Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/7129

7129 Evocación diaria del Nombre de Jesús

24 de mayo de 1958: Libro 76

Debéis empezar cada día y cada obra conmigo y en mi Nombre, y así cumplir con vuestras obligaciones, entonces podéis estar seguros de realizar un trabajo bendecido - sea terrenal o espiritual.

Pero si andáis solos, es decir, sin haberme pedido mi Ayuda, entonces desempeñaréis mucho trabajo inútil, tendréis que luchar con dificultades o el trabajo no os saldrá siempre bien. Un pensamiento íntimo dirigido a Mí ya os garantiza mi Apoyo, y si me invocáis rogándome conscientemente por Bendición y Apoyo, entonces de por sí todo resultará bien, de modo que podéis cumplir con vuestros quehaceres con tranquilidad.

Pero siempre debéis estar conscientes de que estáis asediados por fuerzas tenebrosas que siempre tendrán acceso a vosotros cuando omitís levantar una valla de protección alrededor de vosotros, invocando mi Nombre y rogando que bendiga vuestra actividad. Porque una vez que estas hayan conseguido acceso a vosotros, entonces cuesta mucho más el deshacerse de ellas que al principio cuando sólo se trataba de negarles su acceso.

Pues debilitan vuestra voluntad, la que después sólo reuniendo todas las fuerzas recupera lo omitido: Llamarme por pedirme por Ayuda. La lucha por vuestra alma es continua, y frecuentemente aquellas fuerzas tenebrosas os la complican; pero a menudo depende de vosotros mismos porque podríais solicitar Ayuda ilimitada, lo que siempre debéis hacer mediante la oración íntima, rogándome que os guíe y os dé mi Protección y mi Bendición...

Por eso conviene que nunca empecéis vuestra jornada sin Mí... que en vuestro corazón invoquéis mi Nombre, rogando por la fortificación de vuestra voluntad, y entregándoos a Mí ilimitadamente... Entonces Yo puedo protegeros contra el enemigo de vuestras almas, e incontables seres de Luz estarán alrededor de vosotros, impidiéndole el acceso. Y vosotros cumpliréis con vuestra jornada alegres y despreocupadamente, conscientes de tener fuerza y paz interior.

Y nada ya podrá trastornaros porque sabéis que Yo siempre estoy presente y arreglo todo para vosotros. La unión íntima conmigo es la mejor garantía para el éxito de todos vuestros planes –que sean asuntos terrenales o espirituales– y así Yo mismo siempre puedo tomar influencia en vosotros y vuestros pensamientos, y puedo guiar vuestras actividades de una manera correcta y conveniente para vosotros.

Pero nada más que os apartéis de Mí, o si tan sólo aflojáis la conexión conmigo, ya habrá otros pensamientos que van ganando dominio sobre vosotros - pensamientos que os llegan de mi adversario y que os quitan la paz interior. Pues os inquietan y, cada vez más, facilitan el acceso a fuerzas malvadas, las que entonces continúan el proceso de perturbación y desavenencia interior, con lo que vuestro trabajo diario tampoco ya está bienaventurado y vuestra alma está en peligro de que mi adversario la cautive.

Y otra vez: que sólo podéis liberaros de semejante peligro si buscáis refugio en Mí, porque Yo siempre estoy dispuesto a socorreros en vuestra aflicción espiritual. Pero sin Mí no podéis liberaros de él y de su influencia... sin Mí sois demasiado débiles y expuestos a él. A todos esos apuros podéis escapar si cada vez de nuevo os entregáis a Mí y a mi Protección... si siempre me rogáis por mi Bendición... y si me confiáis vuestro bien corporal y espiritual... si nunca omitís invocar mi Nombre, y de esta manera abiertamente reconocéis que me profesáis a Mí en Jesucristo. Así erigís una pared que mi adversario nunca podrá derrumbar porque me rehuye a Mí y a mi Nombre, por lo que también os dejará en paz - si en cada peligro y pena tan sólo invocáis mi Nombre con plena fe.

Amén.

Traducido por Ion Chincea