Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/7253

7253 Uso correcto de la fuerza vital: Obrar en el amor....

12 de enero de 1959: Libro 77

Cada día os impone nuevas demandas, y una y otra vez necesitáis fuerza para poder cumplir con estas demandas. Y mientras la fuerza vital todavía esté disponible para vosotros, también podréis cumplir vuestra tarea tanto terrenal como espiritualmente. Porque incluso la fuerza vital que solo se usa terrenalmente puede ganaros un suministro de poder espiritual si vuestra actividad consiste en obras de amor. Pero una vez que obtenéis el poder espiritual, entonces ya no necesitáis preocuparos por poder cumplir vuestra tarea, porque el suministro de poder espiritual os estimula cada vez más para obrar en el amor, y por lo tanto lleváis a cabo la transformación de vuestro ser, lo cual es el propósito de vuestra vida terrenal.

Así que, en realidad, no se exige mucho de vosotros, los humanos, aparte del cambio del amor propio al amor al prójimo desinteresado. Pero todavía necesitáis fuerza para esto, porque el amor es fuerza, y si aún no la habéis encendido en vosotros, estáis desprovistos de toda fuerza. Pero el amor propio no es ninguna fuerza, más bien os roba la fuerza, porque siempre exigirá vuestra fuerza vital hasta el más alto logro para poder hacerse justicia a sí mismo; el amor propio exige todo para sí mismo, y así también abusa de la fuerza vital sólo para el bien del cuerpo, porque sólo eso sirve al alma es lo que tiene efecto como el amor desinteresado....

Entonces, si el ser humano usa su fuerza vital para servir en el amor, entonces su alma obtendrá el mayor beneficio de ello; el ser humano recibirá mucho poder espiritual, y esto nuevamente permitirá que el alma madure irrevocablemente, porque un ser humano, quien sirve en el amor, nunca abandonará esta actividad, las obras del amor aumentarán, el suministro espiritual de poder lo impulsa a obrar en el amor, y siempre trae mayor madurez a su alma. Y tal amor es, que el hombre debe encenderse dentro de sí mismo y dejarse arder en una llama luminosa, porque es un amor divino, mientras que el amor propio es una parte de herencia del adversario de Dios y por tanto tampoco hará feliz.

Porque a pesar de que el hombre se esfuerza por obtener todas las ventajas para sí mismo y también las obtiene en la mayoría a través del apoyo del oponente, es y sigue siendo, sin embargo, un ser débil, que no tiene ninguna luz de cognición ni la fuerza para reconocer y luchar por el verdadero propósito de la vida terrenal.... Partirá de esta tierra en este estado impotente y sin luz y entrará en el reino del más allá exactamente de la misma manera, mientras que la persona que ama ya adquiere luz y fuerza en la tierra y entrará en el reino espiritual en un manto de luz, por lo que no tiene oscuridad ni debilidad, porque ha acumulado mucho poder espiritual en la tierra, porque usó su fuerza vital correctamente para obrar en el amor.

El amor es poder, pero sin amor tampoco puede haber poder, sólo falta de luz e impotencia. Vosotros humanos necesitáis todas vuestras fuerzas, y si queréis cumplir con vuestra tarea terrenal y aún sois impotentes, entonces pedid a Dios que os dé poder para obrar en el amor, Él dirigirá vuestros sentidos correctamente para que uséis bien vuestra fuerza vital y adquirir así poder espiritual. Pero no penséis que siempre os quedarán las fuerzas que aún os quedan en ese momento.... La fuerza vital también es un don que os será arrebatado nuevamente cuando llegue la hora de partir de esta tierra. Por lo tanto, aseguraos que entonces haya mucha fuerza a vuestra disposición, que hayáis adquirido bienes espirituales, que podáis entrar en el reino espiritual llena de luz y fuerza y luego ser feliz para siempre....

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise