Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/6146

6146 La voluntad determina la medida de la gracia...

27 de diciembre de 1954: Libro 66

No es la medida de la gracia que está determinando la maduración del alma, sino depende de vuestra voluntad para aprovechar las gracias. Porque por muy abundantes que fluyan las gracias hacia vosotros, si no estáis dispuestos a aceptarlas y evaluarlas, son del todo ineficaces y vuestra alma no saca de ellas ni la más mínima ventaja. Así que vuestra voluntad determina el grado de madurez de vuestra alma... Como vosotros lo queréis así será el destino del alma después de vuestra muerte... Y vuestra voluntad será nuevamente influenciada desde dos lados... el mundo de la luz y también el mundo de las tinieblas tratan de ganar vuestra voluntad para sí mismos y cada uno tiene presente lo que os puede ofrecer... Luz y felicidad en el reino espiritual y también bienes terrenales que son transitorios y por lo tanto significan una esfera oscura para el alma. Y si pensaríais seriamente en lo que podéis lograr, también seríais más cuidadosos antes de tomar una decisión.

Todo, lo que os apunta hacia arriba, es gracia... todo, lo que es de ventaja para vuestra alma, es gracia... pero vosotros determináis si la gracia tiene un efecto en vosotros... A vosotros los humanos se os da repetidamente la oportunidad de hollar el camino hacia la altura, y todas estas oportunidades son gracias que el gran amor de Dios os da... Y cada vez podéis lograr un progreso espiritual si os dejáis atrapar por la gracia y ya no oponéis ninguna resistencia... entonces vuestra alma pedirá cada vez más lo que le ayudará a madurar, y la gracia de Dios fluirá hacia ella cada vez más abundantemente...

Pero es diferente con las almas que no quieren, que probablemente necesitan mucha ayuda pero que no se dejan impresionar por los dones divinos de gracia, que rechazan cualquier ayuda... que siempre mantienen sus ojos dirigidos al mundo, siguiendo atentamente todas las luces deslumbrantes allí y no sienten la suave luz benéfica de la gracia divina. Ellos reciben la misma medida de gracia que los primeros, pero no la usan... la dejan pasar desapercibida y su alma se queda en la oscuridad, no se le da ningún poder, pero que cada alma puede recibir en abundancia si la voluntad humana lo permite. Por eso uno puede alcanzar fácilmente la perfección mientras que el otro permanece abajo... aunque amplias gracias estaban disponibles para ambos. Fueron utilizadas por uno pero ignoradas por el otro, y corresponde madura también el alma o se mantiene en el estado antiguo, en las tinieblas.

La voluntad no puede ser forzada por parte de Dios y por lo tanto tampoco por los poderes llenos de luz que cuidan de las personas en la tierra... pero en su amor todavía intentan todo para cambiar la voluntad para que se vuelvan a Dios, que el hombre renuncia a su resistencia a Dios y ahora acepta con gratitud de Su mano todo lo que es bueno para él... La voluntad solo necesita ser buena, entonces el desarrollo ascendente está asegurado, entonces el hombre está rodeado de tantas buenas fuerzas que buscan transferir su voluntad a él, que es enteramente de Dios, y entonces el hombre acepta toda gracia que se le ofrezca y la utilizará según la voluntad divina, y su alma se elevará y alcanzará la perfección...

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise