Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/7538

7538 Corta o larga duración de vida....

4 de marzo de 1960: Libro 79

No es mucho tiempo que se os otorgado para la vida en la tierra, comparado con el interminable largo tiempo de vuestro desarrollo previo, que no podréis estimar en términos de tiempo. Y vuestra vida en la tierra también puede acortarse todavía, de modo que ya seáis llamados prematuramente a la eternidad. Y por eso debéis pensar en vuestra alma con todo celo, debéis darle lo que sea posible, debéis alimentarla para que no tenga necesidad de morirse de hambre cuando vuestro estar en esta tierra es breve.... Siempre debéis darla de comer y de beber en abundancia y nunca contéis con una vida muy larga en la tierra, porque no sabéis el día y la hora de vuestro fin físico.... Pero vuestra alma también puede madurar en muy poco tiempo, si vuestra voluntad es buen y la ayuda a madurar.

Ningún hombre puede determinar su duración de vida o saber acerca de ella, y precisamente esta ignorancia debe impulsarlo a una celosa actividad de alma; debe llevar su estilo de vida de tal manera que puede considerar con calma cada día como el último sin tener que temer por la salvación de su alma. Y en el tiempo del final muchas personas terminarán con sus vidas, porque aún tendrá lugar un gran avistamiento y muchas personas serán llamadas prematuramente para su propia salvación porque en la tierra descuidaron de trabajar en su alma, para que no caigan víctimas de la ira despiadada del adversario de Dios, que sólo las empuja más y más hacia el abismo si estas almas no le son arrebatadas primero.

Especialmente aquellos hombres que no se esfuerzan espiritualmente no piensan en una muerte temprana, y viven sus vidas irresponsablemente sin poder ser llamados malos. Dios tiene misericordia de ellos y quiere ayudarlos a seguir desarrollándose en el más allá, que ciertamente será mucho más difícil, pero no imposible, mientras que en la tierra un hundimiento completo hasta las profundidades puede ser fácilmente el destino de aquellas almas que andan por la vida sin sentido de responsabilidad.

Se os ofrecen suficientes oportunidades donde podéis madurar en la vida de la tierra, pero si no las aprovecháis, tampoco evaluáis la vida como ser humano, que solo os fue dada con el propósito de la maduración de vuestra alma. Y entonces tampoco importa si os quedáis en la tierra por mucho tiempo o solo por poco tiempo si no usáis la gracia de la encarnación como ser humano, ayudando a vuestra alma a su madurez final. Pero si incluso llegáis a la vejez, la vida en la tierra puede llamarse corta, comparada con el tiempo de vuestro desarrollo previo. Pero incluso un tiempo muy corto en la tierra es suficiente para que cumpláis vuestro propósito en la tierra. Y por lo tanto vuestra madurez no depende de la duración de vuestra existencia terrenal, sino únicamente de vuestra voluntad de evaluar adecuadamente esta existencia.

Una y otra vez se os demuestra el camino correcto a través de la Palabra de Dios para alcanzar la perfección de vuestra alma.... Una y otra vez se os presentan los mandamientos del amor divino, cuyo cumplimiento es el único propósito y objetivo de la existencia como ser humano.... Y siempre podéis practicar el amor, y no importa cuán corta sea vuestra vida, vuestra alma se beneficiará de ello si vivís vuestra estilo de vida en amor.... Pero si no guardáis estos dos mandamientos, así vuestra vida será una ociosidad y vuestra responsabilidad aún mayor cuanto más dura vuestra vida terrenal, y entonces sólo podréis estar agradecidos cuando vuestra vida se acorte y aún tengáis la oportunidad de un mayor desarrollo en el reino del más allá, para que no os perdáis del todo al final de los días, donde cada uno será juzgado según sus obras....

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise