Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/5760

5760 Embotamiento de la voz interior al resistir el espíritu...

3 de septiembre de 1953: Libro 63

No debéis resistir al espíritu dentro de vosotros si quiere expresarse... y quiere expresarse si estáis interiormente impulsados a pensamientos espirituales, en cuanto vuestros pensamientos siguen ocupándose de lo que no concierne al cuerpo sino el alma... tan pronto como tengáis que pensar en la muerte, en la vida después de la muerte, en Dios, en una responsabilidad ante Él, en vuestra propia inadecuación, en los errores y debilidades que vosotros mismos percibís como tales y que os hacen sentir insatisfechos y ansioso por dentro. Todas estas son expresiones del espíritu en vosotros, que quiere impregnaros con su voz, que exige vuestra atención frente a todas estas cosas que son las únicas importantes para la eternidad...

Todos estos son pensamientos que no tienen nada que ver con el mundo terrenal, sino que apuntan al reino espiritual, y tales pensamientos deben ser observados porque no aparecen en el ser humano por nada. Son amonestaciones y advertencias silenciosas, es la voz interior, que al ser humano no es reconocible como voz y que le dice lo mismo, que el ser humano debe reflexionar sobre sí mismo y no vivir indiferente, que no debe llevar solo una vida terrenal, porque a través de esto causa un daño indescriptible para su alma.

El amonestador en el hombre no calla, pero muy a menudo se pasa por alto, porque la voz del exterior es más fuerte y entonces ahoga la voz interior cuando los sentidos humanos están demasiado vueltos hacia el mundo. Entonces se embota contra la fina voz que suena dentro de él, solo abre los ojos y los oídos al mundo, y entonces corre el gran peligro de perder la capacidad de escuchar esa voz por completo... que pierde toda fe y ya no es capaz de ningún pensamiento espiritual. Cada ser humano, incluso el hombre mundano en medio de la vida, tiene minutos tranquillos en los que puede reflexionar sobre sí mismo si así lo desea...

A veces, todos se involucran en conversaciones que tocan problemas espirituales; en cada ser humano el espíritu que es parte de Dios busca expresarse... Porque Dios toca a todas las personas, y lo hace una y otra vez, porque quiere desviarlas de lo puramente terrenal y quisiera volverlas hacia lo espiritual.

Pero quien resiste al espíritu interior, quien rechaza todos los pensamientos que lo tocan, quien se cierra a sí mismo a toda instrucción desde adentro, impide que el espíritu en el obre por su propio perjuicio. Porque pierde vínculo con lo divino, él mismo rompe todos los puentes... permanece en la tierra y nunca podrá entrar en las esferas espirituales, incluso cuando su vida en la tierra haya terminado... Porque su alma es tan materialmente ajustada que no puede salir de esta esfera terrenal... está endurecida como la materia que fue sus pensamientos y aspiraciones en la vida terrenal... Y para esta alma el camino es infinitamente largo antes de que pueda llegar a la esfera del espíritu... porque es mucho más difícil de caminar que en la tierra...

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise