan de forma extraordinaria donde los hombres actúan sin responsabilidad y desinteresados.... A todas las almas se les presta ayuda divina, porque Él les ama y les quiere ahorrar el destino terrible de la fijación nueva.... Pero todos los hombres tienen una voluntad libre la cual determina su destino del alma para toda la eternidad, para el tiempo después de la muerte, lo que puede ser estupendamente o tortuoso, según de la voluntad humana o según el estilo de vida llevado en la tierra. Aquel que intenta llegar al reino espiritual entrará; aquel que le gusta la materia estará atrapado de nuevo en ella y su formas, porque para aquellas almas el reino del más allá estará cercado en cuanto llegue el último día en esta tierra....

Amén

Traducido por Bea Gato