Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/5577

5577 El Espíritu de Dios en el hombre Jesús.... Discipulado....

14 de enero de 1953: Libro 61

Vosotros, los humanos, podéis estar llenos del Espíritu divino, si vivéis en el seguimiento de Jesús.... Como ser humano, Él no era diferente a vosotros, Su vida fue sola una lucha y un forcejeo contra los deseos que sentía como vosotros, pero que querría reprimir por amor a Mí. Su vida fue una vida de amor al prójimo, a quien veía necesitado y a quien querría ayudar. Lo que Él logró, vosotros los humanos también podríais lograrlo, si fuereis serios para recibirme en toda plenitud.

Su alma probablemente era del reino de la luz, pero no se reconocía como tal antes de que el hombre Jesús fue inundada con Mi Espíritu de amor. A veces Mi Espíritu hablaba de Él, luego el hombre de Jesús hablaba de manera sobrenatural sabio y asombraba a los semejantes.... Pero tan pronto como Mi Espíritu se escondió de nuevo, Jesús se sintió igualmente como hombre como vosotros y Su estado espiritual brillante a veces Lo confundió y lo asustó; Él estaba cerrado, pero se dirigió hacia Mí con un amor cada vez más íntimo, lo cual también Le dio la luz sobre Su tarea terrenal....

El hombre Jesús tuvo que luchar con todos los poderes que estaban en Su contra, tuvo que experimentar y sufrir todo lo que solo un hombre puede sufrir, porque Él os ha precedido el camino que vosotros también debéis recorrer y podéis con Su ayuda. Yo Mismo Le apoye con Mi fuerza de amor, la cual solicitó constantemente y adquirió a través de Su vida de amor. Y esta inusual provisión de fuerza de amor es la que Le permitió llevar a cabo la Obra de Redención....

Vosotros lo humanos también podríais lograr algo inusual si vosotros mismos quisiereis adquirir Mi fuerza de amor; pero os falta la voluntad que sin embargo fue desarrollado excesivamente fuerte en el hombre Jesús, pero nuevamente como consecuencia del amor que desarrolló en Sí Mismo. Su alma como alma de luz sintió la gran necesidad espiritual en su entorno, y es por eso que su voluntad de ayudar era tan fuerte, que estimuló al hombre Jesús al obrar en amor.... Vosotros también veis miseria espiritual y terrenal alrededor de vosotros, y si quisiereis ayudar, la fuerza también os llegaría.... porque la voluntad se tiene en cuenta.... Vosotros también podríais estar llenos del espíritu divino, porque toda obra de amor podría traeros Mi fuerza de amor y. por lo tanto, Mi Espíritu podría llegar a obrar en vosotros.

El seguimiento de Jesús no se podría pedir de vosotros humanos si no se pudiera cumplir. Porque hay enfatizar una y otra vez que Jesús recorrió Su camino en la tierra como ser humano y que todas cualidades divinas fueron Sus méritos adquiridos por Él como hombre, que no fue la Deidad Quien Lo determinó para Su camino de la vida, sino que el hombre Jesús sometió a la Deidad a Sí Mismo.... *bien entendido*: que el amor del hombre Jesús Me movió a una expresión ilimitada de amor, porque soy impotente frente al amor, porque Yo Mismo soy el Amor desde la eternidad....

El hombre Jesús Me ha vencido Conmigo Mismo, ha hecho lo que tenía que hacer Yo Mismo.... Lo que exige Mi ser primordial.... dejar actuar la fuerza de amor.... Y cada hombre que obra en amor Me obliga a un vaciamiento de Mí Mismo.... Pero esta obligación es el sentimiento más feliz para Mí a lo que siempre quisiera entregarme, pero que solo Me puedo entregar según Mi ley desde la eternidad, donde el amor se Me acerca.

El amor tiene que conectar el ser Conmigo, entonces se llena de Mi Espíritu, de Mi fuerza de amor y luego puede obrar en y Conmigo, entonces el hombre ha recorrido el camino del seguimiento de Jesús, que lleva a la unión Conmigo....

Amén

Traducido por Hans-Dieter Heise