Origen: https://www.bertha-dudde.org/es/proclamation/4922

4922 "Los mundos pasarán, pero mi palabra perdura...."

28 de junio de 1950: Libro 56

Los mundos pasarán, pero mi palabra permanecerá para la eternidad.... Y así ustedes, los humanos, recibirán Mi Evangelio en toda su pureza mientras habiten la tierra con el propósito de madurar las sustancias espirituales dentro de ustedes. Siempre será la misma Palabra, porque Yo nunca cambiaré y, por lo tanto, Mi Palabra, que se origina en Mí, tampoco puede cambiar. Ustedes, los humanos, pueden ciertamente hacer cambios por sí mismos, pero entonces ya no vivirán en la verdad, porque todo cambio de Mi Palabra significa error y entonces ya no es posible hablar de Mi Palabra, que originalmente se originó de Mí en toda pureza. Por eso he pronunciado las palabras: "El cielo y la tierra pasarán, pero mi palabra perdurará por la eternidad". Sin embargo, estas Palabras nunca significarán que un cambio sea imposible para las personas, pues entonces tendría que coartar el libre albedrío de las personas si quisiera evitar que una enseñanza errónea se difundiera en el mundo como Mi enseñanza. Mientras haya personas imperfectas en la tierra no será posible eliminar el error. Pero quiero ayudar a las personas a alcanzar la perfección a través de la verdad, por lo que debo purificar una y otra vez Mi Palabra de lo que las personas añaden en su imperfección; debo iluminar los errores y defectos de lo que las personas ofrecen a sus semejantes como enseñanza divina. De ahí que tenga que buscar siervos voluntarios en la tierra que estén dispuestos a recibir de nuevo Mi Palabra en su forma original, lo cual sólo es posible mediante la transmisión directa, a través de una manifestación evidente de Mi espíritu en el corazón del ser humano..... Pero esto garantiza la más pura verdad. (28.6.1950) Y, por lo tanto, Mi Palabra sonará siempre y para siempre con toda pureza en los corazones de unas pocas personas y será hecha accesible de nuevo por estas pocas a los compañeros que no pueden recibirla directamente. Así, Mi Palabra no pasará mientras haya gente en esta tierra. Pero también se presentará siempre a la gente la Palabra deformada que ya no tiene derecho a ser considerada como Mi Palabra. Porque el adversario trabaja contra Mí, y así trata de contaminar la verdad pura con el error para alejar a la gente de Mí. Y son demasiado ignorantes para rechazar esa Palabra que ya no corresponde a la verdad. Sólo se adhieren a la palabra "El cielo y la tierra pasarán, pero Mi Palabra permanecerá en existencia por la eternidad", según la cual creen tener la garantía de que la Palabra una vez pronunciada por Mí no puede ser alterada.... Pero mientras deje el libre albedrío al ser humano también es posible que deforme Mi Palabra pura sin que Yo se lo impida. Pero entonces ya no es Mi Palabra la que se les ofrece a ustedes los humanos. Pero Mi Palabra fluirá hacia ti una y otra vez desde la fuente que es inagotable y sólo contiene la verdad pura. Y quien sea serio encontrará siempre la fuente y extraerá de esta; no irá donde el agua se ha vuelto turbia sino que se refrescará con el agua de la vida; querrá beber el agua viva y también se le ofrecerá en cuanto su deseo sea serio. Mi Palabra es la verdadera agua de vida en cuanto no se ha enturbiado todavía, en cuanto es recibida clara y puramente desde arriba por los hombres, impartida por Mí a los que se presentan a Mí como vasos puros para que Yo los llene de Mi gracia. Mi Palabra está llena de fuerza, lo que, sin embargo, nunca se puede afirmar de la Palabra que ya ha experimentado muchos cambios debido a la voluntad de la gente. Esta Palabra es impotente, puede ser escuchada y difícilmente se abrirá paso en el corazón del ser humano, quedará sin efecto porque se ha convertido en obra humana que no tiene valor para la eternidad. Mi Palabra debe ser extraída de la fuente, debe desearse y ser recibida directamente de Mí y no se la negaré a nadie. Cada quien puede también sentir la fuerza en sí mismo mientras la gente permanece apática hacia una palabra que no es Mía, sino un medio de Mi adversario para apartar a la gente de Mí. Y por eso intenta contaminarla y engañar a la gente porque la verdad pura es su perdición, cosa que él reconoce muy bien. Sin embargo, ayudo a las personas y las guío hacia la verdad, porque sólo la verdad conduce a Mí y sólo la verdad las hace felices....

Amén

Traducido por J. Gründinger