Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/6794

6794 Cuestión controvertida sobre la encarnación de Dios....

28 de marzo de 1957: Libro 72

A menudo seguirán surgiendo objeciones, y a menudo, la verdad que os ha transmitido desde arriba a través de Mi Espíritu seguirá siendo cuestionada o puesta en duda. Y siempre es una influencia adversaria que se infiltra por todas partes si no se le hace frente, cuando el ser humano no presta atención y se somete a sí mismo constantemente a serias críticas. Todos vosotros, los humanos, podéis equivocaros en vuestro pensamiento intelectual; podéis sacar conclusiones falsas e emitir juicios erróneos, pues mientras viváis en la Tierra, aún no seréis perfectos y estaréis constantemente expuestos a las tentaciones de Mi adversario. Y por lo tanto, nadie debe elevarse por encima de otro, porque todos corren el mismo peligro, y cada uno debe cuidar de sí mismo....

Sin embargo, hay una verdad indiscutible.... pero si la reconocéis como tal, esto depende del grado de madurez de vuestra alma y no de la agudeza de vuestro intelecto.... Y esta verdad indiscutible se origina en Mí y sólo puede dudarse de nuevo cuando ha sido alterada por la voluntad humana, cuando el intelecto humano se activa de nuevo, manipulando esta verdad pura de Mí, y así pone en peligro la pureza de Mi Palabra con sus propias palabras, con sus propias reflexiones.... Esto debería bastaros a vosotros, los humanos, y advertiros de mezclar Mi Palabra transmitida directamente con obra adicional humana....

Y toda objeción puede ser refutada, porque dondequiera que trabajo, también proporciono claridad total. Porque quiero traeros luz a vosotros, los humanos, quiero iluminar vuestro pensamiento, pero no sumergiros en una nueva oscuridad. También quiero responder preguntas que se hacen una y otra vez.... ya sea en la Tierra o en el más allá, porque la fe a menudo corre el riesgo de fallar debido a las cuestiones cuyas respuestas hasta ahora os han dejado insatisfechos.... Y una de estas cuestiones candentes también es la “Encarnación de Dios en Jesús”....

Quien sabe que Me he fijado como objetivo la “Deificación” de todo lo “creado” por Mí, quién sabe en que consiste esta Deificación, también le es comprensible que incluso lo espiritual que se ha mantenido fiel a Mí sólo puede lograr esta Deificación, cuando no solo demuestra su valía en la dicha, sino también en la profundidad, pues su libre albedrío tiene que ser puesta a prueba, cuya superación transforma a la “criatura” en un “hijo” de Dios.... de lo contrario esos seres angélicos serían eternamente solo portadores de Mi voluntad, ciertamente en una dicha inconmensurable, pero siempre solo como ejecutores de Mi voluntad, sin alcanzar jamás la completa independencia libre. Por lo tanto, muchos de esos espíritus angélicos ya han recorrido el camino sobre la Tierra para alcanzar la perfección suprema.... Y el alma del hombre Jesús también recorrió este camino que Le llevó al objetivo supremo, la “Deificación”, la “Unificación con Dios” completa....

Sea lo que sea lo que haya sucedido en el reino de los espíritus, sólo se os puede representar de forma pictórica a vosotros, los seres humanos, carecéis de la capacidad conceptual necesaria para comprender la magnitud del proceso de creación y los motivos de la apostasía de lo espiritual de Mí. Sin embargo, Mis revelaciones corresponden a la verdad, y no caeréis en falsas concepciones si las hacéis vuestras.

Pero debéis saber una cosa: que no podéis personificarme a Mí Mismo.... que no podéis imponerme las mismas limitaciones en las que vosotros aún os encontráis, porque aún no sois perfectos.... que, por lo tanto, Mi encarnación no consistió en que un “ser limitado” se rodeó simplemente con un caparazón carnal.... sino que Mi Espíritu que abarca todo, que no conoce límites, llenaba por completo a un ser humano que, sin embargo, al igual que cualquier otro ser humano, estableció primero, por libre voluntad, una unificación tan estrecha Conmigo que tuvo lugar esta “Deificación”, que Él se hizo Uno Conmigo, Quien Yo, en Mi sustancia primordial, Le llené por completo....

Porque Mi sustancia primordial es el amor. El amor llenó al hombre Jesús. El amor descendió a la Tierra. El amor realizó la obra de la Redención. El amor expió la culpa.... Y el Amor Mismo se convirtió en una Deidad visible en el Redentor Jesucristo. Mi Espíritu, que llena toda la infinidad, Se manifestó en el hombre Jesús. Dios Se hizo hombre.... El hombre Jesús era Dios, pues el Padre y el Hijo Se habían hecho Uno.... La luz primordial y la fuerza primordial desde la eternidad Se habían dado una forma a Sí Mismas para hacer infinitamente felices a todas las esencias espirituales que habían surgido de ellas....

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise