Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/5326

5326 La bendición de Dios descansa sobre toda obra de Redención....

1 de marzo de 1952: Libro 59

Cualquier obra de Redención encuentra Mi bendición.... Quien esté sinceramente decidido a ayudar a aliviar la angustia espiritual tanto en la Tierra como en el más allá, puede estar seguro de que siempre encontrará Mi apoyo y que bendeciré su obra. Es siempre la voluntad la que es decisiva, no sólo la palabra, es decir, el hablar irreflexivo de una buena intención que carece de voluntad. Una y otra vez enfatizo que necesito obreros activos para Mi Reino, que hagan un trabajo muy urgente en Mi viña. Y esta obra debe entenderse siempre como la Redención de los seres atados que, siendo humanos en la Tierra, siguen caminando por caminos equivocados o, habiendo entrado en el más allá siendo inmaduros, tienen que soportar allí, en las tinieblas del espíritu, un destino desdichado.

Liberar todo lo atado y llevarlo desde las tinieblas a la luz, transformar el estado infeliz en uno bienaventurado.... en esto consiste la obra de la Redención, que siempre será bendecida por Mí porque se hace por libre voluntad, porque el amor a los infelices es la razón de esta obra de Redención. Y así sólo aquello que se hace por amor puede ser considerado y valorado por Mí como obra de Redención.... y de esta manera también tenéis aclaración, si y cuándo podéis estar seguros de Mi bendición....

Aprobaré todo aquello que ayude a una sola alma a elevarse. Ya sea que habléis palabras de amor a vuestros semejantes en la Tierra, ya sea que le deis testimonio de Mí y de Mi obra, ya sea que los exhortéis al trabajo del alma.... ya sea que oréis por los pobres almas oscuras en la Tierra o en el más allá y las instruyáis mentalmente para ayudarlas.... siempre que vuestra única intención sea ayudar, estáis actuando bien y con justicia y siempre experimentaréis Mi bendición.

Sólo hay unos pocos humanos que trabajan seriamente para Mí y Mi Reino, que se preocupan por el bienestar de sus semejantes o de los difuntos; Son sólo unos pocos los que conocen la gran angustia espiritual y quieren controlarla, y Mi amor también se dirige a estos pocos, lo que hace más fácil todo su trabajo y les permite tener éxito. Una mirada espiritual a los lugares de oscuridad, tanto en la Tierra como en el reino espiritual, ciertamente despertaría a los humanos y tal vez incluso los haría serviciales, pero este sería entonces un trabajo consciente que se haría por miedo, porque los humanos aún carecen de conocimiento y este debe adquirirse a través del trabajo del amor.

Cada ser humano llegará a ser sabiendo si vive de acuerdo a Mi voluntad, y pronto la angustia espiritual también se le hará reconocible. Pero no se presta la suficiente atención a Mi voluntad, es decir, Mi mandamiento de amor no es cumplido, y el efecto de este descuido es tan terrible, que los grilletes alrededor de las almas se hacen cada vez más opresivos, y es necesario ayudarlas a librarse de ellos. Pero esta ayuda sólo la puede prestar un alma amorosa, y por eso todo obrero a quien el amor le impulsa a la obra de la Redención es bienvenido ante Mí. Porque cuando sólo una alma se salva de las tinieblas, allí Mi amor lo recompensará mil veces y otorgará Mi bendición a aquellos que deseen servirme de esta manera.

amén

Traducido por Hans-Dieter Heise