Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/5528

5528 Persecución de los discípulos del tiempo final

8 de noviembre de 1952: Libro 61

Vosotros seréis atacados de la forma más violenta igual que Mis primeros discípulos, cuando haya llegado el tiempo en donde se trata de decidirse por Mí o contra Mí. Entonces cada uno que es por Mí, tendrá muchos enemigos el que Me defiende a Mí y a Mi Doctrina ante el mundo, y para entonces vaís a necesitar mucha fuerza, para poder hacer resistencia frente a las exigencias del mundo, de renunciar a Mí y retractando todo lo que hasta ahora habéis sostenido. Pero vosotros no temeréis al igual que Mis primeros discípulos pues, igual que ellos estaréis realizados de Mi Espíritu, confesando alegremente quien es vuestro Señor. Y vuestra voluntad será siempre, el continuar siéndome fieles, y puesto que sabéis sobre Mi Poder y Fuerza también, de modo que no temeréis a ninguno, que si bien pueden matar vuestro cuerpo, pero no a vuestra alma.

Y Yo quiero por eso bendeciros de que alcéis Mi Nombre, que confeséis ante vuestros semejantes, que únicamente Yo soy vuestra fortaleza. Es cierto que como Mis discípulos estaréis perseguidos, sin embargo, no sentiréis las vejaciones tanto y todo lo que os quiere hacer el enemigo a vuestra alma rebotará en vosotros, porque el escudo de la fe os cubre. E igualmente como Mis primeros discípulos, ganaréis también aún hombres para Mí, que mediante vuestro ejemplo serán guiados a la fe, que al reconocer una gran fuerza en Mi Nombre, volutariamente se entregan a Mí.

Y también estos recibirán la recompensa todavía, que Yo he prometido a todos los que creen en Mí, ellos también cosecharán la vida eterna y serán acogidos en el Reino de la Luz. Pero sólo los que Me confiesan públicamente, los que Me han encontrado, a los que Mi Palabra les ha llevado la Luz, que por su amor han alcanzado la fe viva, y que por lo tanto están también en la plena convicción de que Yo los salvo de todo apuro del cuerpo y del alma.

Sin embargo, el que no ha alcanzado esa profunda fe viva hasta el tiempo de la lucha por la fe, ese renuncia fácilmente a Mí, el mundo lo atrae aún más, y entrega irreflexivamente por eso, lo que para él debiera ser lo más alto en esta tierra, renuncia a Mí, porque no Me ha reconocido bien jamás.

Mas vosotros, Mis discípulos del tiempo del fin, vosotros debéis perseverar, y la fuerza para ello os será en abundancia dirigida, porque vuestra voluntad en permenecer siéndome fieles, os garantiza también Mi ayuda y Mi aprovisionamiento de fuerza y energía en medida ilimitada. En caso de que vosotros no pertenezcáis a los que Yo arrebataré, podéis perder sólo la vida, pero ésta no acabará antes, hasta que sea Mi Voluntad, pero entonces cambiáis en cambio una vida deliciosa en el reino espiritual.

Mas a Mí, vosotros Mis discípulos, no Me daréis a cambio de las promesas tan grandes que por parte de aquellos os den, que si bien pueden dar bienes terrenales, pero la eterna Bienaventuanza no os pueden dar.

En esta tierra sí que tendréis que luchar todavía, pero el triunfo es vuestro con seguridad, porque lucháis Conmigo y por Mí, lucháis por Mi Nombre y Mi Doctrina, combatís por la Verdad, por la Luz y con eso para vuestra Bienaventuranza también.

Amén

Traducido por Pilar Coors