Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/6255

6255 Transmisión de la Palabra divina... Acto de gracia de Dios...

12 de mayo de 1955: Libro 67

Una luz os será traída en la oscuridad... Debéis experimentar el amor y la misericordia de Dios, debéis ser colmados con Su gracia, debéis experimentar una señal directa de Su Obra y una prueba de Su presencia entre los hombres que son de buena voluntad... debéis tomar nota de Su Palabra, que Él dirige como una emanación de Su amor hacia la tierra, porque los hombres se encuentran en una gran necesidad espiritual y que necesitan ayuda urgente.

Por eso Él Mismo se expresa a través de la boca humana, deja que Su Espíritu irradia hacia abajo en los corazones de aquellos que se abren a Él, y Él les da una luz correcta. Él les transmite la verdad, un conocimiento que pone a los hombres en un estado de reconocimiento y que debe servir para encender el amor a su Dios y Creador, a su Padre desde la eternidad... porque solo el amor a Dios hace que los hombres vivan de acuerdo con Su voluntad y luchar por Él... Solo el amor despierta en el hombre el deseo de unión con el Amor eterno Mismo...

Verdaderamente es una prueba de gran amor por vosotros humanos, que Dios Mismo se os anuncia, que enciende una luz en vosotros que os debe iluminar claramente el camino que tenéis que caminar en la tierra... Es un acto de gracia y misericordia, que Él se os acerca de nuevo a vosotros... que una vez os apartasteis en libre albedrío de Dios... que os habla y trata de conmoveros a que deis la vuelta y luchéis por Él nuevamente, Quien es el único que quiere daros la eterna bienaventuranza...

Vosotros los humanos camináis en la noche por propia culpa, porque la luz del amor divino una vez brillo para vosotros en abundancia, pera la rechazasteis. Aceptadla ahora, que vuelve a brillar para vosotros, recibid el don de la gracia de la mano de Dios y usadlo bien... y volveréis a ser lo que eráis desde el principio: seres benditos y llenos de luz y fuerza obrando en perfección. Dios Mismo os da los medios que solo necesitáis usar para recuperar vuestra antigua perfección... Él os da gracias que no merecéis, ya que os habíais alejado voluntariamente de Dios... Pero Él quiere ganaros de nuevo, Él quiere que regreséis como Sus Hijos a Él en la casa de vuestro Padre, porque Su amor os creó y este amor por vosotros no cesa para siempre y, por lo tanto, cortejará incansablemente por vuestro amor, por el amor del niño al Padre, Que es y será para vosotros para siempre. Por eso Él Mismo os habla, y si lo escucháis y movéis las Palabras en lo más profundo de vuestro corazón, también sentiréis el amor y la fuerza que contiene Su Palabra... Lo sentiréis vosotros mismos presente en vosotros, y vuestro corazón se encenderá en amor y querer pertenecer a Él para siempre...

Abrid vuestros corazones para Su discurso, no os cerréis de mala gana, sino escuchad lo que Él quiere deciros... Y experimentaréis una bendición inesperada, escaparéis de la noche espiritual, la luz de una brillante mañana os iluminará, que llenará vuestros corazones con felicidad... Os acercaréis a un nuevo día y nunca más tendréis que temer la noche oscura, porque la luz eterna Misma viene a vosotros y llena vuestros corazones con un brillo radiante...

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise