Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/6655

6655 Serias amonestaciones y advertencias de Dios.... Ancla de rescate....

27 de septiembre de 1956: Libro 71

Os derivaréis inexorablemente hacia el abismo si no buscáis las anclas de rescate que Mi amor os sigue lanzando. Pero este agarre de un ancla de rescate requiere de vuestra voluntad, y esta es demasiado débil o está dirigida hacia objetivos completamente diferentes, como para que no prestéis atención a lo que podría significar la salvación para vosotros. Y así pasará el tiempo hasta el final, sin que estéis dispuestos a abandonar los caminos que conducen al abismo. Y no se os puede impedir hacerlo....

Y Mi inusual intervención tampoco os hará entrar en razón; la aceptaréis con la misma incredulidad que antes era vuestra naturaleza; perseguiréis todo con indiferencia y trataréis de nuevo de arreglar y continuar la vida a vuestro favor.... no os veáis afectados por lo que se supone que es un último intento de despertar a los humanos y empujarlos hacia un camino diferente.... Pero no podréis detener el último final, que luego os traerá un destino duro.... el nuevo destierro en las creaciones de la nueva tierra.

Debido a vuestro libre albedrío, no podéis ser obstaculizados en vuestro estilo de vida, sólo se os puede llamar la atención a través de advertencias y amonestaciones, pero eso también depende de vuestro libre albedrío, de si estas advertencias y amonestaciones os causan una impresión, sin influyen en vosotros y os estimulan a un cambio de voluntad. Y es por eso que la vida terrenal transcurre de manera aparentemente ordenada, se observa un aparente florecimiento si se trata de planes terrenales, uno se da cuento de un trabajar y obrar incansable, una acumulación de valores terrenales, hay un mayor deseo de vivir, éxito tras éxito y los hombres están satisfechos con este desarrollo terrenal, siempre que les proporcione ventaja física y bienestar físico. Pero más profundamente se hunden espiritualmente. Porque en sus esfuerzos terrenales se olvidan por completo de su verdadera tarea terrenal: madurar espiritualmente....

Pero he reconocido este estado desde la eternidad, y Mi plan de Salvación fue determinado en consecuencia, que entonces prevé el fin del período de desarrollo cuando ya no se puedan ver más éxitos espirituales en esta tierra. Y ese tiempo pronto habrá llegado, porque hay muy pocas personas que se esfuerzan espiritualmente, pero hay una infinidad de humanos que sólo tienen un enfoque mundano. Y como el significado y el propósito de la vida terrenal consiste sólo en el desarrollo ascendente del alma, pero a esta ya no se le da prioridad, la tierra ha cumplido su misión para esta época.... debe dar paso a una tierra completamente reorganizada, o también: Es necesario establecer un nuevo orden en esta tierra para que corresponda nuevamente a su verdadero significado y propósito. Pero nunca se puede esperar que los humanos en esta tierra vuelvan a cambiar.... Se están hundiendo cada vez más, y Yo detengo esta caída al desterrándolos nuevamente en las creaciones de la nueva tierra.

No hay un cambio espiritual en esta tierra, como muchas veces lo suponen aquellos que no quieren creer que esté período terrenal se terminará.... Pero el cambio vendrá, pero, sin embargo, en la nueva tierra habrá un género humano espiritualmente más maduro, que ahora llevará nuevamente una vida según Mi voluntad y en constante conexión con el reino espiritual.... Pero tal vida ya no se puede esperar jamás en esta tierra porque el espíritu material está demasiado desarrollado, porque Mi oponente tiene a los humanos atados y ellos mismos no se oponen a él. Así, lo que creía poder sumergir a las profundidades le será arrebatado.... A través del nuevo destierro, su parte le será arrebatado, por lo que él mismo quedará debilitado durante mucho tiempo y ya no podrá oprimir a los humanos, porque estos se han entregado a Mí y están quitados de su influencia.

Pero una cosa es segura: que vosotros, los humanos en esta tierra, estáis al borde de este punto de inflexión, que tenéis que esperar el fin de esta tierra y que este fin también significa una destrucción completa de la superficie de esta tierra, lo que también incluye el fin de los humanos y animales, es decir, de cualquier criatura. Por eso las Palabras de amor y misericordia os resuenan una y otra vez, por eso no dejo de enviaros llamados de amonestación y advertencias. Pero eso sigo tirándoos un ancla de rescate porque quiero ayudaros, para que lo aferréis a ello en el remolino del mundo y no os dejéis llevar más lejos.... porque de lo contrario terminaréis inevitablemente en las profundidades y os enfrentaréis a un destino doloroso, un nuevo destierro en las creaciones de la nueva tierra....

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise