Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/6839

6839 ¿Puede la verdad pura llegar a la Tierra sin error?....

26 de mayo de 1957: Libro 73

Cada ser humano debe luchar contra los ataques del enemigo de su alma. Y este enemigo encuentra muchos medios para lograr su objetivo. Siempre ataca donde los seres humanos son sensibles, algo lo que le es bien conocido. Ya sean debilidades o vicios, siempre se aprovechará de momentos en que se hacen evidentes, y entonces también lo tiene fácil, cuando logra sembrar confusión e inquietud que acercan al ser humano cada vez un paso más cerca hacia él. Un medio particularmente eficaz para él es sembrar la duda en los corazones: duda sobre la providencia divina, sobre el amor y el pode de Dios, y sobre la rectitud del pensamiento humano. Esta duda crea confusión e inquietud, en entonces las trata de aprovechar.

Sin embargo, cada ser humano tiene a su alrededor espíritus guardianes que emprenden la lucha contra el adversario de Dios de tal manera que también influyen en los pensamientos del ser humano y éstos son verdaderamente más exitosos que el adversario, si el ser humano mismo tiene su voluntad dirigida hacia Dios. Por eso se os dice repetidamente que incluso un breve pensamiento es la salvación para vosotros de ese peligro, pues este da a todas vuestras guías y espíritus guardianes la posibilidad de alejar el adversario de Dios de vosotros, y la paz interior y la bendita certeza de estar a salvo en Dios regresan. Entonces, todo lo que causó dudas en vosotros se aclara ante vosotros, y ahora podréis enfrentar todos los ataques con renovadas fuerzas y repelerlos.

Es cierto que Dios habla a todos los seres humanos que quieren escucharlo.... También es cierto que les brinda consuelo y exhortación a través de la voz del Espíritu, y que los pensamientos que los conmueven tras una oración ferviente al Padre pueden considerarse obra del Espíritu Santo, Quien ahora guía sabiamente el pensamiento, cuando un ser humano, a través de una vida vivida en el amor, permite que el Espíritu obre en él.... Es cierto que todos éstos se pueden sentirse abordados por Dios, Su Creador y Padre desde la eternidad....

Pero todos estos seres humanos también reconocerán la voz del Padre cuando se les transmite un bien espiritual, que igualmente llega al ser humano como “obra del Espíritu”, pero que, además de consuelos, advertencias y Palabras del amor paternal, también contiene sabias aclaraciones: un saber, que sólo puede llegar a la Tierra de forma directa, que requiere un recipiente especial en el que el Espíritu de Dios pueda derramarse. Y este saber solo se transmite a la Tierra porque algunos seres humanos que desean dedicarse a la enseñanza en la Tierra deben ser introducidos en el plan de Salvación de Dios, para que comprendan claramente las correlaciones y puedan hablar de ello con convicción a sus semejantes, cuando se plantean preguntas o se desea aclaraciones.

Se trata únicamente de que solo las aclaraciones veraces pueden llevar a la convicción interior, es decir, a una fe viva.... Pero los seres humanos también tienen que saber que la verdad solo se reconoce como tal cuando se vive en el amor. Por lo tanto, primero se tiene que predicar a los seres humanos la Enseñanza divina del amor, y solo viviendo esta Enseñanza se puede recibir y reconocer directamente la verdad cuando se le ofrece a través de intermediarios.

Un cierto grado de madurez es requisito para ser introducido por Dios en un saber que puede describirse como el “plan divino de Salvación”.... un saber, que tampoco puede enseñarse de manera escolar, porque no es demostrable.... un saber, que no es necesariamente necesario para alcanzar la felicidad, pero que ya está garantizada a través del cumplimiento de los mandamientos divinos del amor.... Un saber, que sin embargo, puede ser la clave para muchos seres humanos que seriamente buscan, reflexionan y anhelan la verdad, abriéndoles las puertas y guiándolos a la fe y al amor. Y dios ha considerado necesario este saber para la humanidad, porque el error, por la influencia de Su adversario, ya se ha extendido y arraigado de tal manera, que incluso aquellos seres humanos que aún se mantenían firmes frente al error ya casi no son capaces de reconocer la verdad.

Dios sabe verdaderamente que es necesario dar aclaración a los seres humanos, pero no cada ser humano está capacitado para recibir tal saber, y por lo tanto, las dudas recurrentes acerca de la veracidad del saber recibido de manera inusual están justificados. Pero no se puede negar que Dios transmite la verdad a la Tierra cuando lo considera necesario, ya que, de lo contrario, se Le negaría el amor y el poder que no quisieron ni pudieron impedir que el adversario se serviría igualmente de Su herramienta para invalidar o contaminar la verdad transmitida por Dios a la Tierra.... Si bien no usa la coerción para crearse una herramienta, pero tan pronto como esta herramienta entrega su voluntad a Él, tan pronto como se somete voluntariamente a Él, el amor y el poder de Dios también rodean este recipiente como un muro protector, en el cual ahora puede derramar Su divino amor.

Y puesto que el adversario de Dios se encuentra entonces totalmente impotente, porque se le hace imposible su cooperación, intenta ahora debilitar la obra divina de otra manera: sembrando duda tras duda en los corazones de quienes se acercan a examinar este bien espiritual. Y también gana gran influencia donde el mayor deseo de verdad y el amor puro no iluminan el espíritu de un ser humano de tal manera que reconoce la voz del Padre, que también se dirige a él mismo y llega a su corazón. Sin embargo, la entrega total a Dios con toda humildad y amor podría permitir a todos los seres humanos reconocer clara y nítidamente Su gobierno y Su obra, que se fundamenta precisamente en el fin de los tiempos y que quiere salvaros, seres humanos, del abismo al que Su adversario quiere empujaros.... pero el ser humano mismo tiene que desear seriamente conocer la verdad....

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise